Capitulo 33

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MARATON 1/3

Sabía que estaba equivocada, pero después seria mi momento para hacérselo saber, mientras tanto, solo me limite a escuchar en silencio lo que ella tenia que decir. 

—Yo fui la que lo confundió —confesó dándome una mirada repleta de culpabilidad— cuando tu nombre aparecía en nuestras charlas, mis caricias le hacían olvidar. En la cama le demostraba que era a mí a quien amaba, a pesar de que yo sabía la verdad, una verdad totalmente desconocida para él. 

—Gaeul... 

—Déjame continuar por favor —pidió con un poco de nerviosismo, y solo asentí— Nunca supe que paso entre ustedes, pero fui la mujer mas feliz del planeta cuando se alejaron. Pero no duro mucho, porque mientras yo pensaba en las cosas que podíamos hacer aprovechando que ya no estabas en el medio, él pensaba en las cosas que podía hacer para recuperarte. 

Mi diario, su rechazo, nuestra amistad tirada a la basura. Las imágenes de esa noche llegaban con mucha claridad a mi memoria, y el dolor... el dolor que sentía seguía teniendo la misma intensidad que hace un año atrás. 

—Gaeul esto no tiene sentido, no quie... 

—Semanas después fue su viaje a Daegu —Continúo, ignorando por completo mis palabras. Estaba decidida hablar, y no pensaba detenerse— Yo, quise acompañarlo —explicó con una débil sonrisa—. Pero él se negó. No me dio ningún tipo de justificación, solo dijo que me contaría en algún momento. Y es gracioso, porque hasta el día de hoy nunca lo supe —rio divertida y bajé mi mirada— Cuando volvió, su sonrisa volvió también, y me sorprendió, pero me alegré. Fue hasta que me contó quien lo había acompañado, y entendí todo. Su alegría dependía de ti y él no era capaz todavía de darse cuenta de ello. 

—Se lo que  piensas, y no es así —aclaré— solo fui su amiga. Él siempre me lo dejó en claro.

—Te equivocas —refuto mirando hacia la nada—. Dime Hyen, el día del incendio ¿no te diste cuenta de nada? —No respondí. Siempre creí que yo estaba equivocada, que fueron mis ansias las que jugaron conmigo— Ese día Hyen... ese día supe que lo había perdido. Por eso decidí dejarlo, le dije que estaba enamorado de ti, que no me amaba, pero él no hacía más que negarlo. Yoongi todavía estaba confundido ¿puedes creerlo? —Sonrió con amargura y mi corazón se oprimió tras sus palabras—. Entonces cometí mi último error Hyen —bajó su cabeza sin atreverse a mirarme—. Yo... yo me aproveche de su insistencia y de su ignorancia respecto a sus sentimientos, me aferré a él como el último intento, y mi egoísmo hablo por mi cuando le pedí que se alejara de ti si realmente me amaba. 

—Gaeul —reí con ironía negando con mi cabeza— él te eligió a ti ¿no lo recuerdas? 

—Si, recuerdo eso y muchas cosas más Hyen —Continuó— recuerdo con mucha claridad que a pesar de haberme elegido, él nunca más quiso tocarme de nuevo. Recuerdo también, su tristeza y desesperación cuando te fuiste, recuerdo las noches en las que tuve que ir a buscarlo a algún bar de mala muerte, llevándolo luego a su apartamento en donde se quedaba dormido después de llorar por horas. Pero sobre todo Hyen. Recuerdo con el dolor... que tu nombre salía de su boca. 

 

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