Capítulo 20

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Era chistoso como después de ir repetidas veces a la casa de alguien puedes tener tal confianza, recordaba la primera vez que fue a casa de Namjoon como apenas y tocaba el suelo, ahora movía tranquilamente las cosas de lugar sobre todo la ropa y libros que su chico insistía en nunca ordenar, algo curioso que aprendió mientras conocía más al omega era el poco cuidado que tenía sobre sí mismo, sólo ordenaba la habitación cuando ya tropezaba con sus propias cosas, la alimentación era otro dilema Namjoon tenía un pésimo hábito para comer y no porque quería mantener una línea o algo, Wheein aunque no pasaba mucho tiempo con ellos siempre se aseguraba de que Namjoon y Soobin tuvieran que comer, se dio cuenta cuando llegó de imprevisto a la casa en la tarde y descubrió con horror como este apenas había tomado un té y medio pan que encontró, cuando reclamo esto Namjoon se encogió de hombros diciendo "no sentía hambre" suspiró mientras recogía la última camisa que estaba sobre la silla del escritorio. Ya la habitación no parecía una avalancha de ropa. 

— ¿Qué pasó? —preguntó el causante principal del desorden inocentemente mientras se sentaba en la cama. Casi quiso chillar cuando se quitó los zapatos y solamente los pateó a un lado. 

—Viendo que cuando nos casemos me sacaras canas por estar todo el tiempo ordenando tu desorden. 

—Eh pero si ni siquiera nos hemos graduado —se quejo—. Además tu fuiste quien se metió en mi habitación y se puso a ordenarla. 

—¡No has dicho que no! —la emoción saltó en su pecho, en repetidas ocasiones había bromeando sobre que se casaran pero Namjoon siempre respondía "ni en sueños" era un avance ante sus ojos—. Ya verás trabajaré duro para que seas el novio hermoso del mundo y darte una vida cómoda —se acercó al borde colocando sus manos a casa lado de la cadera y a arrodillándose—. Tener todo para cuando tengamos un bebé ¡Uh ya tengo el nombre! Lo llamaremos S.. 

No pudo seguir hablando cuando Namjoon colocó los dedos sobre sus labios. 

—Oye cálmate, me vas a asustar. 

—¡No me cortes el rollo! Además ya no te puedes deshacer de mi —dijo con una sonrisa intentando ser amenazante, Namjoon se rió y negó con la cabeza divertido. 

La puerta abriendo de golpe hizo que volteara a mirar. 

—Fuchi apesta a romance cursi en esta habitación —tanto como el desorden de Namjoon el que Yeonjun entrará a la habitación sin siquiera avisar, Jin estaba agradecido de no haber sido pillados en una situación peor.

—Así sabrás lo que siento cada que entro en una habitación y están Soobin y tú —se quejó él levantándose. 

—Nosotros tenemos derecho a ser cursis, somos jóvenes —dijo fresco con una sonrisa adorable, lo conocía ya lo suficiente para saber lo que venía—. En cambio ustedes ya van a un paso de la tumba. 

— ¡Solo soy mayor que tú por 4 años! 

—Hasta tienes canas —fingió sorpresa acercándose a mirar su cabello ignorando sus reclamos—. No te preocupes cuñis yo te cuidare en el asilo. 

Volteó a ver a Namjoon quien se reía de él, bufo negando. 

—Oye también te dijo viejo a ti. 

—Namjoon se ve bien a pesar de su edad —dijo sonriente cruzando sus brazos por detrás de su espalda, como si fuera un niño inocente. 

—Deberían sacarte de aquí y no dejarte entrar más —cruzó sus brazos. 

—Tengo más tiempo que tú en esta casa, incluso me tienen bota de navidad. 

—Estoy seguro que la trajiste tú. 

—La envidia no es buena, te arruga más. 

Namjoon parecía bastante entretenido viendo como peleaba de forma infantil con Yeonjun, Jin no había tenido hermanos y por lo que sabía Yeonjun tampoco, varias veces se había sorprendido pensando en que si hubiera tenido un hermano sería muy parecido a la relación que tenía con chico de cabello azul. 

Sin Reglas [sin Estándares 2] Donde viven las historias. Descúbrelo ahora