Sin Reglas [sin Estándares 2]

Capítulo 11

🍁Mención de medicamentos, están escritos mal a propósitos para que no inventen 🙃

Jin siguió viendo la hoja sin poder creer lo que veía, lo más incómodo era que Jimin tenía una sonrisa de oreja a oreja que lo presionaba para hacer algo. Pero su cuerpo seguía paralizado. 

Seguía viendo la invitación de color negro con el listón dorado. 

Salía en grande como había sido invitado a la semana de la moda. 

—Jin por dios voy a creer que te va a dar un paro cardíaco —dijo Jimin finalmente asustado. 

—Es… repentino. 

Lo era realmente, la semana de la moda era un evento social de gran prestigio para la industria, donde las marcas de ropa más importante mostraban sus colecciones más recientes, Jin las conocía aunque nunca antes asistió a uno de ello, los modelos que participaban tenían una carrera considerable y eran los más nombrados, Jimin le había explicado que al ser su primera aparición sería su oportunidad de avanzar a un siguiente nivel. No podía sino temblar en su lugar, jamás pensó que llegaría a ese escalón, siempre fue más una fantasía que sabía que no se iba a cumplir y no pensaba mucho en ello, porque no sentía que le faltará algo más. 

—Se que es muy repentino, uno de los modelos ha resultado herido y no podrá participar, cuando pidieron recomendación salto tu nombre. 

Incluso entrando como reemplazo no quitaba lo emocionante, una pequeña sonrisa se formó en sus labios hasta que rápido se borro cuando noto la fecha. 

—Solo tengo cuatro meses. 

—Serán más que suficiente. 

Jin dirigió su mirada al espejo, su aspecto no había mucho que reprochar pero sí tenía sus ojos cansados e hinchados por las largas de los días que no había dormido, no estaba gravemente descuidado pero hacía semanas que ni siquiera revisaba su peso o hacía ejercicio frecuentemente. 

—Tengo que irme. 

No sabía si cuatro meses serían suficientes para ponerse en forma, salió del edificio dejando atrás a un Jimin preocupado, mientras iba en el auto hacia una lista mental de todo lo que debía conseguir para cambiar sus hábitos, comenzando con que solo dormía unas horas en la noche, llegó a casa con varias bolsas en su mano y con una sonrisa nerviosa en su cara, el apartamento estaba lleno de música y un agradable aroma dulzón sin ser exagerado, asomo su cabeza a la cocina encontró a Namjoon imitando un movimiento tierno con sus manos al ritmo de la música, no pudo evitar reírse llamando la atención de Namjoon que de inmediato se avergonzado. 

—Debí grabarlo, te ves adorable. 

—Idiota, no se supone que estés aquí. 

Namjoon se giró a la cocina para continuar cocinando unos panqueques que al parecer eran los causantes del aroma, invadió la cocina abrazando a Namjoon por la espalda, cruzó los brazos por el estómago dejando su cabeza contra el hombro. 

— ¿Sucedió algo? —preguntó Namjoon un poco más tranquilo. 

Una sonrisa volvió a cruzar por su cara, Namjoon noto la bolsa en sus manos, la dejó sobre el mesón para apartar la atención de ello. 

— ¿A que no adivinas qué sucedió? 

—No me gusta adivinar, soy malo. 

—Aguafiestas —bufo sacando la carta negra con el listón dorado, Namjoon la tomó para abrirla y leerla—. ¡Estoy invitado a la semana de la moda!