°|ГЛАВА 12|°

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_. ¡Oh lindo bebé! - chillo el Omega felizmente, cargando al cachorro hasta la sala - ¡Anoche te quedaste solito, pero me sorprendió mucho encontrarte aún dormido!

_. Mi lindo Omega - llamo jungkook por tercera vez, siendo ignorado - bebé…

_. Y anoche paso una estrella fugaz - seguía hablando el Omega con el cachorro.

_. Esta noche debemos entregar al cachorro a la otra manada.

_. ¿Qué?

Jimin se congeló, y dejando al cachorro se encaró al alfa.

_. ¿Cómo que hay que entregar al cachorro?

_. El líder de la mana del sur me pidió averiguar si había encontrado a un cachorro.

_. ¡¿Le dijiste sobre él?!

_. Yo no comenté nada sobre el cachorro - se apresuró a aclarar al notar como poco a poco se aguaban los ojos contrarios - según lo que me dijo, a una Omega de su manada se le había extraviado su cachorro y quería saber si lo encontré en mis tierras.

_. Pero…

_. Se que ahora debe de ser duro para ti hacerlo. Tu Omega se encariño y es razonable, pero no puedes separar al cachorro de sus padres biológicos.

Con lentitud acunó el rostro del Omega.

_. Si haces está buena acción, prometo llevarte a dónde tú quieras mañana.

_. Pero, cachorro…

_. El estará bien y con su familia, ¿No quieres que viva feliz con su familia?

Jimin puchereó, mirando al pequeño bebé en la sala.

Se sentía triste y desanimado al saber que debía despedirse del cachorro. Así que dando una mirada al alfa asintió y con voz temblorosa respondió;

_. Bien. Esta noche podrás llevarlo - murmuro sin ánimos - pero mañana me llevarás con Tae.

_. ¿Con el humano?

_. Si. Quiero ver a taehyung.

Jungkook suspiro, el Omega se había comportado bien por todo el poco tiempo que llevaba consigo, así que aceptando su petición, peino un par de mechones.

_. Si es lo que quieres, lo haré.

_. ¿También me compras más dulces?

_. Si, tambien te traeré más dulces - asintio - pero no llores ¿bien?

_. Umjun…- Murmuró al borde de las lágrimas, estaba siendo dramático, pero quería más dulces de fresa en su nevera.

_. No me gustaría verte llorar - dijo el alfa ansioso- no sé qué haré para calmarte, por favor bebé no llores.

Suplico el pelinegro, intentando hablar con un tono más bajo y suave. Pero el Omega solo lloró más por aquello.

_. No, no, no, tranquilo. Si quieres puedes pasar un último rato con el cachorro antes de llevarlo ¿Que dices?

_. Si…- respondió en medio del llanto y celebrando por obtener lo que quería

(....)

El Omega pasó el resto del día junto al cachorro, intentando convivir lo suficiente como para no ponerse triste otra vez.

_. ¿Cree que me dejen ver al cachorro si vamos de visita? - preguntó con esperanza el omega.

_. No estoy muy familiarizado con la manada que está al otro lado de mis tierras así que no podremos cruzar a menos que seamos invitados.

моята омегаDonde viven las historias. Descúbrelo ahora