24: Traitor

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Víktor y Horacio estaba patrullando juntos, lles tocaba a ambos turno de noche y decidieron estar juntos para no tener aguantar a los agentes con lo que compartían turno aquella noche, ninguno les caía especialmente bien excepto Yuu, pero él ya iría con Nikolay.

-Oye, decir esto a lo mejor es un poco precipitado, pero llevamos 3 horas y no a pasado nada muy grave, únicamente atracos y robos de vehículos- Habló Horacio con tono aburrido, parándose en un semaforo.

-Tienen que estar tramando algo, si no, no me explico- Horacio asintió y siguió conduciendo una vez el semaforo se puso en verde.

Sonó una alerta y el comisario le leyó, era larga y eso significa que era algo importante.

-Ve a la última alerta, de camino te explico- Horacio asintió y empezó a conducir más rápido, activando las sirena sonoras y lumínicas.

-Vale, te explico, al parecer una persona a escuchado un fuerte disparo mientras conducía que provenía cerca del puerto, y viendo en el GPS, el aviso es cerca de la sede- Horacio apretó el volante, nadie iba al puerto a intercambiar drogas, se lo contó Gustabo, y menos por la noche. Si algo pasaba era por una pelea, ya que en el puerto había seguridad y un intercambio es peligroso en ese lugar.

-Ponme la frecuencia de radio 17.062 por favor, necesito avisar a los chicos- Víktor asintió y le programó la frecuencia en su radio.

-Si alguien me escucha, por favor, esconderos, la policía está llendo para allí- Dijo Horacio alterado.

-Lo intuimos, pero Lamar no vuelve, vino con Rosas y ninguno nos contesta- Contestó el chico nuevo llamado Raúl, se le notaba nervioso.

Horacio pensó en lo peor, ya que pensó que Rosas le habían traicionado, por lo que apretó el acelerador para llegar más rápido...

Al llegar al puerto se bajaron de coche, sacando las carabinas del maletero y empezando a hacer perímetro hasta que llegara al menos otro patrulla.

Cuando llegaron los compañeros, le indicaron que hicieran perímetro mientras que que ellos buscaban pistas entre los enormes palés del puerto. Víktor se dirigió a la derecha y Horacio a la izquierda, acordando llegar al medio una vez que no hayan encortado nada.

-¡Lamar!- Comenzó a llamar Horacio una vez estaba lo suficientemente mente lejos para que los otros adentes no le escuchen.

-¡Rosas! ¡Sí alguno me escucha que de un golpe al metal o algo!- Después de decir eso se escucha tres golpes irregulares, por lo fue deprisa pero con cautela a la zona de donde provenia el sonido, viendo un rastro de sangre que acababa en un charco detrás de una de esas enormes cajas metálicas, empezando a escuchar sollozos ahogados a medida que se acercaba.

Cuando Horacio se dispuso a ver lo que pasaba se quedó en shock durante unos segundos, viendo a Rosa con una herida en la cabeza y esposado a unos barrotes que rodeaban el palé, también estaba amordacado.
Por el otro lado, Lamar estaba delante suya en ese momento, con un disparo en la frente y los ojos en blanco, estaba muerto en el suelo.

-No no no no no- Empezó a decir Horacio, agachandose para sentarse en el suelo y colocar a Lamar en sus brazos he intentar notar su pulso poniendo dos dedos en su cuello. No tenía pulso.

Escondidos | Gustacio AU [SEMI-CORREGIDO]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora