Escondidos | Gustacio AU [SEMI-CORREGIDO]

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-¡No, papá para porfavor!-

Horacio se levantó de la cama con pocas ganas, mirando el día y la hora en su teléfono.

26 de Junio
06:01 a.m

Sonrió cansado y se fue al baño a ducharse con agua fría para intentar quitarse el cansancio. Se miró al espejo y vio una espinilla en su mejilla, frunciendo las cejas y acercandose al espejo para quitársela.
Se puso ropa interior y se fue a la cocina, encontrando una pequeña sorpresa.Víktor estaba esperándole con una bandera bisexual.
- Sabes a donde vamos hoy ¿Verdad? - Dijo el más alto emocionado, yendo a abrazar a su hermano.
- Vamos al desfile. - Contestó Horacio algo desanimado y se separó del abrazo, dirigiendose a la nevera.
- ¿Qué pasa? ¿Al final no quieres ir? - Preguntó Víktor, viendo cómo su hermano únicamente sacaba un zumo de naranja del frigorífico.
- No, no es eso, es que tengo los niveles de serotonina bajos. - Rió sarcasticamente mientras se ponía el zumo en un vaso.
- No irás a tomas solo eso, ¿verdad? - Horacio miró su vaso e hizo una mueca con la boca, en verdad llevaba casi todo la semana alimentándose de zumos y batidos, y eso se nota a en su cuerpo que de normal ya es delgado. - Te voy a preparar tartines. - Horacio le miró.
- No es- - Viktor le puso un dedo los labios.
- Has bajado casi seis kilos en 5 días, ¿de verdad crees que no voy a hacer nada al respecto? - Horacio miró al suelo y Víktor le quitó el dedo de los labios...
Después de 6 minutos, las tostadas estaban terminadas y Víktor se sentó al lado de Horacio, dándole el plato, esperando a que se las comiera.
- Y que después no se te olvide la pastilla. -
- Que sí... - Protestó Horacio con muchas i, empezando a comerse las tartines[...] Cuando se las terminó se tomó la pastilla, y cuando iba a su habitación su hermano le agarró el brazo.
- A ver. - Horacio rodó los ojos y se acercó a él y se abrió la boca con los dedos y movió su lengua para demostrar que se la había tragado. Víktor le dio "el visto bueno" y le dejó irse a su cuarto.
Horacio entró a su habitación y cerró la puerta, tumbandose en su cama justo después. Tomó su teléfono, revisando si tenía algún mensaje nuevo. Tenía unos de Gustabo, recordandole que iban a hacer hoy y que tenía una sorpresa para él. - Cuál será la sorpresa. - Se preguntó Horacio, animando se un poco.
Se pusó los auriculares y se metió a Spotify, poniendo su Playlist de Girl In Red mientras esperaba a que se hiciera más tarde[...]

Ya eran las 18:07h, y Horacio estaba maquillando un poco a su hermano. - No te muevas más o si no tendré que repetir el eyeliner. - Dijo Horacio concentrado.
- Vale, vale, pardon. -Contestó Víktor con tono alegre.
Horacio estuvo unos minutos más maquillandole, y cuando terminó se alejó un poco de él y le miró con una sonrisa. - Muy gay, perfecto. - Ambos se rieron por las palabras del pelimorado.
- Je t'aime Horacio. -
- Yo también te quiero poste de luz. - Ambos volvieron a reírse, está vez a carcajadas, ya que el hermano mayor no se esperaba esa respuesta...
Antes de salir, ambos revisaron sus outfits.
Horacio llevaba una falda azul, un crop-top morado sin mangas, una máscara hasta la nariz rosa fucsia y unas botas con muchos cierres negras. Llevaba su cresta recta, y se maquilló la parte de la cara que se le veía con la bandera Bisexual.
Mientras que Víktor iba con una camiseta de cuadros roja encima de un camiseta de tirantes blanca. Con unos pantalones banqueros cortos y unas zapatillas blancas. Su maquillaje era sencillo y natural, lo único más llamativo era su eyeliner. [...]
Una vez llegaron a la plaza central empezaron a buscar a Gustabo entre la multitud. - Allí está. - Dijo Víktor, indicándole a Horacio donde estaba para ir juntos hacia él.
- Hola, cariño. - Dijo Horacio, abrazando a Gustabo, el cual se sorprendió al verle.
- Te queda todo genial, aunque me sigo viendo enano incluso con plataformas. - Gustabo llevaba unas botas con plataformas promedio, un vaquero hasta la rodilla y un crop-top ancho de arcoiris. Y al igual que Víktor, lo único llamativo en su maquillaje era su eyeliner.
- Ya, a demás de que mis botas también tienen plataformas. Pero eso no imparta, ¿cuál es mi sorpresa? - Gustabo sonrió y le dio la mano, llevándolo hacia donde tenía la camioneta. Víktor les estaba siguiendo.
- Víktor, ¿te importa no venir? - Gustabo le giñó un ojo, el peliplatedo ya lo sabía, se lo había contado.
- No me importa, no. - Después de esto, los hermanos se despidieron y Gustabo le llevó al ayuntamiento, donde estaban las carrozas...
- Gustabo, no me digas que- - Dijo Horacio al ver a donde estaban llegando.
- Si, fue difícil tomar una plaza, pero tengo contactosss, y... Bueno, iba a decir paciencia, pero eso no. - Ambos se rieron, y cuando bajaron, Horacio casi tira a Gustabo al suelo por el abrazo que le dio.
- Te amo. - Le susurró Horacio.
- Yo más. - [...]

Eran ya las 19:19 h, y Conway ya había llegado del trabajo después de 24 de servicio, las últimas se aguantó en su oficina, ya que si salía era muy posible que le diera unos cuantos porrazos a alguien, ya que odiaba el día del orgullo, el mes también, pero más ese día, todo el mundo con banderas, incluso sus agentes.
Tampoco podía echarlos a todos, se quedaría sin malla, así que se limitaba a hablar con los comisarios e inspectores que, según él, no apoyaban a la comunidad.
Fue a la cocina, viendo que los platos se habían quedado en el fregadero, los miró con molestia y los dejó allí, tomando una botella de whisky de su armario con bebidas alcoholicas y fue de camino a su habitación.
Cuando entró hizo un gruñido, ya que tenía algunos trajes sucios. Así que dejó la botella en su escritorio y decidió hacer la colada, no le gustaba el desorden. Pasó también por la habitación de Víktor, solo tenía su ropa interior en su propia cesta, así que la dejó allí y fue a la habitación del menor.
Cuando entró suspiró, solo tenía el pijama en la cama, pero cuando iba recojerlo notó que había una sudadera gris debajo de su cama, que, aunque le sonaba familiar, no le prestó atención, hasta que que cuando se agachó para sacarla, escuchó es sonido de una bolsa plástica, dejando la ropa en el suelo y agachandose del todo para alcanzar la bolsa[...]

Gustabo y Horacio estaban en la segunda carroza, saltando de la emoción, mientras cada uno ondeaba su respectiva bandera.
Todo iba bien. Víktor y su novia estaban en la "zona" del desfile donde estaban las personas del espectro asexual, hasta que el peligris escuchó un grito que le hizo que su sangre se helara.
- ¡HORACIO CONWAY PÉREZ! - Era su padre, buscando a gritos a su hermano. Víktor rápidamente le mando un mensaje, pero al ver que ni siquiera lo había leído fue a la carroza donde estaban...
Al llegar gritó su nombre, que fue mala idea, ya que se dio cuenta de que su padre le había escuchado.
- ¡Horacio! - El nombrado se giró para ver a su hermano yendo justo detrás de la carroza, y mientras le decía algo levantó lijeramente la mirada, viendo a su padre a casi 5 metros de Víktor.
- Él está a- -
- ¡Víktor, cuidado! - El hermano mayor se apartó, viendo a su padre saltar a la escalera de la carroza, dedicándole una mirada de odio antes de subir del todo.
Todo parecía estar a cámara lenta en aquel momento...

Conway estaba sujetando a Horacio del cuello contra una pared, el cual tenía un labio roto y moretones ocultos por su maquillaje corrido.
- ERES UN PUTO MARICA DE MIERDA, TE ODIO. NUNCA SERVISTE PARA NADA, OJALÁ TE HUBIERAS DESANGRADO AQUELLA PUTA MADRUGADA. - Víktor, el cual los llevaba buscando un tiempo cuando los perdió de vista, se abalanzó hacía su padre cuando le vio, intentando que soltará a su hermano.
- ¡No, papá para por favor! -

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Si se lo preguntan, sí tiene que ver la canción que he puesto más la Playlist que H está escuchando con su recaída, y os dejo todo arriba de esto.