Este corazón roto [TERMINADA]

Epílogo

Cuatro años después...

Como todas las mañanas, Poppy condujo el Beetle hacia Wandsworth mientras ella comía un croissant relleno de chocolate y, a su lado, Bobby un puppuccino.

Era una mañana fantástica de primavera, con el cielo despejado y el sol brillante. Los árboles empezaban a florecer y el tiempo era agradable, con temperaturas suaves.

Había una ligera sonrisa en sus labios mientras su nuevo CD de música de los setenta se reproducía y la pegajosa melodía disco inundaba el interior del auto.

Unos minutos después, ingresó en el estacionamiento junto a una amplia propiedad de estilo georgiano y estacionó el Beetle. Luego abrió la puerta del copiloto y Bobby saltó sobre el pavimento, agitando todo su pelaje. Ella le acarició las orejas mientras cargaba una caja con accesorios y activaba la alarma automática del auto. Al inicio le había costado acostumbrarse a las nuevas funcionalidades de su renovado Beetle. Aún se trataba de su mismo auto, pero solo conservaba el color rojizo, todo lo demás había sido actualizado y modernizado. Jack había afirmado que si insistía en conservarlo y él también debía utilizarlo, lo mínimo que podía hacer era garantizar su buen estado.

Poppy enfiló el camino hacia la entrada y se detuvo frente a la fachada de la propiedad, inspeccionando la placa grabada sobre la puerta.

Refugio de mascotas Wilhelm Foster.

Dedicado a Evie Carter y Syla Sinclair.

Una sonrisa estiró sus labios y limpió la ligera capa de polvo que había caído sobre el metal.

—¡Buen día, Poppy! —dijo una voluntaria al verla.

—Hola, Rachel —respondió.

Dentro del refugio, el ambiente era movido como todos los días.

Poppy se desplazó por la propiedad. Saludó a los voluntarios que encontraba en los pasillos y visitó cada área para hablar con los encargados. La mayoría del personal era nuevo, pero también había caras conocidas de colaboradores y voluntarios que habían decidido acompañarla en el desafío de empezar otro refugio.

Cuando Poppy había compartido su idea con Laurie, ella se había ofrecido a brindarle todo el apoyo que necesitara. El plan para el nuevo refugio había empezado hacía poco más de un año y habían avanzado con calma, equilibrando sus responsabilidades con el refugio Eve Carter y el nuevo.

El capital se había formado con una parte de los ahorros de Poppy y de la herencia que su abuela le había dejado, una contribución de Laurie y Adam y el respaldo de su mayor benefactora, Alina Foster, la madre de Jack.