Después del fiasco del desayuno que tuve con Abner, las cosas mejoraron, me dijo que quería comprar una gorra pero cuando íbamos de camino a la tienda de ropa nos detuvimos en la fuente de los deseos .
-Pide un deseo - me dijo Abner dejando una moneda en mis manos , cerré los ojos y lancé la moneda a la fuente - ¿Qué pediste?-.
-Es secreto, es tu turno -.
Abner cerro los ojos y lanzo su moneda.
-Listo , ven antes de comprar la gorra por qué no vemos los vestidos y trajes de graduación-.
-Falta un año Abner-.
-Que tiene , será divertido-.
- Ok, vamos - .
Entramos a la tienda de traje y vestidos ,tomamos unos y entramos a los probadores
-Este me gusta- dijo Abner.
-Espera, quiero ver- le dije terminando de acomodarme el vestido que me estaba poniendo - Listo , déjame ver -
Abner traía un traje negro con una corbata negra con rayas blancas .
-Tengo corbata de Bettlejuice - dijo para hacerme soltar una gran carcajada -Ven vamos a tomarnos una foto, me gusta tu vestido rojo sangre-.
Nos tomamos miles de fotos en el espejo, él con su corbata de Bettlejuice y yo con mi vestido rojo sangre.
-Asi nos veremos en la graduación - le dije riendo.
-Si ,así nos veremos, vamos a cambiarnos - .
Cuando salimos del vestidor lo tome del brazo y le dije
-Ahora si ,vamos por tu gorra - .
- Vamos - .
Entramos a la tienda de ropa y lo vi caminar por algunos pasillos, mientras yo solo veía algunas playeras , de repente Abner jalo mi brazo con un poco de fuerza.
-¿Qué pasa?-.
-Vamonos de aquí , correle , rompí una playera -.
-¿Cómo que rompiste una playera?- .
-Camina Bodoque, rápido -.
Entre en pánico total , de verdad no sabía que hacer así que solo salí corriendo de la tienda con Abner pero ,como siempre, la desgracia me persigue.
-Jovenes, un momento - dijo el guardia de seguridad de la tienda.
-¿Qué pasa?- dijo Abner escondiendo su risa.
-Permitanme revisar sus mochilas, por favor -.
-¿Las mochilas por qué?- pregunté confundida.
-Al parecer se robaron unas gorras de la tienda - dijo el guardia mientras abría la mochila de Abner - Si ,estás dos gorras - creí que era una especie de broma de mal gusto pero no , de la mochila de Abner salieron dos gorras con las etiquetas puestas - Me van a tener que acompañar-.
-Pero ella no hizo nada -dijo Abner.
-Pues eso se lo la van tener que explicar al gerente y a sus papás por qué son menores de edad ¿Verdad?-.
-Si ,lo somos- dije con lágrimas de rabia y furia , de verdad no podía creer lo que Abner había hecho.
-Caminen ,por favor - seguimos al guardia hasta una pequeña oficina, nos sentaron en una silla y nos pidieron nuestros datos, por si no fuera bastante mi problema, el gerente resultó ser paciente de mi mamá.
-Esperen aquí mientras llamamos a sus padres- Dijo el guardia mientras salían de la oficina, cuando la puerta se cerró ,Abner se atacó de la risa.
-¿De que te ríes tarado?- le reclamé enojada -¿Tienes idea en el problema que me metiste?-.
-Ay Bodoque no es para tanto-.
-¡Abner, van a llamar a mi mamá! -.
-¿Y qué?- .
- ¡Y que se supone que estamos en la escuela!- dije muy enojada y con lágrimas de frustración.
-¿Por qué lloras?- .
-Por qué te quiero matar y no puedo - le dije tratando de calmarme - ¿Por qué lo hiciste? Tienes dinero suficiente para pagar esas estúpidas gorras-.
-Nunca había robado nada, quería saber que se sentía -.
-Felicidades imbécil, eres el peor ladrón del mundo- le dije enojada - y resulta que también eres el peor amigo de todos-.
-¿De que hablas?-.
-¡Hablo de que siempre me insultas , me haces sentir menos , minimizas lo que siento y encima me involucras en tus tonterías! ¡Nisiquiera se cómo es que le digo a todos que eres mi mejor amigo ,si eres el peor de todos los amigos que existen en esta tierra!- tome aire para calmarme un poco - pero la culpa es mía y tienes razón ,soy una pendeja por seguir siendo tu amiga , por seguír dejando que duermas en mi casa y por seguir hablando contigo - quería seguir gritando pero la puerta se abrió de nuevo.
-Niño, llegaron por ti- dijo el guardia asomándose -tu hermano pago las gorras y vino a recogerte -.
-Ok-.
-¿Me vas a dejar sola?- le reclamé aún más.
-Te hablo al rato - dijo saliendo de la oficina.
Minutos después la cara furiosa de mi mamá apareció en la puerta de la oficina.
-Vamonos ahora- fue todo lo que me dijo.
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La flor que nunca me regalaste
Lãng mạnUna historia donde lo único que vale la pena ,es la amistad más loca y extraña de todas