Abner se quedó conmigo hasta que pude controlar mi llanto y termine de procesar la información que me habían dado , inevitable mi mejor amigo , el niño que literalmente me leía el pensamiento, el niño que siempre estaba para mí , iba a morir mucho antes de que pudiéramos terminar la preparatoria, era horrible, de verdad horrible y encima él me pedía que fingiera y escondiera todo mi dolor y el suyo.
-Bodoque, me tengo que ir, mi mamá quiere que duerma en mi casa -.
-Si - le dije limpiandome un poco mis lágrimas que aún escurrían - Espera -le dije jalando su brazo.
-¿Qué pasa?- .
-No es cierto lo que te grite en el centro comercial, no eres un mal amigo-.
Abner sonrió un poco y después me dijo
-Si lo soy pero lo hice por qué te estaba preparando para el futuro, nadie te puede tratar mal Lucecita, no lo permitas-.
Mis lágrimas se hicieron presentes, otra vez.
-No me digas eso , siento que te estas despidiendo -.
-Lo estoy haciendo, lo haré poco a poco por qué tal vez después no tenga tiempo para hacerlo y solo me importa despedirme de ti - me volvió a abrazar de forma dulce y me dio un beso en la frente -Ya me tengo que ir , mi mamá me está esperando,nos vemos mañana en la escuela-.
-Si ,nos vemos-.
-Vamos Abner , yo te llevo- le dijo mi papá tomando su hombro.
Mi papá y Abner se fueron y mire a mi mamá con mucha rabia.
-¡¿Por qué me hiciste esto?!- le dije llorando - ¡¿Disfrutas mi sufrimiento o algo así?!-.
-Hija, Abner me lo pidió -.
-Pero es mi mejor amigo y soy tu hija ,no me puedes tratar como uno más de tus pacientes, soy tu hija- le dije para después limpiarme las lágrimas - ¿Desde cuándo lo sabes?-.
-Lo supe poco después de cuando le sangro la nariz , cuando fueron al parque de diversiones - Dijo avergonzada - El día de la toma de la escuela, nos confirmaron lo que más temiamos- dijo mi mamá con un hilo de voz - Hija , te juro que hago todo lo que puedo pero ya no hay mucho que hacer y... - mi mamá tuvo que hacer una pausa para tomar aire - Él no quiere el tratamiento y es respetable, por qué es muy invasivo -.
-Él era tu caso difícil ¿Verdad?-
-Te juro hija que es el más difícil de mi carrera - mi mamá se limpiaba las lágrimas y trataba calmarse pero no funcionaba , sus lágrimas y las mías salían sin control -No quiero verte sufrir mi niña- .
Abrace a mi mamá para llorar y llorar hasta que mi papá regresó y ya casi era hora de dormir, así que subí a mi habitación y me tiré en la cama para llorar un poco más sobre la almohada , saque mi teléfono y lo conecte solo para darme cuenta que tenía muchísimo mensajes de Fernando y de Samara, sabía que tenía que darles algunas explicaciones pero por ahora solo quería dormir y olvidar lo que estaba pasando a mi alrededor pero una llamada impidió que lo hiciera.
-Hola Abner ¿Qué pasa?-.
-Queria saber cómo estabas ¿Aún estás llorando?- .
-Un poquito-.
-Mentirosa-,
-Me conoces-.
-Si , bastante pero no quiero que llores ,¿Recuerdas lo que te dije en el funeral del papá de Aarón?-.
-Si , que solo los hipócritas lloran-.
-Tu eres la única que no tiene permiso de llorar , siempre has estado conmigo y fuiste la única que me recibió en su casa -.
-Ya no me digas más esas cosas, por favor-
-Esta bien ¿Hablaste con Samara?-.
-No , tengo muchos mensajes de ella y de Fernando también, definitivamente tendré que dar explicaciones pero no quiero hablar con nadie- .
-No te preocupes, ya inventaremos algo mañana ahora descansa -.
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La flor que nunca me regalaste
RomanceUna historia donde lo único que vale la pena ,es la amistad más loca y extraña de todas