ESA NOCHE

¿Celosa?

CLARA.

11:23 AM.

Escucho una voz de una chica mientras bajo de mi habitación aún en pijama. Carlos se encuentra delante de mí, y se dirige a la cocina y lo escucho hablar:

—Oh no, ¿Qué hace está maniática aquí?

No entendí de qué hablaba hasta que me coloque junto a Carlos. Hay una chica rubia junto a Thomas la cual dirige su mirada hacia mi. Parece un robot porque en el momento en que me vio, me di una escaneada de arriba a bajo.

—¡Hola! —Saluda a carlos y luego me observa nuevamente—¿Y tú quién eres? 

Pero antes de presentarme y decirle hasta que como va a morir, con nada de animo, alguien más habló. Con un tono de molestia que es obvio, no se necesita ser muy inteligente para saber que Thomas aún está de mal humor.

—Ella es clara, mi hermana, brea. —Soltó mucho bastante frío..

—Ah, tu hermana, la adoptada.

—Si ¿Algún problema?

Brea lo miro confundida para luego voltearse a mirarme como si fuera algo jodidamente asqueroso.

—¿Por qué tan a la defensiva? —preguntó ella sin comprender porque Thomas esta de tal manera con ella. Tal vez él no suele tratarla así.

Bienvenida al grupo, chica.

Veo como se voltea y se acerca bastante a Thomas quien parece querer desaparecer.

—¿Te levantaste de mal humor? —Pregunta ella en una voz tan... 

Al fondo pude ver a charli mientras ignoro la conversación entre Thomas y su amiguita.

—Dios santo, y yo que pensaba que esto no podía empeorar más. — Carlos dice mientras cruza por el lado de thomas abriendo la nevera y sirviéndose un vaso de jugo.

—Que asco.—Brea soltó de pronto con su vista fija en el vaso de Carlos.

—Así mismo reaccione cuando te ví entrar a la cocina.

Carlos se dirige a dónde estoy al igual que charli, antes de irme con ellos a la sala, le doy una mirada a Thomas, quien solo sonrió como si le hubiera dado gracia lo que yo intentaba transmitirle con la mirada.

Al salir Charli me pasa una taza de chocolate caliente.

—Esto es para que te calmes, no quiero limpiar más cadáveres. —Se sienta en el mueble, Divertido.

Tome la taza y lo miro confundida ¿De qué me habla? ¿Será que vio que brea no me cae bien? Por qué si es de ella entonces si tengo ganas de matarla y eso que apenas me a hablo.

Cálmate, ni la conoces.

Me siento en el sillón soplando el chocolate mientras mi mirada está fija en la entrada de la cocina. ¿Porqué se tardan tanto? ¿Que tanto tienen que hablar? ¿Tienen Miles de años que no se ven o qué?

—Espero que ella no te caiga bien, porque de ser así, me sentiré traicionado. — Carlos rompe el silencio mientras mete un pan dentro del jugo alegremente.

—Apenas la vi y me dió malas vibras. —Le dije sinceramente. Porque es la verdad, algo me dice que no me podría conllevar con ella. Pero si se llegara a quedar -que dios no quiera- me tendría que acostumbrar ¿No?

—Malas vibras es poco, no te imaginas la clases de cosas que hace para llamar la atención y para arruinarle la vida a los demás.

—¿Qué ha hecho? —Pregunto curiosa.