En la audiencia el ambiente aún era tenso y más cuando el juez finalmente llegó, todos se pusieron de pie para recibir al juez y finalmente llegaría la hora de hablar, tratar de mediar el asunto o ver si el divorcio era concebido.
Juez: Da inicio la cesión tiene la palabra el demandado – esto desconcertó a Mayte pues la palabra debía ser otorgada a demandante no al demandado.
Mayte: Protesto su señoría – Mayte se levantó del asiento.
Juez: No a lugar – Mayte con esto supo que esto ya estaba perdido y es que José Manuel con sus contactos pudo haber sobornado al juez lo que complicaba las cosas.
Por su parte José Manuel comenzó a relatar una historia que no tenía cabida en la realidad pues ponía a Isabel como la mala del cuento, que ella era la que le había sido infiel y todavía tuvo el descaro de mostrar una fotografías cuando estaba besando a Carlos, Mayte intento intervenir, pero simplemente sus intervenciones fueron negadas, el juez tomo las fotografías como evidencia y después dejo hablar a Isabel, aunque el juez solo se dedicó a quitarle veracidad a su relato ya que no había pruebas con esto José Manuel pidió el divorcio, pero al igual la custodia de su hijo y el juez los cito para una nueva audiencia para hacerles saber su veredicto final, así acabo esto con un montón de injusticias y ambas hermanas las ponían contra la espada y la pared.
Mayte: Esto ni siquiera fue audiencia justa – se levantó frustrada.
José Manuel: Creo que ya sabes quién tiene las de ganar, verdad mi amor – acaricio la barbilla de Isabel.
Isabel: NO ME TOQUES – lo empujó molesta.
Mayte: De seguro tu compraste a ese juez – le reclamo.
José Manuel: Piensa lo que quieras, pero da por hecho que nuestro hijo vendrá a casa conmigo y crees que te permitiré verlo – rio.
Isabel: Eres el peor hombre con el que pude haberme cruzado – estaba al borde del llanto.
José Manuel: Gracias y mira la única cosa que te digo es que si quieres estar con tu hijo es estar a lado mío así que Isabel esperare con ansias la siguiente audiencia – se retiró junto a su abogado.
Mayte: Es que esto no puede ser – golpeó la mesa frustrada.
Isabel: Creo que nunca podré ser libre de nuevo, deje de serlo en el momento que me case con el – rompió en llanto y Mayte solo la abrazo pues ambas estaban impotentes ante este hecho.
Ivonne e Ilse llegaron a la casa de esta última y con esto ala güera tomo su teléfono para marcar a una persona que conocía a la perfección, sabía muy bien que el podría ayudarles a dar con el paradero de Mimí.
Ilse: Rubén tengo un nuevo trabajo para ti – dijo al teléfono.
Rubén: Dirás güera hermosa a quien debo investigar ahora.
Ilse: Se llama Irma Angélica tiene 25 años de edad con una niña de 7 años, en un rato paso a dejarte una foto y más información sobre ella, pero necesito que sepas que no se por donde puedas empezar a buscar ya que no sabemos nada de ella – le hizo saber.
Rubén: Será complicado, pero si pude dar con el paradero de tu madre que no pueda con ella – sonrió.
Ilse: Gracias en un rato nos vemos – acabo con la llamada.
Ivonne: ¿A quien le marcaste? – la miro.
Ilse: Es un investigador privado que conozco desde hace mucho, el fue el que me ayudó a saber dónde vivía Mayte después de nuestro encuentro – sonrió al recordar su primera noche juntas – lo importante aquí es que necesitamos toda la información posible de Mimí y una fotografía, ¿tendrás una? – miro a su amiga.
Ivonne: Las fotos de la fiesta - comento rápidamente.
Ilse: Mayte no las puede dar entonces yo se las pido, por favor trata de calmarte voy a ir a ver a Mayte a su departamento ya que me quedé de ver con ella ahí – tomo su bolso.
Ivonne: Si no te preocupes yo voy a estar bien cualquier cosa me avisas – ambas mujeres salieron del departamento y se despidieron para tomar caminos distintos.
Mientras tanto Fernanda finalmente abrió los ojos y ahí pudo ver a Claudia tomándole su mano, frente a ella estaba Héctor lo que la hizo pensar lo peor, pero el agarre de su gemela y sus palabras vaya que la hicieron calmarse.
Claudia: Hermanita finalmente despiertas – sonrió y con su otra mano le acaricio el cabello.
Héctor: me alegro de que finalmente hayas despertado – se acercó a ella.
Fernanda: ¿Qué me pasó? – los miro a ambos.
Héctor: Un carro al parecer te atropello y el conductor se dio a la fuga, pero la demás gente que lo vio llamo a la cruz roja – le acaricio la mejilla.
Fernanda: No Héctor – le dijo sería.
Claudia: Fer por favor déjalo el te ama y créeme que a pesar de que aún me cuesta está situación yo no soy quien para negarles su felicidad – tomo la mano de Héctor y la junto con la de Fernanda – solo dime si el es amor imposibles que alguna vez me mencionaste – miro en busca de una respuesta.
Fernanda: No creo que……. – fue interrumpida.
Claudia: Fer por favor yo estoy aquí aceptando esto y creeme que no hay resentimientos, pero quiero entender el todo por favor – suplico a hermana y Fernanda suspiro.
Fernanda: Si Claudia el era ese amor prohibido del cuál te conté – cerro los ojos.
Claudia: Pero ¿Por qué lo hiciste?, es decir yo lo hubiera entendido – cuestión ahora más curiosa.
Fernanda: Porque tú también lo querías y yo quien era para quitarte las felicidad, te vi tan enamorada que decidí rechazarlo y acercarlo a ti, al final yo me iba a ir y no estaría aquí para impedirles su felicidad – comenzó a llorar.
Claudia: No llores ahora se que tengo a una gran hermana a mi lado y no la pienso perder por nada del mundo y bueno creo que ustedes tienen mucho que hablar también – camino a la salida – regreso un rato – les sonrió para finalmente salir.
Héctor: Fue un acto noble lo que hiciste por Claudia, pero no estuvo bien que quisieras elegir por mi – le seco las lágrimas de las mejillas.
Fernanda: Héctor tal vez fui egoísta por elegir por ti, pero el amor que le tengo a Claudia es más fuerte que no me detuve a pensar en ti, pero sobre todo en mi – lo miro a los ojos.
Héctor: Ahora óyeme bien María Fernanda Meade del Valle, ahora que se esto nadie me va a separar de ti, porque te amo – se miraron fijamente hasta que Héctor se acercó a sus labios sin duda alguna ambos necesitaban sentirse. Ilse iba llegando al departamento de Mayte y al llamar a la puerta la encontró con una copa en la mano, cosa que la extraño ya que ella no era de tomar en las tardes.
Ilse: Amor ¿Por qué estás tomando? – la miro desconcertada.
Mayte: Estoy harta – rompió en llanto e Ilse la abrazo.
Ilse: ¿De qué amor? – pregunto sin entender.
Mayte: De las injusticias, el juez estaba más que comprado y José Manuel está a punto de quitarle a Joss a mi hermana, Mimí desapareció y para rematar Fernanda fue atropellada – se aferró al abrazo e Ilse solo abrazo y la dejo que se desahogara.
Isabel había ido por Joss y lo llevo a casa de su hermana Mimí con esto volvió al hospital, aunque no tenía cabeza para hacerlo, pero Fernanda era su amiga y al igual estaba preocupada por ella quería hablar con ella sobre una decisión que había tomado, aunque sobre todo saber que ella esté bien emocionalmente ante todo esto que está viviendo.
Carlos: Mi amor regresaste – la beso e Isabel no puso mucho empeño en el beso - ¿Te pasa algo amor? – la miro.
Isabel: No – sonrió débilmente, lo que pasa es que con el asunto de Mimí y Fernanda no se dónde traigo la cabeza, por cierto ¿ya despertó? – cuestionó.
Carlos: Si mi amor ella está hablando con Héctor ahora, al parecer todo salió bien entre Claudia y ella – Isabel sonrió.
Isabel: Me alegro, esperaré a que Héctor salga – se sentó en la sala de espera.
Carlos: Por cierto ¿Cómo te fue en la audiencia? – acaricio su mejilla y a esto Isabel quedó muda por unos segundos.
Continuará………………..
