Capítulo 12| De Esa Manera.

4.7K 288 129
                                    

•🧡🧡🧡•

Aren

Extraño.

La última vez que visité Merlivich fue con Grace y Adam. Volver a mi hogar después de todo lo que pasó hace casi 1 año, se sentía caótico.

Abrumador, diría yo.

Todavía seguía procesando la llamada de Christine y la charla con Adam también merodeaba por mi cabeza. ¿Por qué lo hacia? La respuesta es fácil, como le dije a él aquella noche, tenía miedo de lastimarla.

No podría soportar hacerle daño a Skaylar, porque veo que también esconde cosas de su pasado y no había que ser muy inteligente, para darse cuenta de sus miedos al contacto físico.

La idea de pensar en que alguien la haya lastimado, hasta llegar a ese punto, me hacer querer matar a esa persona por dañarla.

Me importaba, más de lo que podía admitir...

Después, teníamos a la madre de Grace cómo siempre apareciendo en los momentos más inoportunos. Siempre que aparece me recuerda de que yo nunca fui el chico indicado que su hija merecía y, que por eso todo acabo como acabó.

Cuándo Margaret me comentó que la pelea sería realizada allí, me negué, no podía ocultar mi malestar por tener que volver al lugar donde me crié junto con mis padres.

Siempre tuvimos una buena relación, pero después del funeral todo cambió y yo era el cumpable de eso. La distancia que puse fue injusta, sin embargo necesitaba estar solo y acostumbrame a la idea de saber que Grace ya no estaría conmigo, por muy duro que sea.

Recurdo que en su momento ellos se quedaron un tiempo conmigo, querían estar en el proceso de mi recuperación, y de paso controlar que no hiciera nada estúpido, mientras estuviera hospitalizado.

Sumandole a que no tenía fuerzas, para tener que repetirles que "estaba bien", cuándo lo único que hacía era mentirles en la cara, para así disfrazar una realidad más grande que era que no lo estaba...

Tampoco sabía si lo iba a estar.

Por eso que cuándo Skaylar apareció en el despacho aquel día, intenté persuadirla para que no fuera conmigo, porque estaba seguro de que Margaret le avisaría a ellos que iría y tendríamos que ir a visitarlos y, arrancarían con sus interrogatorios sobre todo.

Sin embargo, todo salió al revés y bueno, allí estábamos..., los dos sumidos en un silencio ensordecedor; con ella leyendo un libro en el asiento de copiloto y por otro lado, me encontraba yo manejando por primera vez desde el accidente.

Todas las veces en las que me tuve que montar a un auto, Adam estaba conmigo, o directamente él se encargaba de llevarme y traerme, solo que ahora eso había cambiado. Con el tiempo pude superar esa especie de fobia que le tenía.

Se sentía bien.

Mi mirada estaba fija en la carretera, pero de en vez en cuándo reojeaba hacia el asiento izquierdo; en dónde Skaylar seguía leyendo, muy sumida en su libro y con la mirada fija en cada página que pasaba.

Un Lugar En Dónde Tú Y Yo Podamos Respirar. [+18]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora