4<<un desconocido>>

2.5K 393 82
                                    

Intento descifrar quién es ese chico que se acerca a mí, hasta que él mismo chasquea los dedos en mi cara, el gesto fue un poco grosero.

—¡Oye, tú! - protesta.— No puedes estar aquí. — su voz es fría y viril.

—¿Oye, tú? ¿Qué pasa que no te enseñaron modales en tu casa? - le reclamo.

Detallo un poco su rostro y es increíble cómo alguien puede ser tan hermoso y vulgar al mismo tiempo. Tiene el cabello rojo cobrizo y un peinado moderno, corto en los lados y largo encima. Su piel es muy blanca, algo pálida. Sus ojos son grises y profundos, acompañados de una mirada inexpresiva y casi intimidante. Tiene espesas pestañas y una barbilla delgada con la nariz perfilada. Sus labios dicen "¡devórame!", sin hablar. Parece esculpido por ángeles pero educado por demonios.

Límpiate la baba y reacciona.

—Este lugar es privado y estoy esperando a alguien.

—Lo siento, no sabía. Solo quería despejar un poco del ruido de abajo —le explico despacio y con calma.

—Pues si no quieres escuchar ruidos, no hubieses venido a una discoteca —responde con ironía.

—Creo que eres un maleducado que no sabe cómo tratar a una mujer —espeto molesta ante su actitud.

—Y yo creo que eres la típica niñata que lee novelas románticas, que hace caso a las frases de Frida Kahlo y cree en toda esa mierda del feminismo.

¡Uy!, ¿cómo lo supo?

—Y a ti qué te importa, eres el típico retrógrado que se piensa que porque mide más de 1.75 y tiene músculos, puede ser superior a las mujeres. Déjame decirte que no eres más que un estúpido de cara bonita y cerebro vacío.

Pero no le digas bonito, tonta. Ya te has puesto en evidencia.

—Y tú no eres más que una dolida a la que probablemente un hombre traicionó, y ahora piensas que todos somos iguales. Y sabes qué, sí, todos somos iguales, solo queremos follar y no esa mierda de amor que ustedes viven imaginando para tenernos atados.

Sus palabras me hicieron recordar mi mala experiencia con Sam, me sentí pequeña delante de aquella esbelta figura, me sentí humillada. No tenía criterio ni argumento para rebatir sus palabras, en ese momento solo me di cuenta de lo herida que estaba.

El alcohol calentó mis venas y en una furia incontrolable, sin pensarlo dos veces, le lancé el líquido de mi copa en su cara, manchando su camisa blanca.

—¡ESTÁS LOCA! - abrió la boca asombrado por mi reacción.

—Cómo no tienes idea. — Le miré esperando su respuesta.

En ese momento apareció una chica y, anonadada por la escena, fue directamente a ver qué le había pasado a él, no sin antes fulminarme con la mirada. Me fui de allí antes de tener que pelear también con ella, ya que parecía ser su cita.

¡Qué noche!

Regresamos a casa ya entrada la madrugada. Estoy cansada, pero llena de satisfacción. Me desmaquillo, me quito el vestido y me pongo mi pijama cómodo. Me miro al espejo una vez más y me doy cuenta de lo diferente que me veo.

Sonrío, agradecida por tener a Noah a mi lado. Me acuesto en mi cama, lista para descansar y procesar todo lo sucedido. A medida que me quedo dormida, pienso en cómo este pequeño momento de transformación me ha abierto nuevas puertas y oportunidades.

La vida puede ser como un espejo, mostrándonos diferentes versiones de nosotros mismos. Y ahora, estoy lista para descubrir quién soy realmente y abrazar todo lo que el futuro me tenga preparado.

The Red Boy✔️ [Un mundo al que no perteneces]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora