|Doce|

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Brisa seguía los movimientos de su profesora con la mirada, realmente no estaba escuchando nada de lo que explicaba, pero aun así no podía dejar de mirarla. La noche anterior se había dormido muy tarde tratando de convencerse a ella misma de que no tenía sentimientos por Angie, había fallado rotundamente. Aquello definitivamente era mucho más que solo algo físico del momento y aunque no quería admitirlo aún, lo sabía. 

Cuando la clase finalizó y Angie salió del salón, su amiga Lourdes llamó su atención.

L- ¿Vamos? -Preguntó tocando el brazo de Brisa para llamar su atención.

B- Si, me colgué. -Exclamó mientras se ponía de pie y salía de la clase junto a su amiga.

L- Me di cuenta, no me hablaste en toda la clase, amiga. ¿Me preocupo? -Bromeó Lourdes y su amiga se encogió de hombros.

B- Aún no... creo. -Respondió Brisa y le sonrió a su amiga.

L- ¿Estudiamos esta tarde? Tenemos el bodrio de literatura. -Lourdes frunció sus labios y Brisa se llevó una mano a su rostro.

B- Dios, se me pasó. No he leído nada. Estudiamos si, sin falta. -En cuánto Brisa terminó de hablar recordó que era lunes.

B- Ay no, tengo la tutoría también.

L- Es verdad, bueno cuando salgas o antes... -Agregó Lourdes, pero Brisa negó.

B- No, Lu. Tenemos que estudiar, le aviso a Angie.

L- ¿Segura?

B- Si, amiga. Le escribo después. -Habló Brisa, si bien quería ver a la chica sabía que había estado descuidando a su amiga y realmente debían estudiar.

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Era cerca de las 18 y 30 cuando Angie entró en la sala de profesores, antes de su tutoría.

K- Hola, Angie. ¿Cómo estás?

A- Kevin, muy bien. ¿Vos? Hacía días no te veía.

K- Lo sé, me tomé unos días para descansar, los necesitaba y mucho.

A- Me alegro, yo recién empecé y creo que ya los necesito. -Bromeó Angie y Kevin se rio levemente.

K- ¿Cómo vas con tus clases? ¿Las tutorías?

A- Todo muy bien por ahora, los chicos se interesan mucho y me hacen el trabajo bastante fácil. -Sonrió Angie, realmente pensaba lo que decía. Disfrutaba mucho de su trabajo.

K- Eso si es una novedad, el profesor anterior no creía lo mismo. Debes de tener tu encanto. -Agregó Kevin bromeando.

A- Debe ser eso, seguramente. -Respondió Angie y luego recordó a lo que venía.

A- Por cierto, estoy coordinando una prueba para la próxima semana, ¿eso lo coordino con vos?

K- Si, claro. Me la envías y las imprimo y gestionó el resto.

A- Perfecto, ¡muchas gracias!

K- Por nada, ¡nos vemos!

Angie le sonrió al chico y salió de la sala, miró la hora en su teléfono y vio que aún faltaban quince minutos para comenzar la hora de tutorías, con suerte Brisa llegaría antes, pensó.

A penas entró a la sala y tomó asiento, su teléfono vibró con un nuevo mensaje.

Brisa: Hola, ¿cómo estás? Quería avisarte que no llego a las tutorías hoy, perdón.

Angie se sorprendió ante el mensaje y podía admitir que se decepcionó.

Angie: Hola, no te preocupes. ¿Estás bien o pasó algo?

Brisa: No, solo tengo que estudiar. Tengo una prueba el miércoles y no he leído nada.

Angie: Entiendo, si necesitas ayuda me avisas. ¿Si?

Brisa: Gracias, An. Espero no te aburras mucho sin mí.

Angie: Seguro que lo haré, no tengo dudas.

Brisa: Lo siento por eso... te dejo. Ya llegó Lu. Un beso.

Angie: Besos, linda.

Angie dejó el teléfono y espero algunos minutos para qué llegaran sus alumnos.

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L- ¿Segura no querés ir?

B- No amiga, tenemos que estudiar. Además, no quiero estar tan pendiente.

L- ¿Por qué? ¿Pasó algo que no me hayas contado? -Preguntó Lourdes mientras se sentaba junto a su amiga y dejaba algunos libros sobre la mesa frente a ella.

B- No... solo el fin de semana. No me quiero ilusionar, aunque creo que ya lo hice. -Se animó a confesar Brisa.

L- Amiga, pero está bien. A ver ambas la pasan bien juntas.

B- Si, pero ya sabes cómo soy.

L- Intensa, lo sé. - Se burló Lourdes y Brisa la miró con el ceño fruncido.

B- Quizás ella solo me está usando para pasarla bien y yo como una idiota, repensando todo.

L- Como te digo siempre, primero hablen antes de suponer cosas. Quizás ella está re enganchada.

B- Ojalá. -Suspiró Brisa, aún así quería tratar de mantenerse algo alejada. Se conocía lo suficiente para saber que podía engancharse e incluso enamorarse rápidamente de alguien, y más si ese alguien era Angie. Lo evitaría todo lo que pudiera con tal de no salir lastimada.

Brangie - Olías a futuro.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora