Capítulo 4

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La habitación quedó sumida en un silencio tenso después de las palabras de Kate. La inseguridad en su voz resonaba como un eco en el aire, como un fantasma que amenazaba con perturbar el frágil equilibrio que había entre ellas.

—¿No estás conmigo solo porque no pudiste estar con ella? —Kate preguntó, su voz temblorosa revelando sus temores más profundos.

Yelena sintió cómo su corazón se apretaba en su pecho. La pregunta resonaba en su mente, pero la idea era ajena a la realidad que había construido con Kate. Ella deseaba con todo su ser poder borrar esa duda de los ojos de Kate y reemplazarla con la certeza del amor que sentía por ella.

—¿Qué? ¡Claro que no! —Yelena respondió rápidamente, su voz cargada de emociones—. Kate, no eres y nunca fuiste mi segunda opción. Jamás vuelvas a insinuar algo así.

Kate pareció no estar completamente convencida por las palabras de Yelena, pero al menos pareció dar un paso atrás en su interrogatorio. Sin embargo, eso no era suficiente para satisfacer la necesidad de control y seguridad que bullía en el interior de Kate.

—Tú y yo iniciamos nuestra relación cuando Anya se fue del planeta...

—Sí, eso es verdad, pero no creo que tenga nada que ver con nuestra relación...—Yelena contesto sincera, ella jamás hubiera pensando que esa era realmente la razón por la cual Kate y ella se hicieron novias.

—Pero estabas enamorada de ella.

—Sí, también eso es verdad. Pero no te usé como gateway car, si es lo que insinúas —Yelena dijo con firmeza, no dejaría que su novia pensará siquiera en esa idea —. Acepté salir contigo porque me gustabas y mucho, no le quites mérito a lo que tenemos.

Las palabras de Yelena resonaron en el aire, pero Kate parecía no dispuesta a dejar que sus dudas se disiparan tan fácilmente. Un nuevo cuestionamiento surgió en su mente, un recuerdo que la atormentaba.

—Cuándo comenzamos a salir, ¿seguías enamorada de ella? —Kate preguntó, su voz todavía sonaba apagada, cargada de una mezcla de inseguridad, dolor y molestia.

La pregunta dejó a Yelena momentáneamente sin palabras. Reflexionó rápidamente sobre cómo abordar esa pregunta, deseando encontrar una respuesta que pudiera calmar las ansiedades de Kate sin comprometer la verdad.

—Tal vez lo estaba todavía un poco. Pero no hubiese aceptado salir contigo si hubiera estado perdidamente enamorada de ella —Yelena respondió Yelena con—. Tú fuiste haciendo méritos conmigo y eso influyó bastante en mis sentimientos. A medida que te conocía mejor, mis sentimientos por ti crecían y los que sentía por Anya disminuían.

Kate apretó los puños, sus emociones en guerra consigo mismas mientras trataba de procesar las palabras de Yelena. Una nueva pregunta surgió, cargada de inseguridad y ansiedad.

—¿Entonces fui el clavo que sacó al otro clavo?

—¡Tampoco estoy diciendo eso!

—¿Entonces qué estás diciendo? —Yelena suspiró, frustrada por la falta de confianza de Kate.

—Lo que trato de decir es que cuando Anya se fue, poco a poco mis sentimientos por ella se iban mientras que mi amor por ti aumentaba, moya lyubov'. Tú estuviste a mi lado, haciéndome sentir mejor, enamorando con esa increíble personalidad que te caracteriza —Yelena sonrió con todo el amor que sentía por su novia—. Tú eres la mujer de la que estoy enamorada y la única a quien amo, Kate Bishop. No hay nadie más, solo tú.

A pesar de las palabras sinceras de Yelena, Kate seguía luchando con sus dudas internas. La incertidumbre se aferraba a ella como un peso en el pecho que no podía sacudirse. Sentía cómo su mente se atormentaba con escenarios y posibilidades que la llenaban de ansiedad. Tal vez sentía que ese su karma por todo el daño que había hecho en su años como playgirl. 

WAW ~ Historia alternativaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora