Diez

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Si le decían hace un par de meses que estaría frente a la estación de policías, sospechando por su corrupción producto de una indirecta acusación surgiente de su caso de estudio, probablemente se reiría. No porque no lo creería, sino más bien por la casualidad de los hechos.

Saludó cordialmente al oficial que le permitía el paso a la oficina de denuncias, y se adentró sin pizca de pudor. Otro policía le ofreció tomar asiento para escuchar la presunta acusación.

–Buen día, oficial, no estoy aquí para denunciar ningún delito.

El hombre vestido de azul frunció el ceño, pero le permitió explayarse.

–Mi padre, Derek Styles, es el encargado de ésta estación, y tengo el permiso para acudir a ciertos informes que me puedan ser de utilidad a la hora de hacer mi tesis.

Realmente no había visto a su padre hacía más de una década. No sabía si quiera si aquel hombre se mantenía con vida, con una nueva familia ajena a la suya. Sin embargo, veía en su cargo una oportunidad que lo ponía en un puesto alto dentro del podio de importancia, y no desaprovecharía la oportunidad.

–Dime qué es lo que necesitas– Respondió, una vez chequeado el verídico lazo genético entre ambos.

–Quiero acceder a los informes de la noche del doce de noviembre de hace quince años, estoy haciendo un proyecto para mi universidad y necesito ciertos datos que sólo aquí pueden tener.

El policía chequeó la fecha dentro de la computadora que contenía todos los crímenes registrados con investigación previa. Al encontrarlo, negó seriamente hacia el joven que tenía en frente.

–Ese es un caso confidencial que se pidió mantener extremada precaución por respeto a las madres damnificadas. Pero puedo ofrecerte los datos de otros casos más, si te interesa.

Harry negó, sin saber muy bien qué decir. El hecho de que sea confidencial lo hacía sospechar aún más sobre la intervención de dinero en el caso.

–¿No puedo hechar una mirada a las pistas? Sólo pido una ojeada, es para saber sobre los datos.

El hombre estaba dudando demasiado. Harry entendió que, si lo quería conseguir, debía cambiar el rumbo de su estrategia.

–Escuche, tengo una beca que debo mantener y estoy pendiendo de un filo hilo. Si no entrego en perfectos términos mi próximo trabajo, puedo irme despidiendo de la carrera de mi vida. Sólo le estoy pidiendo datos básicos, juro no entrometerme en pruebas que no me incumben– Y, aprovechando su anormal descontrol de hormonas, se permitió largar unas pocas lágrimas que le dieron más dramatismo a su relato.

El policía evaluó las posibilidades y suspiró al ver al joven actor temblar levemente por la desesperación.

–¿No puedes hacer el trabajo con otro delito? Tenemos varios antiguos, podemos hecharte una mano con ello.

Harry negó con la cabeza, dejando ir un par de lágrimas extra.

–No, ya tengo gran parte hecho. Si cambiara ahora, no solo perdería todo mi avance, sino que tampoco alcanzaría con el tiempo. Por favor, oficial, se lo ruego.

El policía, indeciso, dudó un poco más antes de caer rendido en los encantos del joven actor.

–Está bien, le diré qué voy a hacer. Yo iré al baño y usted se quedará justo aquí, sin hacer nada, esperando a que termine– Sugirió mientras volteaba el monitor para que Harry pudiera tenerlo fácilmente a disposición.

Harry le sonrió agradecidamente, mientras veía el archivo de aquella noche ser abierto.

–No se te ocurra husmear, vuelvo en un rato– Se levantó y, antes de retirarse, le guiñó un ojo.

Ni bien oyó la puerta cerrarse, se apresuró en abrir uno de los archivos de aquel caso, que tenía la cantidad de información de forma ordenada. Pronto, tuvo los datos y los testimonios de las cuatro familia, de manera sintetizada y gráfica. Tomó su celular y sacó una foto rápida, asegurándose que se vea lo principal. Luego, deslizó el cursor a la carpeta de "pruebas", que ofrecía un par de fotos en forma de archivos. El primero, se titulaba "Pisadas de Lottie" y se trataba de unas pequeñas huellas de zapatillas, tomadas esa misma noche, que habían logrado resaltar en el camino de piedra de frente de la casa Tomlinson, gracias a los polvos policiales. Las otras fotos correspondían a la búsqueda de huellas en la puerta, ventana y cualquier otra posible salida, que tan solo inculpaban a la madre. La casa Payne y Malik, representaban la mayor parte de las fotos, con planos de la casa que podrían haber demostrado las posibilidades de escape. Definitivamente, la única opción que veía disponible era que hayan salido por la puerta principal.

Se trataban de menores de edad, niños que ni si quiera habían alcanzado la madurez suficiente como para sumar números. No tenía sentido que la salida haya sido ejecutado por otro lado que no fuera la entrada principal. La ausencia de huellas y forcejeo lo hacían trastabillar ante su teoría. Imposible que alguien hubiese pasado por allí, si las mismas madres se encontraban dando vigilancia.

Las únicas pisadas que habían encontrado, por lo menos en la casa Tomlinson, eran provenientes de la hermana menor de Louis. ¿Qué hacía aquella niña afuera, a esas horas de la noche? Siendo que, según los testigos, no habría salido de su habitación en toda la tarde.

Entonces, comenzó a notar las claras incongruencias al que la policía se había enfrentado tiempo antes, las incoherencias que dieron por finalizada la investigación.

¿Sería que las madres habían sido partícipes de aquello?¿Un plan maestro del que nadie se había percatado?

Habían logrado llegar al corazón de cáda habitante de la ciudad, con sus constantes llantos y lamentos por lo ocurrido aquel doce de noviembre. Almas desterradas condenadas a sufrir por una pérdida de la que nunca habían podido recuperarse. La injusticia de un caso que, pronto, todos habían olvidado.

¿Habrían sido capaces de hacer semejante actuación? Su corazón se estrujaba de tan sólo imaginar que las lágrimas derramadas podrían ser falsas. La reacción de esperanza de las madres cuando les había contado de su plan por continuar el caso, era tan ameno, sin pizca de miedo o resentimiento. ¿Una obra de teatro, en el que todos eran actores?

¿Realmente habrían podido?

Les tomó una rápida foto a los detalles extra, y, luego de agradecer con sinceridad al guardia que volvía "del baño", se retiró de la estación.

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holiiii este es un capítulo completamente nuevo, no es editado, así que no tiene ni una vista jaksjka

aviso por si les parece raro el cambio drástico en los números, es una escena que nadie había leído antes.

nos vemos<33

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