Hold Me (Felix, Stray Kids)

Capítulo 17

El día del lanzamiento del álbum de “Oddinary” ya ha llegado, y con él, el nerviosismo y el miedo de los chicos. Los perdidos no saben cómo reaccionará el mundo ante este nuevo álbum y tienen miedo a que no sea bien recibido, pero es imposible que las nuevas canciones no gusten a la gente y sobre todo a Stay. Este nuevo álbum básicamente te enseña que ser extraño es normal, algo que mucha gente debe de entender para no sentirse diferente ante el mundo.

El señor Park volvió hace unos días y se encargó de revisar que todo hubiera quedado bien, que hasta el mínimo detalle hubiera sido cubierto. Se sorprendió, creo que esperaba que no hiciera bien mi trabajo, y aunque soy nueva en este mundillo, hago todo lo posible para que todo salga bien y los chicos no sufran las consecuencias. Si cagarla afectara a JYP, me daría lo mismo, pero también afecta a mis amigos y eso no lo voy a permitir.

Me encuentro preparando los regalos que he conseguido para los perdidos, me hace muy feliz haber podido trabajar con ellos en el álbum y sé que hoy va a ser un día de muchas emociones, así que he pensado que unos regalitos les harían ilusión. En diez minutos debemos estar en la sala de reuniones, donde veremos el lanzamiento todos juntos, incluso Mackenzie va a estar presente.

Hablando de mi amiga, lleva varios días en casa por culpa del cierre de la clínica. Nadie se lo esperaba, pilló por sorpresa a todos los que trabajaban allí y en parte es mi culpa. Al saberse que Dispatch mintió y que me echaron de la clínica por esas falsas acusaciones sin fundamento, los sindicatos defensores de los trabajadores se han encargado de denunciar a la clínica y mediante una inspección, han descubierto temas bastante ilegales de por medio.

Por una parte, mis compañeros y el doctor Woo-seok me dan pena, por otra, Mackenzie me dice que han tenido su merecido y que no es mi culpa, que tarde o temprano iban a salir a la luz los trapos sucios. Inevitablemente, me siento mal, pero bueno, ahora tengo un trabajo que merece la pena y estoy rodeada de gente que me importa.

–Ruby, es la hora– la voz de Mack llama mi atención.

Mi amiga asoma su cabeza por la puerta mientras me espera, dejo todo sobre la mesa, listo para solo tener que venir a por los regalos y llevárselos a los chicos. En cuanto salgo, ambas nos dirigimos a la sala de reuniones, donde los chicos ya están eligiendo sitio. El señor Park está sentado presidiendo la mesa, su presencia me corta un poco el rollo, pero tengo que aguantarme. Me giro para preguntar a Mack donde se va a sentar, pero para mi sorpresa, ella ya ha elegido sitio, nada más y nada menos que entre Chan y Hyunjin. Este último se ha vuelto cercano a la chica, ambos se llevan muy bien y creo que eso da celos a Cielo, quién ahora mismo no está mirando muy bien a mi amiga. Para que luego diga que no le gusta el “niño mimado”

–Ruby, te he guardado un sitio– la voz de Seungmin se alza sobre las demás.

Miro hacia el pelinegro, que palmea la silla que hay a su lado varias veces, sin embargo, mi atención se centra en quién está sentado en la silla siguiente. ¿Tú también Minnie? Me acerco hasta Seungmin lanzándole una mirada asesina y tomo asiento a su lado. Frente a mí está Minho que sonríe maliciosamente, están todos compinchados.

–Le estaba diciendo a Félix que la dualidad de su voz da mucha fuerza a nuestras nuevas canciones, ¿verdad que sí, Ruby?– dice Minnie haciendo que lo mire.

–Emm, sí, claro– comento algo desconcertada –La verdad es que la voz de Félix es lo primero que me llamó la atención cuando os escuché por primera vez–

–¿Acaso estás diciendo que Yongbok te llamó la atención?– pregunta Lino sacando su típica sonrisa del gato de Cheshire.

–Su voz, solamente su voz– digo rápidamente poniéndome nerviosa.