Sehun Emperador del reino de Hiperbórea, centinela de viento, debe tener un heredero. Un hermoso doncel es presentado ante él, para convertirse en el consorte imperial y llevar su hijo en su vientre.
Una historia que inicia con un matrimonio arreg...
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Un lindo día, la primavera está llena de colorido y las aves cantan de felicidad, eso siempre pone de buenas a JongIn, pero ahora no siente la misma alegría.
Mirando el cielo por la ventana del lujoso palacio, JongIn tiene un pincel en la malo, pero no hace trazo alguno en el blanco lienzo.
— ¿Sucede algo alteza?— cuestiona Baekhyun, es el doncel que le sirve personalmente.
JongIn ha quedado encantado con él, desde el primer día congeniaron de manera natural, no sabe si porque es un doncel igual que él, o porque jamás había tenido alguien que lo escuchara como él lo hace, su padre y su hermano estaban ocupados la mayoría del tiempo, al igual que él, y tampoco podía hablar de ciertos temas, cuando ambos son hombres. Ser doncel no es fácil.
— Nada, sólo apreciaba el clima de hoy... — responde tranquilo.
Baekhyun también mira hacía la ventana, no hay nada especial afuera, pero sabe que JongIn lo que añora es su hogar, y no lo culpa. El palacio es grande y hermoso, rodeado de lujos, pero también es solitario y frío.
— Esta noche es su reunión con el emperador, las costureras del palacio enviarán ropas especiales para la ocasión, ¿Está nervioso?— normalmente Baekhyun es un chico que gusta de obtener información de interés, la vida en el palacio es aburrida, que hay que entretenerse con algo, y todo lo que llega saber lo comparte con Chanyeol y Kyungsoo. Pero ha jurado tener la vida de el consorte imperial en privado, así que se mantiene a raya con sus cuestionamientos.
— Un poco...— confiesa, mientras da una pincelada carmín en el lienzo— en éstos días sólo hemos cruzado algunas palabras... y está noche debo entregarle mi cuerpo... no es como imaginé que sería mi primera vez.
Baekhyun deja su propio lienzo y se levanta para servir un poco de té en la taza de porcelana del más joven.
— Te entiendo, yo también tenía un sueño sobre como sería mi primera vez, pero a veces nada es como uno lo sueña — suspira, sintiendo empatía con JongIn.
— No tengo derecho a quejarme — sonríe pero no llega a sus ojos, bebe un poco de té y vuelve a mirar al exterior — estoy a lado del emperador, es un sueño de muchos, y yo lo he tomado en su lugar... creo que podría acostumbrarme a esta vida.
Baekhyun frunce el ceño, no está de acuerdo con eso, JongIn es muy hermoso como para sólo ser un objeto más en el palacio de Hiperbórea.
— Nunca ha sido mi sueño estar con alguien como su majestad Sehun... aquí ente nosotros...— se acerca al moreno y baja su nivel de voz — si es atractivo, pero con su actitud apática, y su rostro inexpresivo, no gracias...
JongIn suspira y piensa en el primer desayuno compartido con él. Eran los únicos en la mesa, una mesa enorme, sirvientes colocando cantidad inmesurada de comida, guardias reales parados como si fueran estatuas. Cuando él trataba de tomar algo de comida para su plato, rápidamente se acercaba un sirviente y le servia, él agradecía apenado, pero él sirviente seguía esperando a ayudarle con cualquier cosa. Miraba de reojo a Sehun, quien comía completamente en silencio, cada que terminaba un platillo, un sirviente le servía uno nuevo, todo eran tan mecánico, como algo que han hecho toda su vida. No hubo una charla, ni una sola mirada le fue dirigida. Cuando el emperador terminó, miró a JongIn por primera vez y le deseó un bien día y salió del gran comedor.
