04.

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Me encuentro calificando los pequeños trabajos de mis alumnos cuando el timbre suena. Minho baja las escaleras apresurado y abre la puerta. Levanto la cabeza cuando reconozco la voz del invitado y espero ansioso a que entre a casa para poder saludarlo.

Se acerca a los segundos junto a mi esposo y le dedico una sonrisa.

—Jungkook, hola, que bueno verte.

—Lo mismo digo ¿Cómo estás? —palmea mi espalda.

—Estoy bien ¿Y tú?

—También.

—¿Quieres comer algo? Te traigo.

—No, descuida —sonríe y se sienta en frente  mío en la mesa. Minho hace lo mismo.

—¿Y qué te trae por aquí? —pregunto, mirándolos a los dos y Jungkook mira a mi pareja para luego verme a mí.

—Me invitó él, dijo que necesitaba hablar conmigo —menciona y siento mis nervios aumentar con la simple idea de que esta conversación concluirá en que haremos lo que Minho quiere o no. Muerdo mi labio inferior y asiento, intentando disimular el pánico.

—Sí, creo que tenemos que hablar los tres —dice Minho.

—Amor, debiste avisarme...

—Jungkook. Taehyung y yo te queremos pedir ayuda —empieza a explicar y hago oídos sordos debido a lo avergonzado que me encuentro. Sigo haciendo mi tarea para evitar tener que mirarlos a ambos a los ojos.

Y así es, Minho se encarga de contarle toda la situación a su mejor amigo sin entrar en tanto detalle. No consigo escuchar todo lo que le dice porque no quiero hacerlo. La verdad, hubiese preferido no estar o que Minho me avisara con más anticipación, pero no fue así y me disgusta ligeramente.

Se hace un silencio tenso en la casa y levanto la mirada. Miro a mi marido y luego a Jungkook que se encuentra con el ceño fruncido y noto que debe estar procesando toda la información que le llegó a la cabeza en tan poco tiempo. Intento descifrar qué es lo que puede decir, pero se me hace imposible.

Me mira y sus ojos oscuros me estremecen, no sé por qué. Estoy cohibido ante su mirada y presiono los puños debajo de la mesa debido a las sensaciones que me llegaron en segundos.

—Bueno, lo haré —dice y trago saliva.

—¿E-en serio? —murmuro y asiente.

—¿Esto va a ser una vez o...?

—Podemos intentar —afirma Minho—. Podemos probar una sola vez y si no funciona, ya está. Pero si funciona, bueno, ustedes deciden. Mientras yo pueda estar al tanto, está bien.

—Taehyung ¿Tú estás seguro con esto? —me pregunta y asiento lentamente—. Bien...

—Sólo pueden hacerlo si estoy yo ¿Entendido?

—S-sí —aclaro mi garganta—. Uh, me... 

—Pueden ir arriba, yo ya voy —indica Minho y hago caso, sin mirar al hombre detrás mío que también se encuentra silencioso.

Entramos a la habitación y cierro la puerta. Me siento sobre la cama y él se sienta a mi lado. Giro mi rostro para mirarlo y noto que él ya se encontraba mirándome.

—No tienes que hacer esto por él si no quieres ¿Está bien? —me dice y asiento.

—Ya sé —suspiro—. Tú tampoco.

—Nunca me ha pasado esto, pero creo que podré manejarlo. Hace mucho, es más, creo que muy pocas veces estuve con gente que no fue mi pareja.

—Pero tenemos confianza ¿No? Eso es lo que importa.

You belong with me. Donde viven las historias. Descúbrelo ahora