Shotaro caminaba cerca de Sicheng, el hombre era lindo, ya le había dicho que odiaba el futbol por un ex que tuvo, pero que ahora le gustaba porque a su novio parecía encantarle. Shotaro y Sicheng tenían eso en común, ser buenos bailarines y estar enamorados de un futbolista.
Ellos se sentaron en las gradas, iba a empezar un partido amistoso hasta que Shotaro se dio cuenta de que sus ojos no estaban viendo a Sungchan, sino a su entrenador.
¿Qué hacía su padre allí? ¿Y por qué se veía más joven?
El partido inició rápidamente, Sungchan era un capitán y el otro equipo estaba liderado por Kun, un chico del último año que aspiraba a que alguna selección lo eligiera, pero se estaba viendo opacado por un joven mucho menor que parecía encantarles a todos.
Kun no entendía por qué en su vida no estaba recibiendo lo que merecía, elogios, dinero, fama y amor.
Fue cuando Kun pudo ver a los dos chicos en las gradas, era la primera vez que veía a Sicheng en las gradas después de lo estúpido que fue. Y a su lado estaba Shotaro, uno de los niños "cupido" que todos amaban. Seguramente estaba para ver a Sungchan.
Unos románticos.
Fue cuando una brillante idea se vino a la mente de Kun, tratando de robarle el balón a Sungchan, éste se "barrió", pegándole en el tobillo a Sungchan y haciendo que cayera al suelo, a Sungchan le había dolido, pero según él "estaba bien", solo que cuando se intentó parar se tambaleó. Su poder de sanación de dios no servía, se sentía igual de débil que un humano.
—¡Falta! —Gritó Yuta.
Se acercó corriendo al lugar y Sungchan tomó con mucho dolor su tobillo. Maldita sea.
—¡Lo siento mucho! —Kun se disculpó. —¿Estás bien?
Kun era guapo, pero no parecía ser una persona buena, tenía celos y envidia en su mirada. A Shotaro no le gustaba. Philia bajó rápidamente de las gradas y se acercó al campo.
—¿Sungchan? —Shotaro dijo, era raro que le doliera, su poder de recuperación no parecía estar funcionando.
—Me duele mucho. —Dijo mientras se retorcía.
—Ayúdame a cargarlo. —Yuta le pidió a Kun.
Ambos tomaron al lesionado por las axilas y lo cargaron para llevarlo a las gradas, Shotaro hizo espacio y miró a su novio.
—Un beso de amor verdadero, podría curarme. —Sungchan mencionó mientras jugaba con Shotaro.
Shotaro soltó una tímida risa, Yuta nada más frunció el ceño, Sicheng quiso reír y Kun solo rodó los ojos.
—No necesita un beso, necesita un doctor. ¿Ustedes pueden llevarlo? —Le preguntó a Shotaro y a Sicheng.
—Por supuesto. —Shotaro miró a su padre, ni siquiera lo había saludado y fingía que era el entrenador, ah, estaba en una misión, ¿Pero de qué? —¿Me ayudas, Sicheng?
—Sí.
—Si quieren voy con ustedes. —Kun interrumpió.
—Tú no te vas a mover de aquí, deja que ellos dos se lleven a Sungchan, tú y yo debemos hablar. —Yuta se veía molesto.
—Si no es para que me nombren capitán, no quiero escuchar nada, merezco ser el líder y dudo que Sungchan se recupere en menos de dos días para nuestro próximo partido. —Kun rodó los ojos. —Diles, Sicheng, tú sabes que soy muy bueno, que fácilmente podría ser reclutado por importantes equipos si me dieran la oportunidad.
Sicheng se quedó callado y sintió todas las miradas sobre él, Shotaro levantó la ceja y Sicheng permaneció en silencio y observó al entrenador.
—El hecho de que no puedas hacer una barrida sin obtener una penalización o sin lastimar a otro jugador, no me habla de que sepas jugar. —Se enojó el entrenador.
—Créame, soy buen haciendo todo. —Kun murmuró. —¿Cierto, Sicheng?
De nuevo, Sicheng se quedó callado y Shotaro solo lo observó, había odio de Sicheng a Kun, definitivamente lo contrario a un amigo, Sicheng percibía a Kun como un enemigo, Kun era la misión de Apolo, pero ¿En qué sentido?
Y por la danza del sol, Yuta venía a ayudar a Sicheng y a Kun, pero ¿Cómo?
—Sigo herido, ¿Saben? —Sungchan se quejó. —Mi amor, ayúdame a llegar a la enfermería. —Miró a Shotaro.
Pero antes de tomarlo, Yuta le gruñó y le pegó en el brazo.
—No actúen empalagosos en frente de mí. —Frunció su ceño.
—¿Por qué? —Fue el turno de hablar de Sicheng, estaba extrañado del comportamiento del entrenador.
—Porque luego el entrenador Yuta se pone celoso. —Sungchan se rio y se burló. —Entrenador, él es mi novio Shotaro, es la razón por la cual juego perfectamente bien, por el cual soy un gran capitán, no sabe lo mucho que me inspira este hombre. —Le dio un beso en el dorso de la mano a Osaki.
Yuta se aguantó todos los sentimientos de papá sobreprotector que tenía dentro, quería tomar a Sungchan, lanzarlo lejos junto con Kun y tomar a su hijo e irse lejos de allí. Serían la familia de tres que siempre soñaron.
—Un novio siempre es buen aliciente, pero no se distraigan mucho. —Yuta sonrió. —Tener un novio lindo y buen bailarín siempre hará que ambos crezcan en sus disciplinas. —Yuta miró a Sicheng y a Shotaro.
—Eso sería bueno. —Kun miró a Sicheng. —En algún momento Sicheng estuvo muy enamorado de mí, un gran futbolista sería eficaz que saliera con un bailarín. ¿Viniste a verme porque quieres regresar?
Sicheng evitó la mirada de Kun, ni siquiera quería verlo. Se le hacía de los más lindo que si Sungchan se lesionara, Shotaro lo cuidara, pero el hecho de tener que estar en el mismo espacio que su exnovio manipulador, Sicheng no estaba seguro de qué tan buena idea era.
Sungchan lo entendió en la mirada de Yuta, su misión tenía que ver con Kun, pero Kun se veía más como con problemas de guerra, quizá era un tema más de Yangyang, Jung no podía pensar en qué tenía Kun contra el dios del sol.
—Él no va a regresar contigo. —Yuta se interpuso. —Ahora Kun, si tanto quieres ser capitán, demuéstralo, regresa a entrenar mientras llevo a Sungchan a la enfermería, si veo que mejoras, en habilidades y en trato a tus compañeros quizá lo piense.
Kun sonrió y levantó la ceja, luego se alejó y se fue a las canchas. Yuta chasqueó la lengua.
—Entrenador, pero yo no quiero dejar de ser capitán, mucho menos que Kun se quede con mi puesto. —Sungchan se quejó, no entendía por qué no podía curarse.
—Ese idiota no debería lograr ser nada en la vida. —Sicheng frunció el ceño, quería echarse a llorar al recordar lo cretino que fue Kun hace tres años.
—En algún momento él cambiará y se arrepentirá por lo que hizo y por lo que ha hecho. —Yuta dijo. —Me encargaré de que no lastime a los demás. Es muy guapo, pero su personalidad terrible. —Se rio. —Vamos Taro, llevemos a tu novio a la enfermería.
Shotaro y Yuta cargaron al lesionado y caminaron por el campus con él, Sicheng fue atrás para poderlos acompañar. Dong sonrió porque Shotaro y Yuta parecían llevarse bien, no entendía por qué el sentimiento de verlos juntos le encantaba y lo llenaba de calidez.
Continuará...
Mañana adelantaré muchos capítulos porque el viernes no podré :D gracias por leer y darle mucho amor a esta historia <3
12/31
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Love Guardians (Flufftober 2022)
Fanfiction"Chenle, Jisung, Shotaro y Sungchan son dioses del amor que deben de unir a muchas personas en sus nuevas vidas, con sus almas del pasado o almas que recién aparecen, todo para encontrar con quién podría brindarles felicidad, y sobre todo amor " Pri...