Quédate conmigo (QC) ||PAUSADA||

Capítulo 24

Narra Aidan

Estaba de camino al parque de Kelly Ingram Park, había quedado con Omar para contarle la verdad sobre Sarisha ya que necesitaba su ayuda para convencer a la familia para que la dejaran vivir sola en el apartamento con las chicas. 

Después de que Sarisha me afirmará que seguiría las pautas que le di una vez que saliera del hospital, llamé a Omar. Se que la había prometido que no le diría a nadie pero....¿qué podía hacer?

Ellos eran sus familiares, al menos alguien de la familia tenía que saber lo que le pasaba y en ese momento solo confiaba en Omar. Era lo suficientemente maduro para escuchar con calma y pensar con la mente en frío lo que podríamos hacer para poder ayudar a Sarisha.

Había llegado al lugar de encuentro 5 mints antes que Omar, estaba practicando sobre como contarle todo lo que estaba pasando a su prima. Entonces, una llamada me sacó de los pensamientos, cuando vi la pantalla era la llamada de Harry.

—Hola — saludé cogiendo la llamada —¿Qué hay?

—Hola...Aidan, Wyatt está aquí.

—¡¿Qué?! — no me lo podía creer, debía de ser mentira — ¿Wyatt?

—Sí — me respondió — Ha vuelto. Vino a casa, buscaba a Sarisha y a ti...os quería contar algo importante.

—¿Qué le dijiste?

—Nada, solo que tú te fuiste a estudiar fuera y que ella se quería alejar de nosotros. Por eso se fue a vivir con las chicas.

—Vale..

—¿Qué harás? — me preguntó mi hermano.

—Nada.

—¿Nada?

—Sí — le afirmé — No haré nada porque no pienso contarle a Sarisha. Además, le resultará difícil encontrarla...le hemos cambiado de identidad, hemos hecho desaparecer a Sarisha ante los ojos del mundo.

—Ooh...¿Cómo?

—Cambiándole de nombre y pidiendo que hiciera niqab en los lugares públicos — respondí.

—¿Cómo se encuentra?

—Harta de todo esto.. — contesté justo cuando vi de lejos que se acercaba Omar hacía donde me encontraba —Harry, me tengo que ir —susurré— Solo controla que no se entere de nada — terminé de decir refiriéndome a Wyatt.

—Se le ve arrepentido — murmuró justo cuando iba a colgar.

Apreté la mandíbula, ¿Wyatt Stoke arrepentido? lo dudo. Él podía hacer lo que quisiera, sentirse bien o mal pero estar arrepentido de algo...no lo creo. Me cabreaba el solo hecho de pensar en él.

—Hola — me saludó Omar con una sonrisa una vez que se acercó — ¿Cómo estás?

—Hola, bien..supongo.

—¿Qué pasa? — me preguntó curioso.

—Omar, no tengo mucho tiempo...te llamé porque quería contarte algo demasiado importante, confió mucho en ti. Esperó que me escuches con calma y que pienses con mente fría — contesté, su sonrisa había desaparecido y asintió lentamente — Es...sobre Sarisha.

—¿Sarisha? — preguntó extrañado — ¿Qué le pasa? ¿Está bien?

—No, ella...no se peleó con sus compañeras de la universidad.

—¿Entonces?

—Sabes que ella fue secuestrada en España y...

—Lo sé — me interrumpió.