𝙳𝚒𝚘𝚗𝚢𝚜𝚞𝚜 𝙱𝚊𝚛 ୧𝚝𝚎𝚛𝚖𝚒𝚗𝚊𝚍𝚊୨ 𝐉𝐉𝐊

༺ ᗩᑕTᑌᗩᒪIᗪᗩᗪ ༻

En Seúl, Corea del Sur, se mudaron los semidioses para vivir en paz, pues, en Grecia, comenzaron a sospechar de ellos, con los poderes conferidos por su Padre, Zeus, tomaron los rasgos asiáticos y al fin pudieron conllevar una vida tranquila.

Los Varones abrieron un bar, el que era el más famoso de toda ITAEWON, sofisticado, de clase y solo entraba ahí gente selecta que pudiera pagar los tragos elaborados que tenían un sabor inigualable, pues, las mujeres, Jennie, Jisso, Lisa, Rose y Ji Eun, usaban sus poderes para adornar con sutiles fragancias y sabores que no encontrarían en ningún otro lugar, haciendo adicto el paladar que sintiera una gota siquiera de aquellos bebestibles afrodisíacos.

Cada cierto tiempo se juntaban todos a disfrutar de sus presencias, eran familias y parejas después de todo. Lo hacían cada solsticio y equinoccio, recordando a sus padres/Dioses que sacrificaron mucho para que ellos estuvieran ahí.

Dando ofrendas y celebrando a su manera, hacían un ritual de aniversario, que llevaba paz y riqueza a sus bolsillos. Esos días, precisamente, una gran fiesta se llevaba, conmemorando a sus antepasados, la temática siempre era la misma, Leyendas griegas, y competían entre ellos de cuántas personas los emplearían como imagen para llegar al bar más codiciado.

La mayoría de las veces ganaba Perseo y Prometeo, y los demás debían rendirles sacrificios sexuales maravillando sus deseos.

Esta vez, no fue la excepción, pero no contaban, que, una visita inesperada, llegara ahí para desatar el deseo de todos.

Solo faltaban 2 minutos para el equinoccio de primavera, los semidioses miraban desde la barandilla del tercer piso a las personas disfrazadas de ellos mismos, apostando a quien ganaría.

—Es lógico que Namjoon ganara, siempre lo hace – dijo con doble voz por su doble sexo, el atractivo Taehyung. — Lo puedo ver

—Este juego ya me aburre, nunca he visto a alguien disfrazado de mí —reclamo con un puchero.

—¿Y quién querría disfrazarse de ti, Jimin?

—Soy un ángel caído, Jin —reclamo molesto

—No lo eres, tu padre creo alas de cera y tu muy porfiado te acercaste al sol y caíste, eso no quiere decir que seas un ángel —rio cómicamente burlándose de él.

—Suficiente —hablo con una voz profunda— solo quiero una sensual chica haciéndome el mejor oral de mi vida, es lo único que pediré si gano. — Hobi bufo ante sus palabras.

—algún día llegará una chica que te hará perder la cabeza y no te bastará solo con un oral, Jungkook.

Kook se quedó pensativo, solo una vez en la antigüedad quedó flechado con una mujer, una que vio en la terrible guerra de los 10 años, luchando con los monstruos y siendo devorada por uno de ellos, ese día, apenas se enamoró de ella, también sufrió por su muerte.
Solo de ira se encegueció y lucho hasta que su cuerpo no pudo más, y matar la última que tenía como tío, provocó una avalancha de rocas, la que hizo encerrar a aquellos monstruos y así ganando la guerra.

Suspiro al escuchar a su “primo” y dirigió la mirada a él, los ojos de HoSeok brillaban al ver a su amor, Jisso, deseando y anhelando tener lo que él.

—Es tiempo y en 10 —comenzó la cuenta regresiva Tae – 5, 4, 3 …..

—¡Ay! No… — Yoongi se paró en frente de él, notando sus ojos blancos– Tae, que ves. –tomo de sus hombros y sacudió.

–No puede ser –dijo la parte femenina de Tae y dirigió la vista a la entrada–

Una chica con un bello vestido griego color ocre, su cabello rubio y extensos llenos de trenzas y hojas de olivo como corona, una máscara blanca con adornos dorados, un cuerpo espléndido que por donde pasaba, hombres y mujeres se le quedaban viendo, se acercó a la barra y las brujas se juntaron una a la otra, mirándola con desquicio.

Jungkook miraba a la lejanía, y algo en ella le era familiar, pero no sabía qué IU salió de su oficina y camino hacia el segundo piso, sentándose en las piernas de Jeon, quien, para nada, le prestó atención.

—La quieres para ti? —acaricio su mejilla seduciéndolo— puedo hacer que la tengas, solo dilo.

—A cambio de qué? —pregunto sin quitar la vista de aquella señorita con cabellos dorados, IU sonrió.

—Ya lo sabes, hazme tu mujer.

—Eso nunca sucederá, aunque seas la última mujer de este mundo. —se levantó molesta de él, y bajo las escaleras, Kook inclino su cuerpo y apoyo sus codos en sus rodillas, viendo con detención.

IU se acercó a la chica y susurró en su oído, los poderes de ecos, eran utilizados para hipnotizar a las personas y así, ellos podían tener a quienes quisieran como objetos sexuales y luego de terminar con ellos, ecos quitaba el mesmerismo y ellos jamás se enteraron de dicha intimidad con los semidioses.

Esta vez, fue una excepción.

IU susurraba en su lengua natal mientras la chica bebía el trago color Calipso, los del segundo piso podían ver las ondas sonoras entrar por los oídos de la rubia, pero cuando terminó, ella se le quedó viendo sin moverse siquiera.

Kook noto un leve y suave movimiento de sus dedos, que hizo erguir el cuerpo de IU, acercarse a uno de los chicos de la barra, y lanzarse a los labios de él, montándolo perdida en el deseo, llamando la atención de todos en el lugar.

Las brujas llevaron sus manos a su boca sorprendidas al mismo tiempo, las trillizas tenían eso de actuar a la vez.

—A —dijo Jennie

—Fro —prosiguió Rose

—Di —siguió lisa

—Ta —concluyeron las tres.

Jungkook se levantó de un salto, no creyendo lo que oía o veía.

—Sabía que era ella —grito emocionado la masculinidad de Tae, llamando la atención de ella, mirando arriba, y moviendo su cuerpo de inmediato para salir del sitio.

Perseo, salto desde arriba aterrizando perfectamente, ella se encontraba atorada entre la gente bailando, con la fuerza del chico movió los cuerpos a su paso, alcanzando a tomar de su muñeca y deteniéndola con brusquedad.

—Suéltame —sonó la voz armoniosa y miro hacia él.

Jeon se reflejó en aquellos ojos color miel, grandes y redondos, ella jalaba, pero no podía soltarse, con su otra mano levanto directo a su máscara para quitarla y poder verla.

La inquietud de la bella chica la hizo usar de sus poderes, y con solo un leve movimiento de su muñeca libre desato la pasión de todos en la pista de baile.

Una chica se abalanzó a los labios de Kook y para quitarla de su frente soltó el agarre, haciendo que "Afrodita” al fin pudiera escapar de casi ser descubierta.

Se podía escuchar las carcajadas de los semidioses a los que no les afecto los poderes sueltos de la Sodoma y Gomorra.

HoSeok y Namjoon debieron bajar y quitar de las garras de hombres y mujeres que manoseaba incansablemente al héroe griego.

Con su ropa desordenada, cabello despeinado, su pantalón abierto y marcado de besos en su rostro y cuello, llegó Perseo al segundo piso, siendo la burla de los que estaban ahí, pero no tanto, como IU que, apenas y la chica se fue se dio cuenta de que estaba siendo follada por un simple mortal.