Una mentira causa un giro inesperado en la vida de Lena Luthor una jóven mujer que vive su vida alejada de todos a su manera, tras ese suceso está abandona su hogar y regresa a Ciudad Nacional con el objetivo de arreglarlo todo pero nuevamente se ve...
Había despertado después de ella lo que era particularmente extraño, aún así tomé la lista que se veía acompañada de una flor azul de papel y la leí en silencio y pensé, ¿qué tramas?, hice toda mi rutina como lo haría si estuviera en casa. Al terminar tomé aquel traje que poseía uno de mis tantos colores favoritos, me lo puse y al asegurarme por tercera vez que estaba bien salí de la habitación.
La casa tenía un aroma a vainilla, la mesa que estaba en la sala tenía puesto el desayuno que se mantenía caliente, me senté en la silla y comí, no la veía pero si escuchaba los ruidos que provenían del jardín, seguía intrigada. Cuando llevé mi plato a lavar una nota se encontraba pegada justo en la alacena.
"Eres terriblemente imperfecta, tardé mucho tiempo para descubrirlo pero aún así no me arrepiento de haberte dicho en un pasado que eras la perfección hecha mujer ya que ante mis ojos siempre lo serás aún siendo consciente de la verdad, jamás importara nadie más que tú."
Sonreí sin saber por qué en aquellos segundos, si ya no me veía como la perfección hecha mujer, como una diosa, entonces lo hacía como una persona para ella era una humana, los humanos cometen errores y sin desearlo pueden destruir todo aquello que amamos tanto me amaba para aceptarlo y arriesgarse, tanta había sido aquella confianza que creció en ella para seguir conmigo.
Las palabras que siempre rodearon a mi familia era no confíes en un Luthor, el significado para otros era siniestro, pero para cada uno era respuesta. Para proteger a quien en verdad amamos estamos dispuestos a herirlos para que nos odien y se alejen, su distancia es su salvación, para nosotros un golpe diario al corazón. Confiaba en ella, lo había aprendido a hacer, podía matarme, podía volver a ser aquella que trato una y otra vez de mantenerme a su lado del peor modo posible ella podía ser peor que antes, igual o mejor pero confiar en ella me hacía crecer ese miedo era eso, miedo nada más. Salí de la casa y me la encontré de inmediato.
Ella sonríe mientras nota nuestra cercanía, parecía tan feliz.
Kara:- Dormiste bien.
Lena:- Lo hice, ¿tú lo hiciste?
Kara:- Claro que sí.
Lena:- Hiciste todo esto hoy.
Kara:- Todo está listo para nuestra boda.
Lena:- ¿Cuáles son mis opciones?
Kara:- Quedarte y ver lo que sigue o volver a la casa y esperarme allí.
Lena:- Me quedó.
Minutos después...
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