D Í A; U N O

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Freddy entró en su habitación llena de recuerdos, eso eran ahora.

Llena de fotografías por todos lados, y la dormida del azabache en la mayoría de ellas.

Se sentó en el suelo mirando a la nada. Con una expresión vacía.

¿Por qué no estaba llorando?

Estaba en shock.

No es cierto, ¿Verdad? Seguramente me quedé dormido y ahora voy a despertar. Decía para si mismo el castaño entre sus pensamientos.

Se dejó caer de lado, en el piso frío, un pedazo de papel resbaló de su chamarra, lo miró con desinterés, no se creía capaz de leer algo que Fred escribiera antes de partir.

Sus ojos se cerraron poco a poco.

Ideas que le lastiman bailaban al rededor de su cabeza, de forma macabra, desparramando sangre por sus ojos, boca y fosas nasales.

Oh Fred. Mi querido Fred.

Tenía la mejor parte de ti.

Y ahora no tengo nada.

Decía Freddy, en el día uno sin Fred.

Día uno (Freddedy)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora