𝕮𝖚𝖕𝖎𝖉; 𝕸𝖎𝖌𝖚𝖊𝖑 𝕮𝖆𝖟𝖆𝖗𝖊𝖟 𝕸𝖔𝖗𝖆

𝕮𝖍𝖆𝖕𝖙𝖊𝖗 12; 𝕻𝖍𝖞𝖘𝖎𝖈𝖆𝖑 𝖈𝖔𝖓𝖙𝖆𝖈𝖙

☾𝕶𝖎𝖆𝖗𝖆 𝕯𝖔𝖜𝖓𝖊𝖞

Me desperté debido al ruido que venia de la cocina. Cuando abrí mis ojos, pude ver la hermosa imagen de Miguel y Enzo durmiendo. No los quise despertar, así que me levante lentamente. Pase el muro que dividía la cocina y la sala, para encontrar a la mama de Miguel y a la mía en la cocina, riendo y comiendo.

-Oh, hola cariño. ¿Dormiste bien?- pregunto burlona mi mamá, por lo que Wendy rió y yo igual, sarcásticamente.

-Sí mamá, dormí muy bien- dije sarcástica.

Me quede hablando con ellas un rato hasta que Miguel apareció en la puerta con los ojos entrecerrados y descalzo.

-Hola, querido- dijo Wendy.

Todas reímos un poco al ver su cabello desordenado.

-No al bullying- se quejo.

-¿Por qué se durmieron acá abajo? Hubieran dormido arriba...y tal vez un poco separados.

Mi mamá y la de Miguel rieron burlonas por lo que me puse nerviosa y voltee a ver a Miguel, quien estaba rojo...otra vez.

-Bueno, Enzo ya se había dormido, así que no lo queríamos despertar y nos quedamos dormidos.

-Linda historia, haré que no es una mentira- dijo mi mamá y yo le sonreí sarcásticamente.

Seguimos platicando, pero ahora con Miguel. La conversación era tranquila, hasta que me distraje por Miguel. Lo voltee a ver y se estaba acomodando el cabello, creo que tenia calor. Me dio un poco de pena, pero, quien tenga miedo a morir, que no nazca. Me acerque a el, rodeando la barra de la cocina. Todos me miraron extrañados. Cuando llegue al lado de Miguel me sonrió confundido. 

-¿Puedo?- pregunté extendiendo mi mano para que me diera su liga.

El se mostraba un poco nervioso e indeciso, pero me la termino dando. 

Acerque una silla para que se sentara ya que el era un poco mas alto que yo. Se sentó y empece a peinar su cabello. La mamá de Miguel y la mía se veían emocionadas, incluso se voltearon a ver (nada discretas) y gritaron en silencio, causando risas nuestras. 

Trataron de tranquilizarse y siguieron hablando mientras yo amarraba el cabello de Miguel. Mi mamá volteaba a verme y me levantaba el dedo pulgar, por lo que yo solo negaba divertida y reía. Mientras que la mamá de Miguel lo volteaba a ver con emoción, haciendo que Miguel riera de la misma manera.

Termine de hacerle un chongo (bastante estéril, sin presumir) y estaba decidida a volver a mi asiento, pero sentí una mano sobre la mía.

Y si, efectivamente, era la mano de Miguel.

Sinceramente, me puse muy nerviosa, y empeoro cuando lo voltee a ver, mostrando una gran sonrisa en su rostro. El me hizo un gesto para que me sentara a su lado. Yo voltee a ver a mi mamá nerviosa, quien ya estaba agarrada del brazo de Wendy de la emoción.

Las dos me asintieron emocionadas y yo solo reí extrañada por su comportamiento y fui hacia el asiento que me había apartado Miguel.

El resto de la platica, fue de cosas de las que sinceramente ni siquiera estaba prestando atención, ya que estaba muy entretenida jugando con la mano de Miguel. 

Estuve un buen rato entretenida hasta que Noah llego.

-Hola personitas enfermas, ya llego la luz de esta casa- dijo, miren nada mas a esta descarada.

-O sea, quisieras mi vida- le dije muy propia.

-Uy, pues acá pura envidia.

-¿Dónde estabas?- pregunto mi mamá.