Your Name ☠ Death Note [LawLight] ✓Omegaverse

[15] ☠️Imprudencias☠️

Un rayo de sol impactando mi rostro y la irritante fricción de la cadena chocando con el suelo me forzó a despertar, mis ojos se sentían bastante agobiados y pesados ​​por lo que me costó unos segundos despertar por completo, aquella noche había sido tortuosamente larga, pasé algunas horas moviéndome de un lado a otro, tratando de conciliar el sueño ignorando la luz y el sonido del monitor del computador siendo manejado con agilidad por el pálido ojeroso.

Esa mañana, al igual que las anteriores me dirigí al baño, siendo escoltado por Ryusaki. El baño estaba dividido en dos por una mampara que permitía la privacidad de ambos, aunque no dejaba de ser incómodo debido a las cadenas que nos mantenían unidos y mi posición como acusado. Aunque hasta este punto había aprendido a sobrellevarlo.

Después de todo pretendía convencerme de que esta experiencia me sería útil para mi desarrollo profesional en un futuro. Al menos me encontré con el mejor detective a nivel internacional. Aún no lograba olvidar todo el daño que sus sospechas me estaban causando, pues mi vida había dado un giro drástico desde el inicio de esta investigación, pero de cierta forma comprensión que para él eran medidas para proteger su vida. Desde hace un mes, desde que me liberaron, comencé a instalar en mí una ligera curiosidad acerca de sus motivaciones para someterse a tan extremas condiciones. Como era fácil darse cuenta, Ryusaki no era querido por el FBI, ni las fuerzas internacionales, parecía no recibir beneficio alguno por este arduo trabajo. Aunque aparentemente, tampoco es como si l necesitara el presupuesto empleado en la construcción de este edificio rebosaba el sueldo de todos los agentes de la fuerza especial todos juntos, incluyendo los altos mandos por lo que su propósito no era económico. No parecía ser alguien quien tenga la fama como propósito pues desde hace varios años ha sido un tema intrigante para los medios...

¿Entonces qué lo impulsaba a llegar a este punto?

Francamente de la curiosidad no pasaría, yo no le veía como un ser humano, después de actos tan atroces me había hecho a la idea de que ese sujeto no era alguien de fiar, acercarme a él sol me traería más prejuicios a mi inestable vida.
Luego de cada día en los que me vi forzado a ignorarle, ya me había acostumbrado al sonido de sus ágiles dedos tecleando con rapidez infinidad de códigos que solo él sabía, el constante aroma a dulces que lo rodeaba y su actitud indiferente que dejaba en claro. que no le importaba nada... A penas me preguntaba si deseaba comer algo, además de eso jamás nos dirigimos la palabra.

Me disgustaba y me atraía esa sagacidad con la que trabajaba, ese diamante único que poseía en su cabeza. Quería conocer sus debilidades, sus secretos. ¿Por qué? Ya no lo comprendía, solo sabía que se había implantado en mi cabeza el pensamiento recurrente de obtener información sobre él.

Entre nuestra extraña convivencia y el constante ritmo acelerado del trabajo, había llegado el invierno y la temperatura había descendido bastante, la noche anterior había sido una noche fría por lo que agradecía aquellos instantes bajo la regadera donde la sensación de estar recluido parecía más fuerte. Solo tenía diez minutos con mis extremidades libres de cadenas para poder seguir mi rutina de limpieza habitual. Sentía una agradable calidez en el ambiente que me provocó una extraña sensación de relajación que había estado ausente en mí desde los estragos que había causado Kira. Bajo las gotas de agua tibia descendiendo por mi cuerpo, sentí mis entrañas removerse en una alerta desconocida que me llamaba desde el fondo de mi mente, sentí mis nervios ligeramente más sensibles, mis vellos se erizaron al percatarme de un sutil aroma casi imperceptible que empezaba a deleitarme en medio del espeso vapor que se difundía en el ambiente. Escuchaba el sonido del agua chocando con el suelo del otro lado de la división, supuse que se trataba de algún nuevo jabón o producto de limpieza que ahora usaba el detective, me provocó inquietud aquel olor indescriptible y tan único que me recordó a unas memorias hasta el momento olvidadas, sensaciones aparentemente familiares.