III

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Me sentía agotado y apenas iban a dar las 4 de la tarde, tal vez porque no dormí nada.

La señora Nayeon había salido a llevar un encargo de tupers y a mi me había dejado a cargo de la fuente de sodas... o bueno, al menos eso le decíamos al pequeño local con un refrigerador al frente donde se vendían paletas y gelatinas con 2 pequeñas mesitas y una sombrilla que más que dar sombra, daba pena.

Yo trabajaba en verano de 11 am a 5pm, despachando, haciendo té helados y vendiendo ramen express.

Mientras al fondo lavaba el contenedor del helado que se había acabado escuche un gritó:

-¡Quiero!-

Salí y vi desparramado en su silla a un joven más que bien conocido.

-¿Yoongi?, ¿Qué haces aquí?, se supone que tendrías que estar en la escuela con Jin...

Yoongi movió las manos en señal que le valía un reverendo pepino.

Se había salido y ahora se refugiaba del sol y de las responsabilidades bajo la sombrilla de colores.

- Me voy a tu casa- Me dijo después de beber un té frío de limón y canela que le había servido, me senté frente a él.

-Si vas a mi casa a esta hora mi mamá se va a enterar que te largaste de la escuela y te va a regañar a TI y a Jin también.

Yoongi se frotó las manos contra la cara, pude ver a la perfeccion sus manos blancas y sus venas verdes resaltando, la pulsera negra de cuero, que hacía juego con sus ojos.

- Tienes razón pequeño mochi, entonces... me quedaré aquí, contigo...

¿Qué?

¿Acababa de oír bien?

Pero Yoongi no me dejo replicar, se levantó de un salto y se dirigió a la parte de atrás, donde se encontraba la pequeña cocina del local.

Entre mis gritos y empujones por sacarlo de ahí, no me dejó más opción que... pues aceptar que pasara esa hora disque ayudándome.

-Mira, así se mueve la gelatina y se va agregando poco a poco la grenetina para que quede dura...- le dije mientras le daba la espalda para revolver la gelatina.

Pero mi respiración se detuvo cuando sentí el cuerpo pesado recargandose sobre mi costado y su rostro inclinándose sobre mi hombro.

-A ver pequeño....

Su ronca voz volvía a golpear mi oído, provocando que mis piernas se volvieran así, como gelatinas.

Sentí un bulto pegado a mi cadera.

No... me debía de estar equivocando...

Él no podria estar...

-¿Qué hacen?- Dijo la señora Nayeon.

Ambos nos alejamos como si tuvieramos lepra, le explique quien era Yoongi y rápidamente la señora Nayeon cambió de actitud. Se puso alabar al papa de Yoongi. Parece que el señor es muy influyente, se rumorea que podría ser el próximo candidato a gobernador de Seúl.

Yoongi se puso a escribir mientras yo terminaba mis labores.

El idiota de Charly hizo su aparición.

-¡Oye papanatas!- me gritó.

Yo solo voltee los ojos, me dispuse a despachar su té helado de naranja.
El idiota me tiró las monedas al mostrador y se fue riendo.

Me quite el delantal frustrado. Me derrumbe en la silla frente a Yoongi.

Yoongi me preguntó quién era ese. le conté que él muy cabron me había hecho la vida imposible desde los 12 años cuando lo patee en fútbol.

-No le hagas caso a los perdedores - Me dijo, arrancando la hoja en la que escribía.

-¡Oye!, no hagas eso, no desperdicies las hojas, los árboles se mueren por tu culpa.

Yoongi esbozó una sonrisa divertida, empezó a hacer un origami de grulla.

--No la estoy desperdiciando, la canción se ha convertido en una grulla. Extendió su mano para dármela.

Caminamos a mi casa, y yo creo que tengo parásitos porque siento que me revolotea la panza.

.......

Le coloque a la grulla una cuerdita y ahora cuelga sobre mi escritorio.

¿Qué rayos?

Bueno, tal vez el Yoongis no es mala persona.

Me tumbo en la cama nuevamente y mis pensamientos me llevan de vuelta a la gelatina, siento la opresión en mi cadera. Fue su... bulto lo que sentí o solo estoy imaginando

Y otra vez me masturbo con el nombre de Yoongi ahogado en mi garganta.



llevo grabado tu nombre ((yoonmin)) 1995🎧📻Donde viven las historias. Descúbrelo ahora