llevo grabado tu nombre ((yoonmin)) 1995🎧📻

XIX

El papá de Yoongi huyó a Daegu cuando la crisis económica alcanzó su máximo, fue acusado de lavado de dinero, extorsión e incluso, el nombre de Yoongi fue ensuciado a tal grado que aunque hubiese querido no iba poder regresar a Corea.

Noviembre de 1998...

Un año pasó muy rápido. Ya solo me faltaban 4 meses para terminar el servicio.

Taemin y yo nos llevábamos muy bien. Me trataba de una manera tan dulce que podría haberme enamorado de él perdidamente.

Tenia una sonrisa muy bonita, pero para mi corazón no era lo suficiente para llenarme de alegría.

Ese día en año nuevo, Taemin y yo intentamos tener sexo, pero todo fue un fracaso, terminé pateandolo y aventandolo contra el suelo. Ya que me dolió demasiado cuando quiso entrar en mi.

El no se enojó, yo quería que lo hiciera, en cambio, me abrazó, pero yo ya no me sentía bien, así que mejor me fui de su casa.

Regrese caminando, a mi paso veía a las familias y la gente feliz, llevando sus luces de bengala en la mano. ¿Cuándo fue la última vez que me sentí feliz?, ¿cuándo fue que mi corazón se olvidó de latir?

Cerre los ojos, dejando que la nieve cayera en ellos, la gélida brisa rompía mi piel, como hacia mucho tiempo se rompieron mis sueños.

Por fin llegué a mi departamento, el portero salió a recibirme, tenía su gorrito de Santa Claus y a duras penas podía estar en pie.

—¡He, muchacho!, te dejaron esto desde hace una semana pero se me había olvidado. Me dijo extendiéndome, lo que parecía una carta.

La tome sin darle importancia.

Hice varias cosas al llegar a mi departamento, hasta que después recordé la carta.

Tenia escrito mi nombre, y el remitente un:
Torres, Agusto
St. Long Island #152
San Diego. California.
USA

Mi corazón empezaba a latir con fuerza.

Con las manos temblando, abrí el sobre, dentro venía un CD y una grulla. Se me cayeron de las manos de la impresión. Mis ojos comenzaron a llenarse de lágrimas.

Con la respiración entre cortada puse el CD en el reproductor portátil, otra vez esa canción, otra vez su ronca voz me llamaba....

Más de un año sin saber de él, más de un año pensando que debíamos de olvidarnos, más de un año tratando de olvidarlo y de nuevo aparecía para quemar todo y renacer como un ave fénix porque por más que lo haya intentado, seguía amandolo como cuando tenía 16 años.

¿Por qué soy tan cobarde?, ¿por qué no puedo ir contigo?.

Las cartas siguieron llegando, mes con mes, solo una grulla y un CD, con una canción diferente.

Después de 5 meses. Solo Llegaron 1500 dólares. Y una nota que decía:
Esta es la última. Tu sabes la dirección. Por favor... no tardes...

Caí de rodillas, con la nota en la mano, mis miedos se habían hecho más grandes que mis esperanzas. ¿Y si al verme ya no sentía lo mismo?. ¿Si pasaban otras cosas malas?.

El siguiente mes no llegó la carta esperada.

El siguiente mes tampoco....

Ni el siguiente...

—Creo que es mejor así.— me lo trataba de repetir a diario, frente al espejo, esforzándome por convencerme a mi mismo de esas palabras.

.....