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Narra: Foxy.

-¿Y cómo se lo va a pedir?- le pregunté a Bon.

-pues en realidad no te puedo decir aún.- dijo.- ya después te digo, aunque creeme que fue bastante sencilla la manera,  yo le dije que se lo pidiera en la boda pero, Deuz dijo que ese día era para nosotros.

Asentí, últimamente Deuz no me caía tan mal, y eso era bueno.

-por cierto.- continuó bon.- ¿Puedo ver los preparativos que ya tienes para la boda? Ya estamos en cuenta regresiva.

-Bon.- le dije en lo que lo abrazaba.- los podrás ver en al menos 4 horas más.

-¿Por qué en 4 horas más?

-porque debes descansar, no quiero que de inmediato te presiones, yo hice lo que pude para complacer lo que más te gustaría tener en la boda, así que confía en mí al menos 4 horas.

-¿Tienes algo planeado?

-bueno, quizás Bon, quizás.

El sonrió en lo que entrabamos a casa.

-¿Tienes hambre?

-no se ¿Hay pastel?

-Bon.- lo llame.- primero tienes que que comer algo más.

-entonces no tengo hambre.

Solté una risa.

-bueno ya, si hay pastel bebé hermoso.

Bon me miró divertido y sonrió.

-como debe ser.

El fue caminando a la cocina y yo lo seguí tranquilamente.

-Bon te amo.- le dije y el se detuvo.- y te extrañe mucho.

Después solo le di un abrazo.
Bon sonrió y me respondió el abrazo.

-ya no me vas a tener que extrañar, voy a estar aquí contigo y nos vamos a casar.- dijo.- y yo también te amo.

Me agache para darle un beso algo tranquilo pero honesto

Narra: Deuz.
Deje la maleta justo en frente del sofá en lo que me sentaba sujetando la mano de Onnie.

-¿Que tal el vuelo?- me preguntó.

- no me gusta volar.- dije.- pero traje muchas cosas para ti, se que te gustarían.

El asintio y lo atraje para sentarnos en el sofá.

-¿Quieres ver los regalos?

Genial, ya casi puedo iniciar el plan.
Todo comenzará cuando la curiosas de Onnie lo haga decir que si.

-quiero estar más contigo.- dijo.- luego vemos los regalos.

El universo juega conmigo, Onnie siempre tiene curiosidad sobre los regalos.
Y justo ahora, que su sorpresa está en la maleta.

No tiene más curiosidad.

-bueno, tienes razón ahí.- dije disimulando.

-te vez tenso.- dijo.- es un buen cambio que ahora seas tú el nervioso y no yo.

Sonreí y rodee su cintura con mi brazo, me hice de lado y junte mi frente a la suya.

Quería hacerlo de forma disimulada, pero voy a tener que insistir.

-traje regalos que se que te gustarán.- dije.- cosas con brillo.

A Onnie le gustan las cosas que brillan, ahora sí que lo tengo.

-eres más importante que las piedras Deuz, quiero disfrutar estar contigo.

¡¿POR QUÉ JUSTO CUANDO NECESITO QUE SEAS CURIOSO NO PARAS DE SER ALGUIEN NORMAL ONNIE?!

Un desastre Donde viven las historias. Descúbrelo ahora