Shikamaru se levantó desde que el primer rayo de sol se mostró en las tierras ninjas. Sin hacer ruido al andar se preparó y salió de su casa logrando no despertar a sus padres. Sin detenerse salto a los techos, corrió hasta el punto de encuentro sin importarle el cansancio o las ganas de detenerse y mirar las nubes.
Corrió hasta llegar a un amplio campo de entrenamiento muy cerca del bosque de la muerte, nunca había estado aquí así que observo a su alrededor tratando de ver como es el terreno. No había nadie allí, al menos no que él pueda ver, pero aún a eso él se preparó para una pelea. Salto y debajo de él una enorme serpiente salió del suelo con las fauces abiertas preparada para devorarle. Con un movimiento rápido Shikamaru lanzo un kunai el cual impacto en el ojo dela serpiente dándole suficiente tiempo como para modificar su trayectoria y atacar a la serpiente hasta que esta desapareció en una bola de humo
Shikamaru no se pudo permitir parar para recomponerse teniendo que desviar un gran número de senbons lanzados a él desde una posición desconocida seguidos por numerosas serpientes de múltiples tamaños. Él no tuvo problemas para esquivar cada uno de ellos, mientras empezó a controlar su sombra para encontrar a su verdadero contrincante.
Aún al saltar, correr y atacar su sombra sigue buscando por todos lados del bosque en los alrededores del campo a su contrincante. Esto es difícil y está tomando mucha más concentración de la que Shikamaru se puede permitir en estos momentos, hasta que al fin lo sintió y tomo control. Los ataques se detuvieron al momento del enlace.
Lentamente, ando en la dirección de su contrincante forzando a este a andar también. De entre los arbustos Anko salió con una enorme sonrisa en su rostro mientras observaba a Shikamaru. Esta parece expectante como si espera que él haga algo más, como si aún no ha perdido. Shikamaru empezó a pensar en cientos de cosas que la mujer haya podido hacer para contrarrestar su técnica
Fue cuando Anko se empezó a derretir en lodo cuando se dio cuenta de lo que hizo ¡Un clon! Shikamaru dejo caer la técnica yendo rápido a por uno de sus kunai. Pero ya era demasiado tarde. La verdadera Anko sostenía un kunai en su cuello dejando caer una pequeña gota de sangre.
- Yo gano -Habló Anko- Otra vez... -Ella se rio tras eso alejándose del chico quien tomo su cuello y empezó a respirar lentamente para recuperar el aliento.
- Clon de tierra -Dijo Shikamaru- No sabía que podías hacer eso, ¿No eres de naturaleza de fuego?
Anko se apoyó en un árbol moviendo entre sus dedos uno de sus senbons mientras se intentaba hacer la guay, pero en verdad lograba verse completamente egocéntrica. Shikamaru suspiro al verla así, pero no dijo nada esperando la respuesta de su sensei
- "Un ninja de un solo truco es un ninja muerto" -Dijo- ¿Es que nunca has leído un libro ninja? -Anko rio- Tampoco es que te culpara casi nadie lo hace y quienes lo hacen van solo por accidente o para buscar jutsus que se vean cool
Shikamaru se dejó caer sobre un árbol descansando por la breve pelea que tuvieron. Recapitulo cada momento de esta, la serpiente gigante, los senbons y las otras serpientes junto al clon de tierra. Ella ya lo tenía todo preparado desde mucho antes de que él llegara. De alguna forma pudo predecir sus movimientos para que todo esté correctamente alineado para ella ganar sin siquiera sudar
Anko se dio cuenta de que Shikamaru estaba analizando lo sucedido, ya que estaba haciendo la cosa está de apoyarse en una de sus rodillas y mirar al suelo sin parpadear. No se da cuenta de que lo hace, pero hace obvio cuando de verdad se está tomando las cosas en serio.
- Soy muy obvio -Concluyó- Mis movimientos son demasiado fáciles de predecir, mi arsenal de técnicas y habilidades es muy pequeño y no me preparo correctamente para la batalla.
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Fugitivos Enamorados
FanfictionVivimos en un mundo donde el poder lo es todo, las aldeas con los más poderes son siempre las que mejor viven, mejor comida, mejores viviendas, más comercio, alianzas... pero también enemigos Konoha es una de estas aldeas, vista como el paraíso, un...