Tsunade

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Tsunade miro el camino. Llevaban corriendo desde que salieron de Konoha tratando de llegar al último lugar donde se les vio. Se les unió un segundo grupo que estaba en una misión cercana al camino compuesto por Shikamaru, Anko y un equipo gennin de la arena. 

No falta mucho para llegar. Pronto le volverá a ver. 

Excepto por un ambu en guardia todos estaban durmiendo, era una noche tranquila sin mucho que ver. La briza fresca y el sonido de los grillos es lo uno que uno puede escuchar, perfecto para dejar a uno pensar con tranquilidad.

Cuando vuelva a Konoha hay muchos cambios, debe arreglar todo lo que el tercero causo y permitió, además de hacer todo lo posible por convertir la vida de los ninjas en algo de lo que no se podrían arrepentir. Con un mejor sistema médico, no solo mental, sino también psicológico, junto a más pruebas no solo basadas en la fuerza de uno para subir de rango. Como Hokage tiene la oportunidad de arreglar el sistema que ha dañado a tantos niños en el pasado.

Su sensei no es perfecto y ella tampoco lo es. Lo más probable es que sola no lo logre arreglar todo, pero, Konoha no debe ser una dictadura. Con la ayuda de los aldeanos y ninjas por igual, sin importar la edad, el rango o su capacidad económica podrán opinar en el futuro de la aldea. Esta vez lo hará todo mejor.

Con una pequeña sonrisa y una libreta preparada para apuntar cualquier idea que se le ocurra se alejó del campamento para dar un paseo. Dio una señal al ambu en guardia para decirle que todo estaba bien y que siguiera en su puesto mientras ella caminaba un rato.

Echaba de menos pasear por el mundo, aún no sabe que la hizo aceptar la oferta de Jiraija para convertirse en Hokage, el estar restringida en esa oficina sin nada más que hacer que rellenar documentos sin parar. Odia esa vida, no le gusta estar encarcelada de esa manera. 

Pero eso le está dando la oportunidad de cambiar todo lo malo en su aldea, y quien sabe, a lo mejor los cambios que haga serán imitados por otras aldeas. Al menos sí funcionan correctamente, por supuesto. 

Tsunade recuerda haber pasado por este camino antes, en realidad por exactamente la misma trayectoria que Naruto y su grupo están tomando. Es la ruta en tierra más inteligente para escapar de Konoha sin ser atrapados. Si no recuerda mal un poco más adelante hay un pequeño pueblo que le gustaba visitar en sus primeros años fuera de la aldea.

No tenía un casino pero sí un pequeño hospital. Le gustaba ir allí y ayudar a los doctores a aprender más cosas. Colocaba a Shisune con los enfermeros para enseñarles las técnicas médicas de primeros auxilios mientras ella trabajaba con los doctores. No solo dándole técnicas básicas de medicina sino también enseñándoles lo que necesitan para realizar cirugías.

Solo logró enseñarles lo básico, pero espera que todo esté yendo bien en ese lugar, la gente era muy amable, espera que no les haya pasado nada en estos años.


Su cuerpo se tensó instintivamente al escuchar unos pasos cercanos. Es extraño escuchar a alguien andando por el bosque a estas horas de la noche si no tiene algún entrenamiento de defensa propia. Puede que solo sea algún mercader que se separó de su grupo, pero bajar la guardia es algo que nunca se ha permitido

Ando silenciosamente y ocultando su chakra en dirección de los pasos. No tardo mucho en llegar. Se quedó en shock unos momentos, no se esperaba ver a esta persona, no aquí, no ahora y mucho menos sola.

Delante de ella estaba Tayuya. La ex ninja de Orochimaru y la persona que se fue con Naruto. Se planteó simplemente matarla y librarse del problema. Pero es mejor si la aprovecha para tratar de encontrar a Naruto

- ¿Hokage-san? -Tsunade abrió los ojos en sorpresa, ¿Cómo pudo detectarla? Puede que haya subestimado sus habilidades de rastreo, especialmente después de pasar tanto tiempo como fugitiva.

Fugitivos EnamoradosDonde viven las historias. Descúbrelo ahora