Raíces ensangrentadas, una historia de Sol y Luna

Parte sin título 35

 LUNA

- Giovanna, miles de años tengo, créeme cuando te digo que mi paciencia es selectiva y limitada.- Siguió caminando haciéndome caso omiso. Llevábamos así veinte minutos y fueguito se limitaba a intentar engañarme. En su cabeza yo no me estaba dando cuenta que estaba persiguiendo a Sol. Intentaba ser comprensiva pero...- Cara...

- ¿Cara? A ver si te lo digo en italiano para que lo entiendas. Vado a la merda.

- ¿hablas italiano?- no iba a aclarar que era un italiano muy pobre

- Jodete- escupió sin voltearse

La alcancé tomándola del brazo con fuerza

- Mira fueguito, no voy a lidiar con tu lado de niña malcriada ahora. Si te quisiéramos hacer daño a ti o a tu hermano ya lo hubiéramos hecho. Deja de ser idiota YA HABIAMOS CALCINADO GENTE ANTES

- ERA DISTINTO

- Sí, claro, súper- la ironía escapó de mis labios con una satisfacción amarga

- Antes habían matado a uno de los nuestros, no pensé que se repetiría.

- Giovanna.- la acerqué a mí y le dije con voz muy profunda.- No estamos en apuestas ilegales, o un pleito menor. Esto es una guerra, una en la cual estas directamente involucrada, hay que buscar aliados, hay que mantenerse con vida y tarde o temprano vas a terminar siendo igual o peor que yo.

Lagrimas orgullosas se estancaban en los ojos de Gio sin derramarse

- Nunca.- su voz no se quebró a pesar del gran esfuerzo por no llorar

- Bueno, voy arrendando una parcela para tu sepelio.- Entroné los ojos. – Pero como no voy a permitir que mueras tendré que soportar tus berrinches.- Me miró intensamente hasta que notó el puente detrás de mi

- Contigo es todo gritos

- ... Si sabes que tu empezaste no?-. Ella se liberó de mi agarre y fue corriendo hasta el puente donde pareció petrificada.

- Puta madre, Giovanna.

- Niño manipulable ¿Qué carajos le pasa a tu hermana?

- Mi Hermana lo quiere.- ahora si estaba molesta por la actitud tan infantil que había tenido, tan concentrada en juzgarla que no premedité lo siguiente

Una gran cantidad de Agua había arremetido contra Maxi y Sol separándolos, La gente del Agua gritaba molesta y la temperatura había bajado de repente. Giovana estaba parada en posición de ataque, cabeza gacha, mano al frente y sumamente agitada.

- La acabas de cagar muchísimo.- le dije en un tono tan frio que hasta ella, en su congelamiento, se estremeció

 Los brujos, como creo haberles contado son irritablemente ordenados y moralmente inescrutables. cinco minutos para arreglar el gran error de Giovana 

Violencia

En la ciudad más tediosamente utopica  ¿puedes creerlo? pretenciosos. En cinco minutoss llegarían los guardias y una vez apresados no serian recibidos en la guardia ni en la biblioteca, más importante aún, las catacumbas donde deberían residir sin rastro a causa de la  magia, al menos hasta saber lo suficiente

 Gracias a los ancianos Sol es un ser con mucho más IQ que estos hermanos y ya habia empezado a persuadir a la gente del agua. Maxi empezó a alejar a su hermana hablandole con cara de adre descecpionado

eso serviría por ahora

 Alce todo a su lugar con la poca modestia que un brujo lo haría. Para cuando llegaron el escandalo estaba resuelto

- Buenas- saludó uno de los guardias, con su uniforme celeste pulcramente estilizado y holgado