8.2 Verdaderas intenciones

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— ¿¡POR QUÉ COÑO NO ESTÁN AQUÍ!? —reclama Yunho con las venas del cuello saltadas. Jimin y Solar no están en sus lugares comunes, tampoco en la capilla. En la habitación comunal de Omegas solo está Moonbyul, medio dormida por el medicamento que le dieron—. Llévala a la sala del trono. No importa que pase, cuídala.

Leedo asiente, carga a la reina y se marcha a toda prisa junto a Yoongi. Seonghwa entra por otro lugar y mira alrededor con la misma incertidumbre de su hermano ¿Por qué el par de Omegas no están? Un par de hachas se clavan en la pared, haciendo un par de cortes accidentales en Seonghwa y Yunho.

— ¿¡QUÉ MIERDA!?

— ¡Corre! ¡SOLO CORRE!

Ambos príncipes emprenden la retirada. Hongjoong toma sus hachas y se ríe en voz alta. Jongho rueda los ojos.

—Esperaba que pelearan. —admite Jongho decepcionado.

—Sí, también esperaba que lo intentaran—dice Hongjoong lanzando y atajando el hacha en el aire—, pero seguro lo harán cuando Namjoon y Hyejin lleguen. —Jongho sonríe ladino hacia su hermano.

— ¿Cuan lejos crees que lleguen?

—Esta vez no lo sé. Están más secretistas de lo habitual. Sea como sea, será divertido—afirma Hongjoong—. Venga, continuemos. Ya les dimos algo de ventaja.

. . .

—Jungkook no va a sobrevivir.

—Sí lo hará. No te rindas con él. Puedes ayudarlo manteniéndote fuerte por él. —aconseja Solar con ternura hacia el otro Omega que solloza.

Entiende perfectamente su falta de fe. Jungkook está muy mal y considerando que en la madruga incluso dejó de respirar, el doctor consideró que es muy boja la probabilidad de que sobreviva. Ella está confiada en que podrá. Jungkook es necio. Muy necio. Es el menor de los cuatro, en realidad. Un niño algo caprichoso, pero de buen corazón que se sacaría los ojos él mismo antes que ver a su Omega sufrir como lo hace.

Considerando que falta a los votos de matrimonio de hacerlo feliz. Jimin respira profundo para calmarse y se levanta del asiento. Ambos en una de las habitaciones del palacio. Jimin no quería que se lo viera llorando y tan débil. No sabiendo que debe ser fuerte por su Alpha. Lo hace sentir sucio.

—Vuelve con él. Mantente ahí... Yo debo ir con Moonbyul. No vaya a despertar antes de tiempo y se enoje conmigo. Es tan necia. —exhala Solar agotada.

—Nada peor que Alphas necios.

—Supongo que es parte de ellos.

Limpia su rostro con las manos y toma el velo atado a la tiara que usa. De color negro y que ayuda a esconder su rostro hinchado. Cae al piso del susto, la puerta abierta de par en par y dos personas entrando a la habitación. Jimin y Solar empiezan a toser con fuerza, aturdidos por semejante olor a salitre.

Namjoon sonríe torcido y Hyejin balancea el hacha pequeña en su mano. Los Omegas tristes huelen más de lo normal. No fue cuesta arriba localizarlos.

—Gracias por estar juntos, nos hicieron la vida más fácil. —comenta Hyejin avanzando.

— ¿Quiénes son ustedes? ¿Qué hacen aquí? ¡Guar...!

—So-solar vámonos—Jimin la jala del brazo, retrocediendo. El charco de sangre en el piso de la entrada crece. Dando por hecho que es de los guardias que siguieron a Solar hasta aquí. Las armas de Namjoon y Hyejin gotean sangre—. ¡Solar vámonos! —incita jalándola con más fuerza.

Consigue arrastrar a la mujer consigo, ambos saliendo por la ventana abierta. Hyejin da una risita arruga la cara. Que tierno. Namjoon deja las armas, se quita la camisa y las botas, Hyejin le tira un poncho que se pone y cambia de forma, corriendo en la misma dirección que ellos.

Ocean Skin | YuSanDonde viven las historias. Descúbrelo ahora