Citas con el jefe

capítulo 48. El final de la vida.

35 años después...

<<En esta vida he tenido muchas cosas por las cuales me siento tan agradecida, recuerdo cuando conocí a mi Ray tan elegante con su traje negro, lamento tanto que hubiesen tenido que pasar tres largos años para que nos diéramos cuenta de que éramos el uno para el otro. Lo ame, bueno aun lo amo y lo tengo presente en mis pensamientos. Él fue mi único y verdadero amor, quien me hizo feliz, quien me enseño que podía volver a amar, quien me dio una hermosa familia, él hizo que me diera cuanta de las hermosas cosas de la vida que yo no valoraba. Él ilumino mis días tristes llenándolos de sonrisas, me ha dolido tanto su partida pero sé que él se fue en paz y amándome como siempre lo hizo, se me partió el corazón cuando me dijo:

 —Ahora sí puedo decir que he tenido un final feliz como el que describiste hace años.

— ¿Aun lo recuerdas? Le pregunte.

—Recuerdo cada palabra que me has dicho. Gracias Mariela por haberme hecho un hombre enormemente feliz, un hombre mejor cada día, por haberme amado incondicionalmente, por haberme dado lo mejor de ti, por nuestros hijos. Fuiste lo mejor que pudo pasarme en la vida creo que eres más de lo que yo merecía, te amo tanto que lo único que me duele es saber que ya no volveré a ver esa hermosa sonrisa tuya que iluminaba mis días. Dijo Ray por ultimo antes de dar su último respiro de vida.

Sé que no pude tener un mejor esposo y padre para mis hijos, él era único y especial, un gran ser humano también sé que no falta mucho para que yo vaya a reunirme con él. Siento como mi vida se va apagando, no me falto nada por hacer en esta vida, ya me despedí de mis hijos Ágata y Noel Y mis nietos Joel, Daphne y Mauricio. Creo que lo único que haré por último es agradecerle a dios por todas las bendiciones que me dio>> Pensó Mariela y sus ojos se llenaron de lágrimas cuando sus hijos y nietos la abrazaron por última vez antes de morir.  

FIN.

GRACIAS A TODOS LOS QUE SE TOMARON EL TIEMPO DE LEER ESTA HISTORIA.

Es difícil terminarla, ahora es cuando siento un poco de nostalgia por que me encariñe con los personajes.

Es la primera vez que término de escribir una novela y me deja con una sensación de vacío.

Espero que citas con el jefe haya sido de su agrado, fue un trabajo de meses en el cual puse mi mente y mi corazón.

Pronto tendrán nuevas historias mías se los garantizo.

 

G. Jáuregui S.