Cap. 3: Me irritas

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Cap. 3:


- Katsamonnat...-susurre mirando la carpeta que sostenía en mis manos- no, no funcionara-deje caer la carpeta en mi escritorio y me apoye contra el respaldo de mi silla-maldición ¿Por qué es tan difícil?

Mi cabello caía sobre mi rostro mientras miraba por el ventanal de mi oficina, el sol ya había caído, la noche envolvía la ciudad y yo aun en la oficina. ¿Qué iba a hacer? Ese pomposo arrogante vendría mañana para buscar la información de su "cita" esto no estaba saliendo bien.


-tal vez...deba intentarlo con Louis–solté mientras miraba el techo de la oficina, necesitaba pintarla urgente.-si, eso hare-revolví entre las tantas carpetas que tenía en mi escritorio hasta encontrar la suya, él. Louis era una buen candidato. Soltero, 22 años y de buena familia, tenia medios y belleza suficiente, su único defecto era su infantil personalidad. Sabía que era demasiado "tierno" de alguna forma, pero su belleza y clase la completaban- él será.


Me levante del escritorio sintiéndome satisfecho. Salí de la oficina con mi bolso y abrigo encima. La ventaja de ser el jefe era poder estar el tiempo que quiera en la oficina, todos se habían ido ya y el lugar estaba en calma. Mientras bajaba en el ascensor mi teléfono sonó, lo saque y respondí al instante.

-Pol ¿Dónde estás?

-estoy en el bistró del centro, el que te hable ¿Recuerdas?


-mm si, voy a casa a darme una ducha y voy para allá- solté mientras salía del ascensor en el estacionamiento-nos vemos en un rato.

-claro Tete, apúrate, mi amigo esta aquí y quiere comer.

Corte la llamada divertido, sabía que una noche con Pol me relajaría. Me subí al auto y marche hasta la casa, no me detuve a ordenar ni asear nada, solo a mí. Busque un lindo traje rojo y una chaqueta, me puse los accesorios correspondientes y listo. Un poco de brillo labial dio el toque extra, cuando estuve listo partí para el bistró, empezaba a tener hambre.

-bienvenido al Bistró occidental ¿Tiene reservación?-pregunto una joven al otro lado del mostrador cuando cruce la entrada del bistró.

-sí, debe estar a nombre de Pol –señale-mesa para tres, él ya está aquí creo.

-oh si, lo están esperado, sígame por favor-dijo la joven amable.

Camine tras ella por el atestado bistró, se había puesto de moda la comida occidental, aunque no era mi favorita. Camine por pequeños pasillos entre las mesas hasta llegar a una en el segundo piso cerca de una gran ventanal que daba a la calle. Me acerque lentamente, podía ver a mi amigo hablando con un joven que estaba de espaldas a mí, cuando llegue la joven se marcho haciendo una reverencia y Pol me miro.

-oh al fin llegas ¡Ya me preguntaba cuanto más tardarías!-dijo divertido.


-perdona, la perfección lleva su tiempo- dije riendo, el joven que estaba con él se giro y sonrió, debo reconocerlo, es atractivo, pero no parece mi estilo- tú debes ser el amigo de Pol ¿Cierto?-dije extendiendo mi mano para saludarlo.


-hola, mi nombre es Kim, es un placer-dijo dando un suave beso a mi mano.

-oh, el placer es mío –dije algo sorprendido por su gesto.

- Kim, este es mi bello amigo del que te presumí, Pete- me acomode al lado de Pol y le di un pequeño golpe con mi hombro.


-hey... ¿Recién llego y ya andas presumiéndome? Te pasas.

-bueno, es que sos bonito amigo- Sonrió- le dije que la belleza llevaba su tiempo, por eso el retraso- soltó y comencé a reír.


-y no se equivoca, muy bello en verdad-dijo Jeff con su vista pegada a mí.

Tome la carta y comencé a ojearla, era demasiado coqueteo para una noche. Por suerte después de ordenar todo se calmó. Él parecía intentar mostrarse galante, pero realmente no podía estar menos interesado. Era atractivo, lo reconozco, pero no era mi tipo y eso era algo que podía notar.
Luego de comer me despedí de los chicos, me llamaron aguafiestas por no ir con ellos a beber, pero si quería hacer las cosas bien debía comportarme al menos una noche. Vegas vendría a mi oficina en la mañana y no pensaba dejarlo ganar, estaría listo y con arsenal preparado.


Me levante medianamente temprano y fui a la oficina sin detenerme. Muchos me miraban preocupados al verme casi amanecer, no solía llegar a la oficina antes de las nueve y eran las ocho y media. Cuando entre en la oficina seguido por Chay y una taza de café en mi mano, Big me miro curioso.

-¿Te caíste de la cama o qué?


-mira Big, no tengo una buena mañana ¿Sí? Acabemos con esto-solté mientras me dejaba caer en mi asiento.

Él vino hacia mí y me mostro la carpeta con las estadísticas de la empresa, era primordial mantener mis finanzas al máximo y eso era algo que solo mi molesto hermano podía hacer.
La mañana paso tranquilo y mi humor empezaba a mejorar, entonces mi comunicador sonó, apreté el botón para recibir la llamada de Chay y la noticia menos esperada llego.

-el señor Theerapanyakul está aquí.


-hacelo pasar-dije resignado y corté, me acomode en mi silla con las piernas cruzadas, llevaba un camisa color durazno con unos pantalones blancos, me encantaba vestir a la moda. La puerta se oyó y levante la vista- pase.


-buenos días Pete-dijo él entrando por la puerta y cerrándola después, camino hacia mí y se paro delante de mi escritorio, su mirada viajo a mi cuerpo lentamente, debía reconocer que era fastidiosa la forma de mirarme-te ves bien.
-señor Theerapanyakul, no permito que me tutee ¿De acuerdo? Tome asiento por favor-dije enderezándome y mirándolo molesto.


-por favor Pete- soltó con una sonrisa mientras se sentaba- sabes que quiero que me digas Vegas- era obvio que no pensaba hacer caso a mi pedido, así que decidí ignorarlo. Tome las carpetas que había seleccionado y las arroje delante de él.

-ahí tienes, la primera carpeta es un hermoso chico de buena familia, Louis es su nombre, él pertenece a una de las más altas clases –dije orgulloso por mi elección, pero él me interrumpió.

-no me gusta-tiró la carpeta a un lado después de solo ver su foto un momento, lo mire confuso pestañeando .

-¿Qué? ¿Por qué?


-es algo infantil, no quiero estar cuidando de él-dijo sin prestar mucha atención tomando la segunda carpeta.

-bueno, ese es First, es actor y modelo, ha logrado un papel en... –comencé a describirlo, pero nuevamente me interrumpió.

-paso-arrojo la carpeta junto con la anterior.

-¿Ahora qué?-dije incrédulo.


-es muy arrogante, presumido, lo veo solo en su foto y descripción de chico ideal "que le gusten los animales" paso...-tomo otra carpeta y luego de un momento me enseño la foto-¿En serio? Es horrible-dijo no una sonrisa maliciosa-paso, paso-dijo con la cuarta carpeta casi sin verla.

-pero...ni lo viste ¿Cómo sabes...?-solté sin poder creer lo que pasaba.

-¿Es necesario? Es extranjero, no me atrae, quiero un chico oriental, simple- tiró la quinta y última carpeta- ¿Jardinero? ¿En serio? Ridículo-miro las carpetas que había dejado a un lado y luego a mi- la verdad... esperaba algo mejor, veo que aun no sabes lo que busco.

-entonces-me puse de pie de golpe y coloque ambas manos en el escritorio-¿Qué es lo que buscas?-dije con los dientes apretados.

-Mmmm-me miraba como mi estuviera analizándome, se puso de pie y se acerco a mi sobre el escritorio, su mano toco mi cabello - alguien como vos estaría bien, sexy, atractivo, con actitud, aunque... no tan gruñón-sonrió y sentí que lo golpearía, no podría controlarme más-¿Sabes? Deberías apurarte, este fin de semana tengo una cena importante y tengo que llevar acompañante ¿Necesito hacer otra llamada?


Lo mire sin poder creerlo ¿Cómo podía ser tan ególatra? ¿Presuntuoso? ¿Desgraciado? Esto iba a ser más difícil de lo que imagine, si no lo consigo... todo podría acabar.

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