3. Una niña en la cuidad

Capítulo 17

Narrador omnisciente.

Decir que todo se había descontrolado, se quedaba corto. Bastante corto.

—¡Eso es! —la voz de Minho resonó por el lugar, animando a Newt a que se tomara su cuarto vaso.

Todo el mundo empezó a gritar, animando al chico. Marcus tocó su hombro, mientras los demás se mantenían a su alrededor. Newt simplemente rió ante los gritos de todos sus amigos.

Sonya le sirvió otro vaso a ______, mientras esta hablaba con Harriet, Brenda y otra chica de ahí. No sabía cuantos llevaba ya, pero en ese momento no le importó en absoluto.

—¡Hasta el fondo! —Steven gritó de repente, y todos se giraron a ver lo que pasaba.

—¡Vamos! ¡Eso es! —siguió Hardin, mientras Marcus y Newt hacían una especie de juego.

—Agh, ha ganado —Sonya hizo una mueca, mirando como su hermano se había terminado el vaso entero antes que el castaño.

Las demás miraron a Newt, quien ahora reía al haberle ganado a Marcus. Sonya rodó los ojos con diversión, viendo como su hermano se lo estaba pasando bien.

—¡Hola! —una chica se acercó a ellas, junto a un grupo detrás—. Vamos a hacer unos juegos, ¿venís? —les preguntó, mientras sonreía de boca abierta.

Ellas se miraron, pero Brenda asintió de inmediato, ignorando el rotundo "no" de Harriet.

—¿Qué tipo de juegos? —preguntó ______, observando a la chica pelirroja.

—Oh, son muy infantiles, pero es para que nos conozcamos más y nos hagamos más cercanos —contestó, sin quitar la sonrisa de los labios—. Por supuesto puedes decir que no quieres jugar y ya. No es obligatorio.

—Nos apuntamos, claro —sonrió Brenda, agarrando el brazo de ______, mientras Sonya agarraba el de Harriet.

—¡Eh, chicos! —un chico del grupo que estaba detrás de la pelirroja gritó hacia el grupo de Newt y de los demás, llamando la atención de todos ellos—. ¡Acercaros! ¡Vamos a jugar!

Muchos se miraron confundidos, pero se acercaron igualmente. Un chico ordenó que todos se sentaran en círculo, y así lo hicieron. _______ se sentó al lado de Minho y Brenda, mientras que Newt estaba con Dylan y Marcus.

—Bien, ¿todos sabéis lo que es el juego de la botella? —muchos asintieron, y otros hicieron una mueca—. No os preocupéis, no haremos lo mismo, esta vez no será sólo besar, atrevimiento o verdad. Tendremos que contar algo de nuestra vida, podemos elegir lo que queramos —terminó de explicar la chica, y se acercó al medio para poner una botella. No era un círculo muy grande, muchos habían pasado de aquel juego.

—Venga, ¿quién se anima? —preguntó un chico, mirando a todos sonriente.

—Yo —sonrió Marcus, agarrando la botella.

La giró con fuerza, mientras sonreía perverso, mirando a todos sus amigos con una expresión que les causó escalofríos. La botella cayó en Minho, quien la miró con fastidio.

—Minho —Marcus frotó sus manos, pensando en algo—. ¿Verdad, atrevimiento, beso conmigo o algo sobre tu vida? —todos se quedaron desconcertados ante su penúltima pregunta, pero era Marcus, él no tenía mucha explicación.

—Verdad —sonrió, apoyando sus antebrazos en el suelo para apoyarse.

—¿Es verdad que besaste a _______ para reforzar la amistad? —preguntó con una sonrisa burlesca, haciendo que el asiático mirase a este con otra sonrisa.