A la mañana siguiente Hiro no podía creer lo que estaba viendo ¡Miguel si había mejorado! ya no tenía fiebre y por ende sus demás síntomas eran fáciles de tratar así que ya podía salir de la cama.
- ¿What the fuck?. . .seguramente solo fue una coincidencia y las medicinas apenas hicieron efecto - decía analizando a Miguel detenidamente.
- Si, si, avísame cuando tu mismo te la creas - dijo Marco victorioso a su lado.
- Jajaja adivino ¿Remedios de abuelita Elena? - decía Miguel viéndolos discutir, le parecía un poco divertido su debate.
- Ya tu sabes Migue, nunca fallan jajaja gané la apuesta.
- ¿en serio quieres que crea que un ajo y clara de huevo en serio ayudaron?
Los dos latinos empezaron a reír entre ellos, sabían que el nipón jamás aceptaría que tales remedios caseros funcionaban mejor que las medicinas a su parecer pero bueno, Marco solo estaba feliz de haberle ganado y claro que con más razón iba a presumir su tan curioso talento ante el.
Todavía esperaron un poco para asegurarse de que realmente haya bajado la fiebre, por suerte ahora era de 37° nuevamente, igual era viernes así que tendría el fin de semana para curarse por completo. En lo que Miguel y Hiro platicaban (este no le dijo a Miguel lo que le dijo y tampoco el parecía recordar lo que pasó) Llegó Marco con todo un cargamento en su mochila, estaba dispuesto a seguir contradiciendo al peli negro ¿Y que mejor que enseñándole todo lo que puede hacer? o al menos una pequeña parte de lo que puede hacer.
- Bien, ahora cumple tu parte ¿Con que quieres empezar? - dijo sentándose en el suelo e indicando que el hiciera lo mismo.
- Ni creas que realmente me dejaré manipular por tus cosas de brujos falsas
- No son falsos - le regaño Miguel - Realmente si le sabe a eso, dale la oportunidad.
Realmente no le impresionó que el moreno realmente creyera en esas cosas tomando en cuenta que probablemente paso mucho tiempo con el. Tuvo que aceptar a regañadientes porque ya Marco estaba acomodando todo bien dispuesto, lo primero que decidió mostrarle fueron sus cartas de tarot.
- ¿y esas cartas? - preguntó Hiro curioso, en su vida las había visto.
- Son cartas de Tarot ¿y dices ser muy listo? - nuevamente aprovechando para molestarlo - Las uso como medio de consulta e interpretación de hechos, sueños, percepciones o estados emocionales aunque también es un buen medio para comunicarse con espíritus.
Una vez más Hiro estaba viéndolo como si tuviera problemas mentales o algo así, no iba a creerle que una baraja de "simples cartas" en serio lanzaran respuestas concretas seguramente solo Marco iba a hacerle una broma o diría cosas super obvias que el podría desmentir como que fácilmente una búsqueda en internet y ya saldrían noticias del genio y sus increíbles inventos o en sus redes sociales o que interrogara a Kyle, algo así más o menos podría pasar.
- Okay, primero elige 3 cartas al azar - le ponía la fila de cartas frente a el - sin voltearlas.
- ¿para que solo 3?
- Ya Hiro, dale una oportunidad - decía Miguel claramente molesto por su incredulidad hacía el tema, como alguien que vio todo eso en persona y podía dar veracidad de aquello le ofendía un poco que Hiro no estuviera creyendo nada.
- Si, a demás es para tu pasado, presente y futuro ¿ahora puedes solo callarte y tomar 3 cartas antes de que quiera darte un botazo por imbécil? - al parecer Miguel no era el único que se estaba desesperando.
- Como sea - dijo tomando 3 cartas completamente al azar y sin verlas.
Marco las tomó en el orden que este las había tomado y las acomodó en el suelo dispuesto a empezar su lectura. Volteó la primera carta y la analizó detenidamente empezando a poner un rostro serio casi como si estuviera sintiendo lo que pasó en ese momento.
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Lindo...¿perrito?
RandomHiro a los 10 años adoptaría a un perrito que encontró en un viaje a México que hicieron con su hermano y tía. Después de que su hermano fallece cuando el tenía 15 años estaba tan dolido que su tía optó por regalar a Miguel con otra familia ya que H...