Capítulo 7

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Capítulo 7

Cuando finalmente estamos en la mansión King. Yo ya me he medio calmado. En el momento en que la sirvienta abre la puerta, me siento en un Palacio. Él piso es de mármol blanco y las paredes eran de un color crema, con detalles en marrón y dorado. Los candelabros dorados, tienen cuentas de cristales que caen en cascada. Es La primera vez que venía desde la remodelación, que había sido hace ya seis meses. No solíamos frecuentar la residencia King, ya que sólo vamos para resolver asuntos, no a tomar el té con galletas.

-Odesa, por favor ve a buscar a mi padre. Dile que los Prior están aquí y que es una emergencia.
-Sí, señorita Iris - dice, para irse a toda velocidad.
Antes de que lleguen los señores de la casa. Cameron y Wesley, ya están bajando las escaleras, para llegar a nosotros.
-No sé que podrán ser esas criaturas, pero deben haberte impactado mucho Rhy - dice Cameron -Tus pensamientos me llegaron desde que saliste de casa.
-Sí... Es que me puso algo intranquila.
-¿De qué me he perdido?
-Bueno Wesley, la cosa es que alguien irrumpió en nuestra casa - le dice Byron.
-¿Quién si se puede saber? - pregunta con su voz fuerte y gruesa.
<<Vincent>>
Su cabello era rubio (casi blanco) le llega hasta la parte media de la espalda, viste una camisa negra a botones y unos pantalones grises, sus ojos son de dos colores, uno castaño y el otro negro. Su altura, lo hace lucir más imponente de lo que ya es. Cada vez que lo veo, me hace estremecer.
- Vincent, es un gusto verte - le dice mi madre.
-Lo mismo digo - sonríe.
-Buenas noches queridos amigos - dice Persia.
Persia es una mujer muy bella. Sus ojos son tan azules como el mar, su cabello negro como la noche es tan largo como el mío, es liso (tal vez demasiado) al verla te quedas en un estado de trance. Su belleza era tal, hasta el punto en que te olvidabas de todo. Ella es considerada, como la vampiresa más bella.
-Buenas noches Persia - la saluda mi padre -Lamentamos molestarlos, pero uno seres de origen desconocido, han entrado en los límites de nuestra propiedad.
Tanto Vincent, como Persia. Se dedican una mirada de preocupación. Ellos están hablando en sus mentes.
-Bien - dice Vincent - , será mejor que hablemos en mi despacho.
-De acuerdo - dice mi madre -, pero creo que Rymond debe venir con nosotros, ya que ella estuvo con ellos cara a cara.
Nuevamente compartieron miradas entre ellos.
-Muy bien -dice Persia -, si fueran tan gentiles de seguirnos.
Mientras subo las escaleras, me siento más nerviosa de lo que estoy. Al caminar por el pasillo, puedo ver el legado de los King. Está desde el primero hasta el último que ha nacido. Que es mi mejor amiga.
-Algún día tú y tus hijos con Wesley estarán en estos muros -dice Persia, con una afable sonrisa.
-Querida. No la asustes, es muy pronto -dice Vincent, lo cual agradezco.
Seguimos nuestro camino, que nos lleva a un lugar que desconozco por completo. Son unas escaleras en forma de Caracol, que conducen a un extenso pasillo. En este hay varias puertas. Yo intento adivinar que es lo que hay dentro de ellas. Finalmente abrimos la puerta al final del pasillo y puedo contemplar la oficina de Vincent.
Tiene un diseño moderno. Todo es de color negro y blanco. Hay un cuadro de Vincent en la pared detrás del escritorio. En toda la habitación hay cosas como, pequeñas esculturas, frases en Eslovaco, muchos libros. Me quedo observando y puedo ver un mapamundi, este está marcado en diferentes partes y tiene tres colores.
-¿Es toda la población de vampiros que hay?
-Así es Rhymond - me sonríe Vincent - Tu hija es muy perspicaz Tristan.
-Sí, es algo que ha desarrollado más con el paso de los años.
-Supongo que los colores significan algo - interrumpo - Supongo que la mayor cantidad son los vampiros que viven en clanes, la segunda los vampiros salvajes y la más pequeña deben ser las manadas de lobos.
-En verdad que es una niña brillante - dice Persia con entusiasmo - Por eso es perfecta para nuestro querido hijo.
<<De nuevo lo mismo>>
-En fin tomen asiento por favor -dice Vincent señalando las sillas frente al escritorio. Mi madre y yo tomamos asiento, mientras que mi padre permanece de pie, justo a nuestro lado.
-Bien -habla Vincent, ya sentado en su silla - Cuéntanos todo con lujo de detalle.
Les platico sobre como sentí la presencia de los seres y de que mientras me disponía a enfrentarlos, vi visto una luz blanca, como la de un flash de una cámara.
-Después de que vi la luz, ellos ya se había ido.
-¿No lograste ver nada ? - me pregunta Persia.
-No -digo-, sólo vi sudaderas negras con capucha.
-Supongo que no nos ayuda mucho -suspira el señor King, claramente frustrado -Nos encargaremos de investigar todo a fondo.
-Sí hay algo que podamos hacer dígannos lo.
-Gracias Tristán -dice el señor King -Trataremos de solucionar este problema y pondremos vigías en el perímetro, de ser necesario.
-Yo también quiero ayudar -digo -Quiero saber que son esas personas.
-Gracias querida -dice Persia -, pero esto es algo que los vampiros experimentados deben resolver.
Yo asiento y me dicen que es momento de que me valla. Ellos apenas salgo de la sala, siento que se relajan, como si no quisieran que metiera mis narices en el asunto. Yo sé perfectamente que los King ocultan algo y quiero saber que es. Todo en ellos es puro misterio. Son la familia perfecta y todo el mundo sabe que nadie puede ser perfecto, inclusive los vampiros. Nadie es perfecto, pero hay gente que aparenta serlo.

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