¡Seré un villano! -Xicheng-

Adaptarse y sobrevivir

Había pasado un mes desde que regresó ¿o reencarnó? ¡Bah! Cómo sea, ¡Llevaba un mes en su mundo no podía estar más aburrido!

Había olvidado que en su primera vida los sirvientes tenían muy bien trazada la línea amo/sirvientes por lo que nunca fue cercano a ninguno, salvo su nana.

Bueno, viéndolo bien, tampoco es que haya sido muy amigable.

Actualmente tenía —mejor dicho aparentaba— cinco años, por lo que era normal que no pudiera hacer muchas cosas debido a "su edad".

No podía caminar solo sin alguien detrás porque “Puede perderse joven amo”.

No podía comer demasiados dulces porque “No es sano para un niño en crecimiento”.

No podía sumirse en sus pensamientos porque “No es bueno que se quede viendo a la nada”.

¡Ah, que estrés!

¡¿Por qué no entendían que necesitaba pasar tiempo solo consigo mismo para planear como ser un buen villano?!

Lo positivo era que ahora podía moverse libremente sin necesidad de tener conectadas agujas y sin inyecciones como en su tercera vida, que ha de decir; no era tan diferente a lo que estaba acostumbrado ya que también era rico.

Enfermo pero con dinero.

El dueño original había padecido una enfermedad la cuál no le permitía moverse de un lado a otro y esa fue la razón por la que se la vivió entre libros.

Lo único bueno —a parte de enterarse de que toda su maldita existencia era parte de un (muy mal) libro— fue que pudo conocer el calor de una madre.

'Él' era la copia en masculino de su madre, no solo en apariencia sino en carácter; y eso conllevó a qué fingiendo y fingiendo, su carácter y personalidad también cambiara a una más fuerte.

Recuerda que las pocas veces que habló con otras personas de ahí, recalcaban ello.

En esos momentos sí se sentía mal de estar usurpando el lugar del otro, aún así, no era como si hubiera sido su desición.

Sin embargo... A veces, inconscientemente veía hacía el pasado y no podía evitar preguntarse ¿Cómo era mamá?

¿Qué hubiera pasado si no hubiera muerto?

¿Hubiera tenido una familia?

¿Su padre y sus hermanos lo habrían querido?

Muchas preguntas y ninguna respuesta...

—¡Joven Jiang! ¡Ya le he dicho que no se distraiga en las clases!

—Lo siento.

—Solo preste atención.

—De acuerdo.

El maestro volvió a leer los pergaminos y él siguió escribiendo intentando volver a prestar atención.

En ese momento se encontraba recibiendo tutoría.

Como el único hijo varón de Jiang FengMian él heredaría la secta por lo que desde pequeño tenía que recibir la mejor educación para estar a la altura del puesto.

Aunque claro, una vez que Wei WuXian entrara a la secta, su educación ya no sería tan exigente, es más, en un punto ni siquiera tendría maestros.

Una de sus tantas frustraciones, después de todo, todos esos años de dedicación y esfuerzos se vieron desperdiciados cuando lo casaron ya que en el clan Nie no tuvo poder por lo que jamás pudo hacer uso de ello.