Lan Wangji, gatarompehogares.

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—Mhmh... Ugh...

Adormilado, cuando el sueño iba abandonando su cuerpo exhaló varios quejidos al sentir el aire fresco chocar contra su piel. Al parecer el día había amanecido más frío de lo normal.

Mm... también estaba... ¿Abrazando algo? ¿Una almohada?.... No... Estaba demasiado dura para ser una...

—Uhm... —aún con los ojos cerrados, hizo el gran esfuerzo de estirar su brazo para saber qué era. Coló su mano a tientas bajo las sábanas, —o lo que creía eran las sábanas—, y arrastró su mano perezosamente sobre lo que descubrió, eran abdominales.

«¿Wei Ying?»

Instintivamente su cerebro intuyó que se trataba de su hermano, pero de alguna manera... ¿Se sentía diferente?

Cómo aún no estaba listo para lidiar con la vista borrosa luego de un buen sueño no abrió los ojos, se le hizo más fácil meter su mano entre las túnicas y apretar descaradamente los pectorales y abdominales del contrario para ver si no había sentido mal.

Y vaya que no lo había hecho.

¡Ja! ¿Quién lo diría? El cuerpo escuálido de su hermano había ganado bastantes músculos en menos de un año.

«Nada mal, nada mal».

¿Qué como conocía la fisionomía de la molestia a su lado? Bueno, Wei WuXian había desarrollado cierto pánico al clima tormentoso, —resultado de su vida en las calles—; así que de vez en cuando luego de afianzar lazos, cuando los terrores nocturnos eran demasiados, ese desvergonzado se ‘colaba’ a su muelle y lo obligaba a dormir con él.

Solo que con el paso del tiempo esas visitas fueron mermando y después de la muerte de sus padre Wei WuXian no había vuelto a visitarlo por las noches.

Quería agradecer (culpar) a la sucesión por ello pero también intuyó que cierta cosa celosa de apellido Lan tenía algo que ver con el distanciamiento de su hermano.

¡La audaciaEjem! Quería decir; menos mal que se le había quitado esa fea maña...

Bueno, no del todo si lo podía sentir a su lado en ese momento.

Inhaló, exhaló y se preparó para patearlo fuera de su cama, después de todo ¿Qué mejor manera de iniciar el día que esa?

Lastimosamente su cuerpo no pensaba igual y cuando quiso poner en marcha su plan solo consiguió moverse un par de centímetros antes de que rechazara las órdenes de su cerebro.

¡Aya! Tan molesto.

«Bueno, supongo que solo por esta vez lo dejaré pasar» pensó mientras dejaba que su cuerpo volviera a relajarse al mismo tiempo en el que se acurrucaba más hacia el contrario. Cómo su hermano dormía hasta tarde no vió problema alguno.

Igual, siendo realista esa podría ser la última vez que estarían así de cerca. Con el tiempo avanzando y la trama a punto de iniciar sus distanciamiento sería inevitable.

Su hermano brillaría y él...

Él...

Bueno, solo dirá que con la nueva etapa en la vida de su- de Wei WuXian; Lan WangJi sería pieza clave para dar paso a los hilos que lo atarían a la muerte.

«Y tan santo que se veía jaja» se burló sin diversión.

¿¡Por qué mierda los Lan eran TAN molestos!?

Su estómago se retorcía de solo pensar en esos malditos idiotas que se autoproclamaban la justicia misma.

¡Ja!

¡Seré un villano! -Xicheng-Donde viven las historias. Descúbrelo ahora