¡Tu padre murió, casémonos! ♡

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—¿A-Cheng? —llamó el nombre de su hermano frente a la oficina de su padre.

—Estoy aquí, Jie —respondió abriendo la puerta.

—Oh, A-Cheng, te estaba buscando. ¿Puedo pasar?

—Adelante —Dejó abierta la puerta y se adentró en la habitación seguido de su hermana—, ¿Pasó algo?

—No. Venía a preguntarte si querías comer.

—Ah, no tengo hambre.

—¿Otra vez? A-Cheng...Yo... Sé qué es difícil, y qué hoy se cumple un mes desde el incidente, pero... tienes que comer.

—Lo sé, pero de verdad no tengo hambre.

—¿Aunque sea una sopa?

¿No conocía el significado de no?

—Si insistes.

—Bien —asintió satisfecha— iré a hacerla y te la traeré.

—De acuerdo —forzó una sonrisa. Luego, viendo cómo su hermana salía de la oficina soltó un suspiro hastiado.

No lo malinterpreten, apreciaba su intención pero... A veces se le hacía algo pesada.

Aunque tenía razón en eso de que debería mejorar su alimentación. Pero tal como había dicho, había pasado un mes desde que regresó al clan Jiang y su itinerario estaba a reventar.

Ya saben, al principio, fue difícil.

Arreglos, cartas, flores, ofrendas, sirvientes, etc, etc. ¡Un sinfín de cosas que arreglar!

Después, con las interacciones sociales... ¡Fue peor!

El afrontar todo ello sólo...
¡Fue estresante!

Anunciar la muerte de su padre a todos.

Tener que soportar el llanto de la secta entera.

Supervisar la colocación del luto en todos lados.

Escribir más de diez veces la misma carta a diferentes destinos porque no existía el papel calco.

¿¡Por qué no existía?!

Y la parte más fastidiosa de todo; hacer los ritos correspondientes del primer mes y convivir con otras personas. ¡Todo tipo de personas!

Algo nada agradable para un estreñido social cómo él.

Granjeros, pescadores, pueblerinos, comerciante, ricos y nobles; así como también varios representantes de las distintas sectas aledañas a Yunmeng Jiang. Todos llegaron a ofrecer el pésame cuando se enteraron de la noticia en señal de "buena voluntad".

Incluso las grandes sectas.

Del clan Jin llegaron su hermana y el esposo de esta, también madam Jin, pero ella se retiró luego de una semana.

(De Jin GuangShan no se vió ni su sombra y nada lo hizo más feliz que no ver al viejo tanga suelta rondando por su clan).

Del clan Wen, por increíble que pareciera, también hubieron representantes; Wen Ning y Wen Qing. Los sobrinos del cultivador líder.

Y faltaban los clanes Nie y Lan.

Sentía un poco de curiosidad por quienes mandaría el clan Lan.

En fin. ¿Ven a lo que se refiere? Estuvo muy ocupado.

Al menos pudo estrenar varias de las túnicas que mandó a hacer. Aunque bueno, realmente todos cambiaron sus túnicas moradas a blancas en señal de duelo.

¡Seré un villano! -Xicheng-Donde viven las historias. Descúbrelo ahora