Capítulo 28

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-¿Shion Madarame?

-Por un lado, sería algo bueno, porque es el más débil de los tres.

-¿Y por el otro?

-Que está como una puta cabra, es un delincuente cruel, y que seguramente, sea él. Y en ese caso, es el más peligroso, porque le da igual hacer algo en público y esas cosas.

-¿Y cuándo saldremos de dudas?

-Cuando vuelva a hacer algo, si es Shion, no tardará, y yo te recomiendo que no dejes a tu hermana sola.

-Ahora está sola- se hizo el silencio.

-Tiene a Kazutora arriba- dijo Chifuyu.

Los fundadores se miraron entre ellos. Y Draken salió corriendo.

-Chifuyu.

-¿Sí?

-Corre.

Baji le agarró de la muñeca y se lo llevó arrastras hasta el aparcamiento, sentándole en su propia moto y poniéndole el casco.

-¿Qué pasa? ¿Baji?

-Llega lo más rápido que puedas.

NARRA DRAKEN

Por si acaso, pero espero que no.

Dejé la moto frente al edificio, no iba a pararme a quitar las llaves. Cuando iba a entrar por la puerta escuché un grito, ¿venía de la calle?

Intenté buscar a alguien, no veía nada y pisé unos cristales, lo que me hizo mirar arriba porque no había nada cerca.

-¡¿UMIKO?!

-¡SOCORRO!

-¡SUÉLTATE, YO TE COJO!

-¡¿ESTÁS LOCO?!

-¡ESTOY DEBAJO!

-¡NO!

-¡NO PUEDO IR A BUSCARTE, PODRÍAS CAERTE!

Escuché más ruidos saliendo de esa ventana, y a Peke J saltando al árbol y venir hasta mí, arañándome la pierna y maullándome.

-¡DRAKEN!- venía Baji acompañado de Chifuyu.

-SUBID ARRIBA Y QUE UNO INTENTE COGERLA, CREO QUE KAZUTORA ESTÁ DENTRO CON ÉL.

-¿SHION?

-¡Y YO QUÉ SÉ!

NARRACIÓN NORMAL

Entraron al edificio con Peke J uniéndose a la batalla, corriendo con ellos. Pasaron la entrada de la casa y escucharon algo caer. Kazutora se encontraba en el suelo del cuarto, muy golpeado y sonriendo.

-Mi padre pega más fuerte- alegó escupiendo sangre. Peke J atacó a la cara del rey celestial de Tenjiku, haciendo que Shion lo lanzara por ahí, provocándole una nueva herida, comenzando una nueva colección de arañazos y moretones.

Sin darse cuenta de las otras presencias, se agachó para coger a Kazutora y Baji le dio una patada.

-¡CÓGELA!- gritó Keisuke.

Chifuyu fue hasta el balcón y agarró a su hermana. Estaba muy asustado, empezando a tener un ataque de pánico, dificultando su respiración y oprimiendo su pecho, impidiendo hacer fuerza para cogerla. La situación lo estaba abrumando. Llorando mientras se negaba a soltarla, pero sin poder subirla.

AROMA DE COLOR CIAN - DRAKENDonde viven las historias. Descúbrelo ahora