Sweet Obssesion |Nueva Especie|

Capitulo 21

Perspectiva de Jessica (POV):

Cada día, la esperanza de reunirme con mi familia, amigos y Justice se desvanecía. La ausencia de Justice se sentía como un agujero en mi pecho, dejándome vacía y sin ganas de seguir adelante. Es difícil describir la sensación de no tenerlo a mi lado, pero tengo que ser fuerte. Sé que puedo hacerlo.

Por otro lado, las cosas con Theodore eran extrañas. Sorprendentemente, cumplió su palabra y me trató de una manera que nunca había hecho antes. Se sentía como si el antiguo Theo hubiera desaparecido por completo, siendo reemplazado por alguien bueno, atento y amable. Sin embargo, eso no cambiaba el odio y desprecio que sentía al verlo, al despertar y encontrarlo tan sereno y tranquilo, como si fuéramos una pareja normal, como si nos amáramos.

¡NO! ¡Claro que NO olvido todos sus abusos y maltratos! Pero, por ahora, era mejor mantener la calma. El tiempo era mi único aliado, y por ahora, mis dotes de actuación estaban funcionando. No bajaría la guardia ni permitiría que se saliera con la suya. Ahora, más que nunca, lucharía por mi libertad y, sobre todo, por mantener a este maldito lejos de mí. Solo debía ser obediente para ganarme su confianza y seguir adelante con mi plan.

El lado negativo de todo esto:

1. Estaba atrapada en ese maldito apartamento, ya que todavía el imbécil no confiaba en mí lo suficiente como para sacarme al exterior.

2. Estábamos en el Reino Unido, ¡SÍ! Estábamos en Europa, al otro lado del maldito continente americano. Y no me pregunten cómo llegué aquí ni me di cuenta de que estaba en un avión, porque ni yo tengo la respuesta.

3. No tenía acceso a ningún teléfono ni computadora. Hace unos días, apenas me permitió ver la televisión. Pero lo que más me llamó la atención es que nadie hablaba de él. Nadie lo denunció por mi secuestro, de hecho, nadie me estaba buscando. Eso fue lo que más me perturbó. ¿Acaso mi familia y amigos ya no les importaba? ¿Se habían olvidado de mí tan rápido? Me destrozó, me puso muy triste, no lo voy a negar. Pero dicen que lo que no te mata te hace más fuerte. Así que haré todo lo posible para recuperar mi libertad.

A pesar de los obstáculos que Theo me ponía todos los días, como el avanzado sistema de seguridad que activaba cuando estaba en casa, era casi impenetrable. Intenté de todo, incluso con bombas, pero ni por asomo podía desactivarlo. Y solo tenía tres intentos; después del tercero, Theo recibía una notificación. ¡Genial! Maldita tecnología que no estaba a mi favor. Pero el lado bueno era que había conseguido un trabajo, por lo que no tenía que soportarlo la mayor parte del día.

Hace unos días se me ocurrió una de las ideas más brillantes que rondaron por mi cabeza en siglos: un plan para salir de aquí más rápido. Incluso hoy pasé el día revolviendo el departamento apenas Theo se marchó en busca de la documentación que él tenía en su poder.

Pasé por varios ciclos emocionales, desde la motivación hasta la desesperación por encontrar esos malditos papeles. Sin embargo, llegué a la conclusión de que él los llevaba en su maletín de trabajo, el cual no dejaba ni para ir al baño. A pesar de ello, mi plan seguía en pie. Haría lo necesario para salir de aquí.

"Buenos días, señorita", dijo María, entrando con unas compras del supermercado. ¿Les conté que tenemos una ama de llaves? Bueno, sí, Theo no confía en mí para nada, así que contrató a María, supuestamente "para que no me sintiera sola y tuviera con quién hablar". Claro, con sus típicas advertencias. Pero yo creo que lo hizo para que me sintiera más atrapada y controlada.

Ana María, de 41 años, había trabajado desde muy joven para los James, por lo que era su empleada de confianza. Durante años trabajando para ellos, se hizo muy amiga de la madre de Theo, quien está muy insistente en querer conocerme según su hijo. Pero lo último que quiero en mi vida es generar vínculos con lo relacionado a Theo, así que siempre que me dice que su madre quiere conocerme y tira alguna indirecta al respecto, cambio de tema o evito la conversación.