Vigésimo primero.

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***
Al día siguiente de la fiesta que le habían hecho a Katsuki, Eijirou e Izuku; después de haber desayunado, prepararon el desayuno sorpresa para el licántropo para cuando éste  despertase.

—Espero que le guste lo que le hemos preparado.—Dijo Kirishima.

—Seguro que sí. Además, seguro que Kacchan apreciará este gesto.

El desayuno que acababan de hacer consistía en huevos revueltos con pan, beicon, un cuento de arroz y zumo de naranja.

Entonces, pusieron todo en una bandeja y lo llevaron al dormitorio del dragón. Primero llamaron a la puerta y el susodicho respondió:

>Pasad.

Cuando llegaron, Bakugou ya estaba despierto.

—¡Buenos días, Katsuki!

—¡Buenos días, Kacchan!

El licántropo los miró confundido por unos instantes y, cuando vio la bandeja que traían; imaginó que aquel iba a ser su desayuno.

—Buenos días. Ese es mi desayuno, ¿cierto?

—¡Sí!—Lo hemos hecho entre Eijirou y yo.

—Tráelo, quiero comprobar que sea comestible.

—No seas así, katsuki. Claro que es comestible, pruébalo.

Le acercaron la bandeja, la cual poseía unas cortas patas de apoyo para poder ser depositada sobre la cama; y el rubio cenizo comenzó a comer.

—¿Te gusta?—Le preguntó Midoriya.

—Sí, me está gustado lo que he probado por el momento.

Sus novios sonrieron, ya que se alegraban de que los primeros bocados fueran aprobados por el exigente paladar de Bakugou.

"Saben cocinar. Al menos sé que no seré el único que haga la comida cuando vivamos juntos."—Pensó feliz degustando lo que le quedaba de desayuno.

***

Cuando por fin acabó, les dio una opinión final a los chicos:

—Ha estado todo muy bueno, me sorprende.—Creía que no sabríais hacer una comida decente. Os felicito.

Ellos se alegraron mucho y después hablaron con Bakugou sobre qué harían aquel día.

—No quiero hacer el amor, necesito tiempo para acostumbrarme a tener a dos "perros en celo" follándome.

—O-oye, no íbamos a decir nada de eso, Katsuki. Nosotros comprendemos que estés dolorido, no pasa nada.—Además, yo por lo menos; tenía pensado ir al bosque de las mariposas. Podría llevaros volando hasta allí y pasear por el lugar, ¿qué te parece?

—Me parece bien, ¿tú qué opinas, Izuku?

—Estoy de acuerdo con la idea pero antes tengo que volver al castillo para obtener más de mi poción, siento que sus efectos se están desvaneciendo.

No perdieron más tiempo y el dragón voló hasta el castillo del fantasma para que pudiera obtener más de su poción.

—¡Hola, Toshinori-san!—Saludó alegremente al rubio.

—Hola, joven Midoriya.—¿Dónde habías estado? He estado preocupado.

—Pu-pues estuve en una fiesta con Kacchan y los demás.—Pero he vuelto para más poción, sus efectos se están yendo.

—Entendido, aunque debo advertirte de que cada vez me está resultando más complicado darte la poción.

—¿Eso significa que debo viajar a la Tierra de los Buntuvu?

—Me temo que sí, y cuanto antes.—Dijo para tomar un pequeño bote de poción y dárselo al de cabellos verdes.

—Lo entiendo, creo que iré muy pronto. Cada vez hace más frío, seguramente esté muy cerca la noche más fría del año.

—Estás en lo correcto y por eso te lo digo.—Debes apresurarte.

—De acuerdo... ¡Hasta luego!

—Hasta luego, Joven Midoriya.

El fantasma se marchó rápidamente y Yagi permaneció quieto mirando en la dirección por la que Izuku se había ido.

—Debes hacerlo antes de que sea demasiado tarde, no debes atrasarlo más, Joven Midoriya.—Dijo preocupado por el futuro del pecoso.

***

Notas finales: ¡Hasta aquí por hoy!

¡Espero que os haya gustado!


Un fantasma vs Un dragón.[Dekukatsu/Kiribaku]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora