Un fantasma vs Un dragón.[Dekukatsu/Kiribaku]

Trigésimo sexto.(corregido)

***
Los días pasaron, todo iba de maravilla. Eijirou, Katsuki e Izuku pasaban tanto tiempo como podían mas últimamente habían estado ocupados.

El dragón y el licántropo con sus respectivos entrenamientos. Midoriya con una farmacia que había inaugurado, ya que no podía estar sin hacer nada y simplemente esperar que sus novios lo mantuvieran.

Eso sí, él les contó sobre aquel plan.

—Sólo quería decirlo por si os parecía mal.—Dijo día que estaban comiendo juntos.

—¿Y por qué mierda nos iba a parecer mal?—Es bueno que quieras ser útil y productivo.

—Tiene razón, es positivo que hayas encontrado un oficio que te guste.—Aunque no comprendo por qué pensaste que nos parecería mal, nosotros nunca te hemos prohibido nada.

—¡Lo sé! No era eso lo que quería decir, es sólo que quería compartir mi idea porque me pareció descabellada en un principio.

—Pues no lo es, tonto.—Dijo Bakugou.—¿Cuándo la vas a inaugurar?

—En cuatro días y estará al lado de la tienda de costura de Best Jeanist.

—Bien. Iremos a comprarte algo de vez en cuando.—Dijo el rubio cenizo.

—¡Gracias, Kacchan!

Después de aquella conversación habían pasado nueve días y el negocio del pecoso obtenía clientes poco a poco, esto fue celebrado por sus seres queridos, que se sentían muy felices por él.

***
Y mientras el pecoso se encontraba en la farmacia, Eijirou estaba en medio de una clase de vuelo en la que se quería comprobar quién era el más rápido de la clase.

"Por el momento soy el segundo y está bien pero quiero intentar ser el primero, así mis padres y Katsuki estarán orgullosos de mí."

El pelirrojo se esforzó para tomar una mayor velocidad y alcanzar al que iba delante, que era nada más y nada menos que Tetsutetsu.

"¡El maldito Kirishima está queriendo adelantarme pero no se lo voy a permitir!"

El dragón plateado quiso acelerar el vuelo mas de nada le sirvió cuando vio que Eijirou lo adelantaba.

—¡Ni se te ocurra quitarme el puesto, Kirishima!—Le recriminó en el idioma dragón.

Eijirou lo ignoró, pues ni siquiera consideraba ya a Tetsutetsu como un compañero desde aquel día en el que se atrevió a insultar a su amado Katsuki por celos.

"Ese puesto no tiene tu nombre, Tetsutetsu. Esto no ha acabado todavía."

Ambos compitieron entre ellos con ferocidad pero, finalmente; fue Kirishima el vencedor.

—Felicidades, Kirishima.—Le dijo Fatgum con una sonrisa cuando lo tuvo cerca.

—¡Gracias, profesor!

Otros compañeros también se acercaron y lo felicitaron. Obviamente, Tetsutetsu fue el único que no lo felicitó y se marchó sin decir nada.

—Has mejorado mucho, Kirishima.—En un futuro serás el mejor de todos.

—¡Eso sería genial!—Quiero que la gente  que quiero esté orgullosa de mí.

—Seguro que ya lo están, ¡ten fé en ti, muchacho!

—¡Sí!

Poco después, el profesor les dijo que podían marchase y así lo hicieron.

"Iré a buscar a Katsuki."—Pensó corriendo en dirección a la zona de los licántropos.

***

Más tarde, se encontró con el rubio cenizo por aquella zona y se acercó a él nada más verlo.

—¡Katsuki~!

Bakugou reconoció la voz de su novio y lo besó cuando estuvo cerca del susodicho.

—¿Qué tal el día, Ei?

—No ha estado mal pero he tenido un pequeño conflicto con Tetsutetsu hoy.

—¿Qué conflicto? ¿Acaso ha intentado ligar contigo de nuevo?—Cuestionó celoso.

—No, tranquilo; no se trata de eso. Eso sólo que estábamos haciendo una carrera en el cielo para ver quién era el alumno más rápido de la clase.—Al principio era él quien iba primero pero yo lo adelanté, le arrebaté la posición y se molestó por ello.

—Tchs, menudo idiota.—Enhorabuena por ser el mejor de tu clase, no esperaba menos de ti.—Le dijo con una sonrisa orgullosa.

El rostro de Kirishima se ruborizó y le sonrió tiernamente:

—¡Gracias, Katsu~!

Bakugou acortó la distancia con él y le dio un beso.

—Vamos a visitar a Izuku y luego comemos en mi casa, ¿de acuerdo?

—¡Sí!

Se tomaron de la mano y se dirigieron a la farmacia de Midoriya.

***

Cuando llegaron, no vieron al pecoso. Esto no les preocupó ya que supusieron que estaría en el almacén, así que Bakugou lo llamó:

—¡Izuku! ¡Eijirou y yo hemos venido a verte!

>¡Ya voy, Kacchan!

En cuestión de segundos, el joven de cabellos verdes apareció frente a ellos.

—¡Hola!—Los saludó con una amplia sonrisa.

—Hola, Midoriya. ¿Qué tal hoy?

—Bastante bien, he tenido muchos clientes hoy.—¿Qué tal vosotros?

—Yo bien, como siempre.—Respondió Katsuki.—Sin embargo, Ei sí que ha tenido un pequeño problema.

El exfantasma miró al pelirrojo y le preguntó:

—¿Qué te ha pasado, Eijirou?

Entonces el dragón le contó lo sucedido e Izuku contestó:

—¡Enhorabuena por haber sido el mejor!

—¡Gracias!

—Eijirou, ¿te preocupa lo que te ha pasado con Tetsutetsu? ¿Crees que te vaya a causar problemas?

—No sé, tal vez pero no me importa.—A mí no me da ningún miedo, aunque tampoco es que quiera problemas. Simplemente, si intenta fastidiarme, me defenderé.

—¡Bien dicho, Eijirou!—Es bueno que enfrentes tus problemas, yo mismo he tenido algunos inconvenientes con ciertos clientes durante el tiempo que he tenido abierta la farmacia pero bueno; así es la vida. Repleta de problemas.—Dijo con hastío.

—Sí, por desgracia...—Dijo el pelirrojo.—Por cierto, ¿tienes tiempo para venir con nosotros a comer?

—Mm... No, yo me tengo que quedar un rato más porque necesito obtener unos medicamentos para esta tarde, lo siento.

—¿En serio? ¿No puedes escaquearte por una vez?—Preguntó el licántropo.

—Me encantaría pero no puedo, sin embargo; mañana podríamos vernos en mi casa para comer. ¿Queréis?

—Por mí sí.—Dijo Katsuki.

—Yo también estoy de acuerdo.

—De acuerdo, entonces nos vemos mañana después de vuestras clases.

—Sí, vendremos buscarte.—Hasta mañana, Izuku.—Dijo Katsuki para luego darle un beso de despedida.

Kirishima y Midoriya también se despidieron con un beso para; poco después, el pecoso se quedase solo de nuevo y los otros dos salieran de la farmacia para dirigirse a la casa de Bakugou.

***

Notas finales: ¡Hasta aquí por hoy!

¡Espero que os haya gustado!