Un fantasma vs Un dragón.[Dekukatsu/Kiribaku]

Quincuagésimo segundo.

***
Kirishima se había convertido en dragón ya y sus novios estaban subidos a su lomo.

Bakugou se encontraba sentado junto con Midoriya, al que notaba inquieto.

—Estás muy nervioso, nerd.—¿De qué tienes miedo?

—No es miedo, sólo estoy emocionado por conocerlos.

—Je. Eres como un maldito niño.

—Tal vez pero no lo puedo evitar.

—Eres un jodidamente tierno.—Dijo Katsuki acercándolo a él para darle un beso.

Aquel gesto puso feliz al exfantasma, pues amaba recibir cariño del rubio cenizo.

—¡Te amo, Kacchan!—Exclamó abrazándose a él.

Aunque no lo admitiera, al licántropo le agradaba que sus novios lo mimasen mas no se lo iba a decir por el momento.

"En otra ocasión, para que no se confíen."

Por otra parte, Eijirou estaba también algo nervioso ya que no sabía si su padre aceptaría a Izuku.

"¿Le caerá bien? Mi padre puede ser bastante quisquilloso."

Poco a poco se fueron acercando a la zona de los dragones, allí Katsuki e Izuku pudieron ver que los había de distintos tipos, de colores peculiares y de distintos tamaños.

El licántropo estaba encantado con lo que veía, pues los dragones le parecían criaturas majestuosas.

Segundos después, Eijirou aterrizó cerca de su casa y sus amados bajaron de su lomo para que pudiera volver a su forma humana.

—¡Llegamos!—Exclamó.—Ahora, vamos por aquí.

Ellos lo siguieron y el pelirrojo los llevó hasta una casa oculta de piedra, ésta se veía imponente, pues la entrada era muy grande por si alguno de la familia o alguna visita quería pasar en su forma de dragón.

El dragón abrió la puerta y avisó a sus padres de su llegada, los cuales fueron a saludarlos.

—¡Hola!—Saludó su padre.

—¡Hola, chicos!—Saludó también su madre.

Los novios de Kirishima vieron a sus suegros y notaron que eran pelirrojos, aunque no de la misma tonalidad, pues el cabello de la madre era cobrizo y mientras que el de su padre era más oscuro.

—¿Quienes son ellos, hijo? ¿Amigos tuyos?—Cuestionó la dragona.

—No, ellos son Katsuki e Izuku, mis novios.

Su primera reacción fue sorprenderse pero luego procedieron a presentarse.

—Yo soy Nomi, encantada.

—Y yo soy Isao, encantado.

—Yo soy Katsuki.

—Y yo soy Izuku.

Tras presentarse, los adultos invitaron a los adolescentes y les ofrecieron bebidas antes de la comida.

—Nosotros sabíamos que a Eijirou le ha gustado Katsuki desde siempre, ya que él nunca lo ha ocultado pero nos ha pillado por sorpresa que también le guste otro muchacho.—Dijo Isao.

—Ciertamente es algo inesperado pero no tenemos ningún problema con una relación tan peculiar.—Añadió la pelirroja.—¿Queréis alguna bebida en concreto?

—Yo me conformo con agua.—Dijo Katsuki.

—Yo también, ¿y tú, Izuku?

—Sí, yo igual. Tengo mucha sed.

—¡De acuerdo!

Entonces Nomi se fue hacia la cocina y los dejó con su marido.

—Tengo curiosidad, Eijirou.

—¿Sobre qué?

—Pues quiero saber cuándo y cómo te enamoraste de Izuku porque no recuerdo que hayas mencionado alguna vez que él te guste.

Eijirou iba a ser honesto con sus padres, por ello no tuvo problema de responderle al mayor:

—Realmente yo sólo estoy enamorado de Katsuki, Izuku me cae bien y lo considero un compañero.

Isao parecía confundido, así que insistió:

—Pero... ¿Y por qué estás en una relación con él también entonces?

—Porque Katsuki está enamorado de los dos, así que; para poder estar juntos decidimos que lo íbamos a compartir.

Se hizo un silencio incómodo hasta que el licántropo decidió intervenir.

—Que quede claro que yo no estoy obligando a nadie a estar en esta relación y todos estamos de acuerdo con estar juntos.—Aclaró el rubio cenizo.

—Tranquilo, en ningún momento se me pasó por la mente que tú estuvieras obligando a nadie ni nada por el estilo.

—Vale, sólo quería aclararlo para que no haya malentendidos.

—Claro.

Entonces apareció Nomi, que había escuchado todo, y se unió a la conversación.

—Así que mi hijo sólo está enamorado de ti pero no de Izuku.

—Así es.

—Entonces Eijirou solamente se va a casar contigo, ¿no?

—No, se va a casar con nosotros dos, en caso de que pudiéramos.—Aunque no creo que vayamos a poder porque no se pueden casar tres personas a la vez.

—En la tribu de los dragones creo recordar que está permitido, ¿no es así, querido?

El pelirrojo más mayor reflexionó sobre ello y contestó:

—Yo también creo que se puede, podríamos consultarlo en un futuro cuando tengáis claro que os queráis casar.

—Suena bien, ya lo discutiremos en otro momento.—Dijo Katsuki.—Ahora quiero saber si puedo ayudar en algo con la comida.

—No, no hace falta.—Dijo Nomi.—Sin embargo, podéis ir poniendo la mesa.

Los tres adolescentes accedieron y ayudaron a acondicionar la mesa para luego comer.

Más tarde, ya en la mesa; surgió el tema de los estudios y el trabajo.

—Eijirou ya ha terminado su formación como dragón y ya es oficialmente un adulto provechoso en esta tribu.—Dijo Isao.—¿Qué hay de vosotros?

—Yo he superado la prueba de líder para la manada de los licántropos, así que en un futuro cercano yo voy a ser el líder.—Dijo Bakugou.

—¡Impresionante!—Exclamó el dragón mayor. Luego miró a Midoriya y también le preguntó.—¿Y qué hay de ti? ¿Tú también eres de alguna tribu?

El pecoso se puso nervioso, pues él se sentía como si no fuera nada especial.

—Yo no soy de ninguna tribu ni nada pero antes fui y un fantasma.

Sus suegros se quedaron atónitos y la señora Kirishima preguntó:

—¿Qué dejaste de ser un fantasma? ¿Cómo es eso?

—Es una larga historia pero no me importa contarla.

En ese instante, Isao y Nomi parecían muy interesados en lo que iba a contar Izuku, quién se acababa de convertir en el centro de atención.

***
Notas finales: ¡Hasta aquí por hoy!

¡Espero que os haya gustado!