Epílogo

539 55 11
                                    

Me encontraba arreglando mi cabello luego de mi primer show, frente al espejo. Hace algunos meses había salido de la universidad, y hoy ha sido mi estreno como estrella de Broadway.

Es increíble como las cosas pueden cambiar tanto en solo años. Jamás volví a enamorarme de alguien como de Callie, no tuve otra pareja después de ella. Siempre estuve esperándola, hasta hoy...

Unos toques en la puerta me sorprendieron.

—Pase —dije.

Una melena negra se apareció en la habitación, lo cual me sorprendió.

—Callie —sonreí con lágrimas en los ojos.

—Pequeña —se acercó hacía mí.

Corte la distancia y la abracé con fuerza, no queriendo soltarla nunca.

¿Esta vez sería para siempre? ¿Ella habrá encontrado a alguien más?

—Dime por favor que no has encontrado a nadie más... —rogó en mi oído y negué.

Entonces sus labios impactaron contra los míos, esto era lo que más había esperado durante años, sus carnosos labios acariciaban los míos, mientras su lengua exploraba mi boca.

Sus manos se posicionaron en mi cintura y me acercaron a ella.

—Cumpliste tu promesa... —sonreí.

—Siempre lo hago.

Nuevamente volvimos a besarnos, pero esta vez con más pasión.

Lo recuerdo como si hubiese sido ayer, fue de los días más felices de mi vida. Callie entre mis brazos, un nuevo aire, una nueva vida y por fin, mí felices para siempre.

Esperaba mi princesa desde hace 4 años, al fin la tenía entre mis brazos y esta vez, no la dejaría nunca más...

Metáfora de amorDonde viven las historias. Descúbrelo ahora