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Andromeda observo el papel con la dirección que Hermes le había dado. Al parecer Therby Swann se escondia en un departamento en Francia.
-¿quieres que te lleve?-pregunto Hermes.
-solo que me lleves,¿y Nico?
-el niño es algo escurridizo,ya lo encontrare.
-Mh-Andromeda se dio la vuelta,necesitaba que Hermes la llevara porque no podía usar su magia y llegar en dragón no era algo discreto,además estaba en el Olimpo, ahí no llegaban los taxis-en cuanto lleguemos,tu te vas.
Hermes levantó las manos con inocencia y de el closet,Andromeda sacó un baúl de madera. Dentro estaba su traje de cazadora, el mismo que había usado en la masacre de Volterra, completamente limpio y ordenado. También había una pistola y cartuchos.
-¿vas a hablarle amablemente?
-depende que tan dispuesto esté,ve por tu auto en lo que me cambio y ni una palabra de esto a nadie.
Andromeda quería mantener todo eso en secreto,en total solo dos personas sabían lo que haría con el medallon,Hefesto y el. No planeaba decírselo a alguien más. El Dios salió de la habitación y ella entró al baño para cambiarse. Se puso la ropa y dejo suelto su cabello.
Observo su reflejo,se veía diferente a la última vez que uso ese traje,aunque seguía dándole un lindo toque atemorizante ella no lucia tan enferma y triste como antes. Además ir a Francia solo implicaba una cosa, estaría más cerca de Klaus.
Al Original no lo había visto en meses,no habían tenido contacto alguno. Andromeda no envió cartas o mensajes. Simplemente desapareció y ahora estaba apuntó de volver al mundo,eso era atemorizante. Cuando se cambió observo la marca de nacimiento en su espalda,había pasado tanto desde que descubrío su verdadero origen.
Cazadora.
Caster.
Semidiosa.
Mujer lobo.
Pendragon.
Benet.
Argent.
Todo era complicado, siempre lo había sido y desaparecer sinceramente le había hecho olvidar todo. Cuando salió del baño Hermes estaba sentado en la cama con una foto en la mano.
Andromeda se acerco a él y se la quito, era la foto de su abuela Elena. La dejo en la mesa de noche y tomo la caja con los medallones.
-vamonos ya-dijo ella -el tiempo corre. Tengo que estar aquí antes de que alguno de mis hermanos se de cuenta.
Hermes se levantó y le índico que salieran por el balcón,Andromeda suspiró y de un salto bajo. El Dios apareció a su lado. La Benet camino hasta el coche de el Dios y entró a este.
-si que tienes prisa-dijo Hermes subiendo también y arranco.
El auto se levantó por los aires.
Como en Harry Potter pensó Andromeda con una sonrisa formándose en sus labios.
