PABLO GAVI
Subimos a la habitación después del partido, estoy completamente de bajón y solo quiero meterme en cama.
Cuando eres futbolista profesional no te sueles conformar con un empate, nosotros queríamos ganar para tener los seis puntos asegurados antes de jugar contra Japón.
Mi cabeza no para de pensar que podría haberlo hecho mejor o podría haber dado más de mi. Quieras o no toda España tiene puesta su confianza en nosotros y no queremos decepcionarlos.Aún encima me duele la tibia desde hace unas cuantas horas, debe de ser que me di un golpe grande en una de estas que me caí al suelo o me pelee por el balón con alguno del equipo alemán.
Pasamos por mi habitación antes y cojo el cargador del móvil, el cepillo de dientes y el chándal para ponerme mañana para el entrenamiento y así no perder tiempo mientras me voy a cambiar a mi habitación por la mañana.
Marfil me deja mi espacio y en si se lo agradezco porque no quiero pagar mi frustración con ella, también lleva un día jodido con el tema de su hermana y no quiero tampoco que esté mal por mi.
—Me voy a duchar rápido y ya nos metemos en cama ¿vale?—me dice suavemente antes de darme un beso en la mejilla. —Tampoco quiero agobiarte, así que piensa las cosas mientras y luego si quieres hablamos o si no pues hacemos otra cosa para que te despejes.
—No me agobias Elefante, anda dúchate y luego hablamos—esbozo una pequeña intentando que no se preocupe.
Ella sonríe antes de entrar al baño y cerrar la puerta, oigo como abre el grifo de la ducha y pone su musicote a todo volumen mientras empieza a cantar una canción de Maka. No puedo evitar sonreír mientras me la imagino dándolo todo en la ducha.
Me descalzo y me saco la camiseta, dejándome solo con los pantalones de chándal, mientras me tiro en su cama a mirar un poco en móvil. Miro las redes sociales por encima ya que están a rebosar por los resultados del partido de hoy, hay de todo, desde gente que nos pone a parir hasta otros que nos apoyan hasta el final, intento no mirar mucho esas críticas porque van a hacer que me coma el coco muchísimo más.
Miro un poco tiktok con una cuenta que pocos saben que tengo, así puedo ver la cantidad de cosas que suben las fans sin que se enteren de que soy yo. Tengo que admitir que algunas tienen mucha imaginación y hacen unos edits de locos. Tengo también unos whas de mi hermana Aurora animándome por el partido de hoy y recordándome que van a estar ya aquí para el partido contra Japón. La verdad es que me alegro mucho porque echo mucho de menos a mis padres y a mi hermana.
Escucho como la música se para y la puerta del baño se abre dejándome ver a la morena saliendo del baño mientras tararea una canción, lleva la toalla enrollada en la cabeza y una camiseta mia que me robó hace unos días adorna su cuerpo dejando ver sus piernas desnudas.
Es tan bonita joder.
—Me voy a cagar en el hotel y en todos sus muertos, me ha salido el agua helada cuando me estaba sacando la mascarilla del pelo—dice cabreada mientras se saca la toalla del pelo y coge un cepillo para desenredarlo.
—Que guapa—la vacilo yo con una sonrisa burlona cuando veo los pelos de loca que tiene al sacarse la toalla del pelo.
—Te voy a tirar el peine a la cabeza como no cierres la boca Gavira—me amenaza mientras se desenreda el pelo y me mira desde el espejo de enfrente de la cama.
Yo me rio antes de sacarle una foto desprevenida mientras me mira con cara de culo y esos pelos de bruja.
Se termina de peinar el pelo y luego se tira encima de mi en la cama mientras apoya su cabeza en mi pecho.
ESTÁS LEYENDO
EVITERNO ; pablo gavi.
FanfictionEviterno: que tiene principio pero no fin. Marfil Martínez, hija de Luis Enrique Martínez, el entrenador de la Selección Española de fútbol, acaba de pasar por una ruptura muy dolorosa y lo que menos quiere es volver a meterse en el ámbito del amor...