Inefable - Charles Leclerc

Capítulo 12

Pov Charles. 

Desde que me levanté esta mañana, tenía en mi cabeza el casi de beso de ayer con Olivia; pero no sé que esta pasando por mi cabeza, pues desde que la ví en aquella cafetería no he podido para de pensar en como sería besarla. Lo que menos pensaba el viernes era volverme a encontrar con ella, no tenía esperanzas de que ocurriera, pues hasta estuve en Madrid antesl gran premio para poder volver a verla, y no hubo suerte. Pero que estuviera aquí para mi no es solo cuestión de suerte; tampoco fue suerte que no tuviera fotógrafo para el fin de semana. Nada fue cuestión de suerte, sino del destino. Quizás ¿para qué estemos juntos?, eso no lo sé, pues yo tengo pareja y sobre ella, ojalá saberlo, pero no tengo ninguna idea; ¿para qué nos volviéramos a ver? eso seguro, y ahora por desgracia del destino no quiero que vuelva a Madrid.

Desde que terminó la carrera, la cual terminó pronto, me encuentro en mi pequeña habitación del box; no pensando en la carrea, si no pensando en Olivia, en como decirle que se venga conmigo a Mónaco. 

(...) 

La carrera acababa de terminar, voy hacia fuera para poder localizar a Olivia, no sé ni si quera que le voy a decir, pero tengo la necesidad de hablar con ella. Me encuentro con varios de los ingenieros, me encuentro con Carlos y su familia, y por fin la encuentro, está en el fondo de este viendo entusiasmada las fotos de su cámara. 

- Olivia - la llamo y automáticamente me encuentra con la mirada y viene hacía mi algo asustada, seguro que piensa que ha hecho algo mal. 
(...)
- Quiero decirte dos cosas, primero de todo quería pedirte perdón por lo de anoche. Fue una tontería, nos conocemos de poco y además tengo pareja, no sé si tú - me interrumpió antes de que terminara. No sé porque tuve que decir que fue una tontería, si lo hubiera sido no estaría pensando todo el rato en ella, en ese casi beso, y sintiéndome mal por Charlotte; solo tenía una cosa claro, y es que era un completo imbécil.
- No, no tengo pareja, y no te preocupes, como tú has dicho, ha sido una tontería - escucharlo de su boca dolía aún más - además, no te preocupes Charles, no creo que nos veamos mucho más, a no ser que vuelvas a Starbucks o si Carlos decide casarse en algún momento - decía esta mientras se giraba sobre ella misma para salir de aquella habitación.
- De eso te quería hablar - dije haciendo que esta automáticamente frunciera el seño - quiero que vengas a Mónaco - los ojos de Olivia se abrieron como platos.
-¿Qué?
- Quiero que seas mi nueva fotógrafa - era la única manera obvia con la que tenía oportunidades de poder tenerla cerca. 
- Yo no sé Charles - dijo antes de marcharse de la habitación, dejándome allí sin saber que decir y mucho menos que hacer, arrepentiéndome de lo de la anoche anterior. 

(...)

Ahora sí que se daba por terminado el fin de semana. Eran las once de la noche cuando me monté en el avión rumbo a Mónaco, después de todo el fin de semana lo único que necesitaba estar en mi apartamento solo, preparándome la carrera del próximo finde y esperando alguna señal de Olivia. 

En estos momentos, el avión acababa de llegar a Mónaco. Encendí mi teléfono y ví varias notificaciones, pero entre ellas ninguna de Olivia; aunque si una de Charlotte, "avísame cuando aterrices", era su mensaje, aunque para mi sorpresa me estaba esperando al final de la pista de aterrizaje. 

- ¿Qué haces aquí? - fue lo primero que le dije, las ganas de estar con ella en estos momentos eran inexistentes. 
- He venido a recogerte, vamos a dormir en mi apartamento esta noche ¿te parece bien? - si no tenía ganas de estar con ella, menos de dormir en su apartamento. 
- Te lo agradezco, pero necesito descansar, quiero estar en mi apartamento tranquilo - la cara de Charlotte iba cambiando a disgusto mientras terminaba la frase - entiéndeme, necesito estar tranquilo.
- Esta bien - dijo. Aparcó el coche en el primer sitio donde pudo y salió del coche algo apurada - esta bien podemos ir, ¿puedo pasar la noche allí o te molesto? - dijo al subirse de nuevo al coche y poner rumbo hasta el apartamento.
- Como quieras - fueron las últimas palabras que sonaron en el coche hasta que llegamos al apartamento. 

2 días más tarde. 

Después de pasar la noche del domingo con Charlotte, nuestra relación esta en su peor momento. El apartamento estaba hecho un desastre, por no decir que había ropa de esta por todos lados, tal fue mi enfado que el lunes por la mañana cogí algo de ropa y me fui a pasar unos días a casa de mamá, pero no sin antes decirle que me avisara cuando el piso estuviera en condiciones. 

- Charles, cariño, el desayuno esta listo - me dijo mi madre desde el otro lado de la puerta de mi habitación. Me puse una camiseta que tenía en el cajón y las primeras calzonas que ví, y bajé hasta el comedor donde me estaba esperando mamá - ¿estas mejor? - mi madre sabía el cien por cien de mi relación con Charlotte, por lo que estaba al tanto de que no estábamos pasando por nuestro mejor momento. 
- Sí, será cuestión de días que estemos como antes - dije mientras comía la tostada con paté que me había preparado.
- No lo creo, pero ustedes sabréis - dijo Arthur entre dientes provocando una mala mirada por mi parte. 

Desde el domingo no había tenido respuesta de Olivia, por lo que estaba empezando a impacientarme, necesitaba una respuesta cuanto antes. 

- ¿Qué piensas Charles? - me preguntó mi madre al ver que estaba evadido de aquella conversación que tenían entre ambos. 
- No tengo fotógrafo para la próxima carrera. 
- ¿Y la fotógrafa de Barcelona? Sus fotos son increíbles y las que tomó a los chicos aún más, creía que era nueva - dijo Arthur - ¿Olivia era?
- Sí, es amiga de Carlos y me hizo un favor, solo eso. 
- Pues contrátala ¿hay algún problema? - sí muchos, entre ellos que si no fuera porque ella paró casi nos besamos.
- Ninguno - mentí. 
- Pués entonces ¿a qué esperas? - me dijo mi madre haciendo que una bombilla se encendiera en mi. Iba a cometer una locura, por ella, no sé porque, pero tenía que hacerlo.